El Madrid se engancha a Vinicius

El Real Madrid quiz¨¢ tenga que dirimir su presente enganchado al que iba a ser su futuro. Su bacheado tr¨¢nsito durante el curso ha encontrado en Vinicius el mejor flotador a la vista. El ¨²nico triunfante en la derrota ante la Real del pasado domingo, tambi¨¦n fue el gran victorioso en el azote copero al Legan¨¦s. Vinicius, revoltoso y con un gol de bandera, sac¨® al Madrid del tedio en el segundo tiempo, con la hinchada aferrada a las emociones venideras que hoy le destilan el brasile?o, Valverde, Brahim. ?ste, debutante cuando ya el Madrid hab¨ªa cogido vuelo sobre un Legan¨¦s que se desinfl¨® tras el intermedio.

Hasta el brindis por Vinicius en el segundo tiempo, un penalti (o casi penalti, o nada penalti) fue el ¨²nico testamento del Madrid en un primer tiempo de lo m¨¢s ordinario por su parte. Un Madrid chato, sin gancho para el poco p¨²blico que en estos d¨ªas desfila por Chamart¨ªn, donde hay poco que festejar y mucha contrariedad. La gente parece cansada de un equipo al que ve revenido. El foco est¨¢ en los que est¨¢n por llegar, a los que el mal paso del equipo fet¨¦n ha acortado los plazos. Caso de Vinicius y su supuesta chistera, o Brahim y su presunto hechizo. Isco sigue en el cuarto oscuro y Solari, pese a las bajas, no titube¨® en favor de Vinicius y Valverde.

Pero la noche, tan g¨¦lida en la atm¨®sfera capitalina como en el campo y las tribunas, de entrada no circul¨® por la ruta de Vinicus, sino por la de Odriozola. De inicio, el Madrid se subi¨® a hombros de su fogoso lateral derecho y su escolta Lucas V¨¢zquez. Solo por esa v¨ªa encontr¨® algo de metralla el Real. Lo suyo puso el Legan¨¦s. Pellegrino decidi¨® que Gumbau, un centrocampista ancla con buen pie pero con una carrocer¨ªa algo pesadota, militara como lateral zurdo postizo. El hombre, sin piernas de velocista, sufri¨® ante cada despegue de Odriozola.

Sin VAR

Al filo del descanso, Gumbau interpuso su corpach¨®n ante la carrera de Odriozola. M¨¢s liviano, Odriozola, ligeramente desequilibrado, acentu¨® el desmayo. El ¨¢rbitro decret¨® la condena para el cuadro pepinero. En el VAR, como el pasado domingo en el lance entre Rulli y Vinicius, nadie interpret¨® que la sentencia arbitral fuera un error flagrante, tan solo su particular interpretaci¨®n. Sergio Ramos dio un par de pasitos y enga?¨® al guardameta Cu¨¦llar.

Antes del pulso Gumbau-Odriozola, el Legan¨¦s tuvo el centro del escenario. Firme en defensa ante un adversario en los huesos, y picante en ataque. Las mejores ocasiones fueron visitantes, con el debutante dan¨¦s Braithwaite al frente. Primero casi caz¨® en el morro de Keylor un centro de Gumbau; luego cabece¨® sin chicha a las manos del costarricense; y m¨¢s tarde sac¨® la cadena a Nacho y frente al meta local cruz¨® demasiado el disparo. No acab¨® ah¨ª su repertorio. Su segundo cabezazo de la noche ya tuvo dinamita. Keylor respondi¨® a lo Keylor: de maravilla. El arresto no le ha mermado la agilidad.

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Amenazaba el Legan¨¦s y no se enchufaba el Madrid, sin expresividad en el juego, sin volumen. Ni Valverde ¡ªfutbolista de buen trazo e interesante cat¨¢logo¡ª ni Ceballos son dos cornetas. No encontraba el ritmo el Real, hasta que lleg¨® el penalti. Ah¨ª capitul¨® el Legan¨¦s, encapotado todo el segundo acto, por m¨¢s que Pellegrino rectificara y diera carrete a Silva en detrimento del superado Gumbau.

Apesadumbrado el Legan¨¦s, ya menos macizo, y con otra marcha el conjunto de Solari, el Madrid fue otro. Nada deslumbrante, pero s¨ª con otro cuajo. Se anim¨® Vinicius, un agitador al que solo le faltaba punter¨ªa. El chico lo intent¨® con alg¨²n remate combado, pero sin ¨¦xito. Mientras le llegaba su momento, s¨ª acredit¨® su papel de gregario. Lo hizo en el segundo tanto. Bustinza cometi¨® una pifia en una cesi¨®n a Cu¨¦llar. Benzema, despierto, birl¨® la pelota y combin¨® con Vinicius. Al muchacho se le supon¨ªa ansioso por marcar y estaba a un paso de la red y con las puertas abiertas. Pero Lucas estaba a¨²n m¨¢s cerca del bingo y el brasile?o le dio cita con el gol. A Vinicius le quedaba una bala. Y justo antes de que Brahim le relevara, ya con Isco sobre la pradera, el sudamericano estamp¨® el gol de la noche. Un gol de aire mesi¨¢nico para el madridismo, que busca nuevos trovadores. A un centro de Odriozola respondi¨® Vinicius con un remate de volea, un remate que exig¨ªa tanta coordinaci¨®n como punter¨ªa. El disparo tuvo de todo. Un golazo para coronar la semana Vinicius. Nada mereci¨® m¨¢s serpentinas de la hinchada que la retirada del brasile?o y su testigo a Brahim. La gente suspira porque el ma?ana sea hoy. No hay sala de espera cuando se advierte una deriva. Gripados algunos de los llamados a liderar la primera unidad, se atisba un repentino cruce de caminos. El hoy es de los vinicius. El ma?ana ya se ver¨¢.