El antidopaje espa?ol intent¨® una operaci¨®n a lo Armstrong contra Contador
El director de la agencia nacional ofreci¨® en 2014 levantar la sanci¨®n al doctor Celaya si este incriminaba al ciclista de Pinto
El caso Armstrong ha supuesto, quiz¨¢s, la exhibici¨®n m¨¢s espectacular que se conoce del poder de la justicia deportiva, y, tambi¨¦n, la radiograf¨ªa m¨¢s clara de los mecanismos de su funcionamiento.
Lance Armstrong perdi¨® todos sus t¨ªtulos y su condici¨®n de mejor ciclista de la historia del Tour cuando la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA) consigui¨® que se le declarara culpable de dopaje gracias a un caso construido sin m¨¢s pruebas que la declaraci¨®n de varios compa?eros ciclistas del US Postal arrepentidos. Con Armstrong fueron sancionados a perpetuidad dos m¨¦dicos deportivos ¡ªMichele Ferrari y Pedro Celaya¡ª y su director Johan Bruyneel. Los ciclistas que les delataron obtuvieron, a cambio de su testimonio acusador, unas sanciones de seis meses, en lugar de dos a?os, el m¨ªnimo reglamentario, por su propio dopaje. A un tercer m¨¦dico que ayud¨® en la acusaci¨®n, Luis Garc¨ªa del Moral, se le redujo la sanci¨®n.
La justicia de la delaci¨®n gratificada vivi¨® su apoteosis, su glorificaci¨®n, tambi¨¦n en Espa?a, donde, a imitaci¨®n de la USADA, la agencia nacional, la AEPSAD, intent¨® una especie de operaci¨®n Armstrong. El objetivo en este caso fue Alberto Contador, el mejor ciclista espa?ol del siglo XXI.
La liberaci¨®n esta semana de los papeles de la ¨²ltima vista ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) del caso Armstrong, que se cerr¨® en octubre pasado, ha permitido documentar los hechos.
En 2014, poco despu¨¦s de que Contador hubiera cumplido una sanci¨®n de dos a?os por dopaje, el director de la AEPSAD, Enrique G¨®mez Bastida, intent¨® que Pedro Celaya colaborara con su objetivo: quer¨ªa probar que Contador no solo se hab¨ªa dopado para ganar el Tour de 2010, por lo que fue sancionado dos a?os, sino que antes tambi¨¦n hab¨ªa recurrido a sustancias dopantes. A cambio de su colaboraci¨®n le prometi¨® que se le levantar¨ªa la sanci¨®n.
Celaya, m¨¦dico del US Postal en 2004, cumpl¨ªa entonces una sanci¨®n de ocho a?os por su participaci¨®n en el caso Armstrong. Entre 2007 y 2009, Contador hab¨ªa corrido en el Discovery y en el Astana, equipos dirigidos por Bruyneel en los que Celaya tambi¨¦n era m¨¦dico. En esas tres temporadas, el corredor de Pinto gan¨® dos Tours, un Giro y una Vuelta.
En 2016, durante la vista ante el TAS del recurso de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), que quer¨ªa aumentar su sanci¨®n, el propio Celaya narr¨® su reuni¨®n con la AEPSAD:
¡ªFui a Madrid a una reuni¨®n con la Agencia Espa?ola Antidopaje en la que me ofrecieron quitarme la sanci¨®n si declaraba contra algunas personas, aunque fueran mentiras. Fui a la reuni¨®n porque pens¨¦ que tendr¨ªa la oportunidad de decir la verdad, pero all¨ª vi que el acuerdo de cooperaci¨®n que me ofrec¨ªan implicaba a cierta persona. Les dije que si ten¨ªa que hablar de esa persona solo podr¨ªa decir algo positivo, cosas positivas sobre ¨¦l. Pero ellos me respondieron que para arreglar mi asunto tendr¨ªa que decir algo negativo sobre esa persona, aunque no fuera verdad. Me desilusion¨¦ tanto que me fui de la agencia.
¡ª?Y c¨®mo se llamaba esa persona de la que le pidieron que diera informaci¨®n negativa?
¡ªEra un ciclista, y su nombre es Alberto Contador.
Consultado por este peri¨®dico, G¨®mez Bastida confirma la reuni¨®n, a la que tambi¨¦n asisti¨® Lourdes V¨¢zquez, abogada de la agencia. ¡°Quisimos intervenir porque no pod¨ªamos quedarnos fuera de un caso en el que hab¨ªa tantos espa?oles implicados¡±, reconoce Bastida, quien precisa que la agencia espa?ola actu¨® como intermediaria de la estadounidense. ¡°Buscamos la colaboraci¨®n de Celaya, que no nos la prest¨®, como s¨ª que logramos la de Garc¨ªa del Moral, quien no solo testific¨® contra Bruyneel sino que desvel¨® que la federaci¨®n espa?ola de ciclismo hab¨ªa contratado a Michele Ferrari en 1996 para preparar al equipo ol¨ªmpico y que ¨¦l mismo, Del Moral, compraba la EPO para la preparaci¨®n¡±.
Celaya no habl¨® contra Contador ni tampoco acept¨® en ning¨²n momento su participaci¨®n en la organizaci¨®n del dopaje en el US Postal. Su silencio ante el TAS, ante el que invoc¨® el secreto profesional, le cost¨® una acusaci¨®n directa de vasallo de la omert¨¤, la ley del silencio que protege a los malos del pelot¨®n, por parte del ¨¢rbitro principal, el canadiense Yves Fortier, y un aumento de su sanci¨®n, que pas¨® de ocho a?os sin poder ejercer la medicina deportiva en un equipo a perpetuidad. En el mismo juicio ante el TAS, se le redujo de perpetua a cinco a?os la sanci¨®n a Garc¨ªa del Moral. El testimonio de Celaya fue considerado no cre¨ªble. El de Del Moral y el de los ciclistas arrepentidos ¡ªuna declaraci¨®n jurada redactada por los abogados de la USADA¡ª se consider¨® cre¨ªble. Hincapi¨¦, Zabriskie, Leipheimer, Barry, Van de Velde y Danielson condenaron a su doctor.
A Celaya tampoco le ayud¨® mucho ante los ¨¢rbitros del TAS un interrogatorio en el que critic¨® duramente el sistema de justicia deportiva que rige en el mundo.
Un mill¨®n de euros
¡°?Se acuerda usted de c¨®mo su testimonio fue considerado ya no cre¨ªble por el tribunal de la USADA que le sancion¨® con ocho a?os?¡±, le preguntaron. ¡°?C¨®mo no voy a acordarme despu¨¦s de la cantidad de pruebas objetivas que remit¨ª al tribunal para probar que en las fechas que dec¨ªan que hab¨ªa estado en la Vuelta hab¨ªa estado trabajando en mi consulta en Gipuzkoa, y despu¨¦s de tantas mentiras que tuve que aguantar en mi contra? Me han tratado de una manera despreciable, pero no he recurrido porque no tengo dinero para hacerlo y porque quiero seguir adelante con mi vida y con mi profesi¨®n. Y tambi¨¦n porque no creo en el sistema¡±, le respondi¨® Celaya.
?¡°No me hace gracia participar de una farsa¡±, dice Celaya dos a?os despu¨¦s. ¡°Por eso me desahogu¨¦ en mis de declaraciones y cumpl¨ª con la ¨¦tica de mi profesi¨®n en todo, sin juzgar a nadie, sin atentar contra la salud de nadie y manteniendo el secreto profesional¡±. Cuando se le sancion¨®, algunos ciclistas de sus equipos, como Zubeldia e Irizar, hicieron p¨²blico su apoyo a Celaya, y a lo bien que les hab¨ªa tratado.
La ¨²ltima comunicaci¨®n del TAS, remitida la pasada semana, se?ala que el tribunal no acepta la petici¨®n de USADA y AMA de que los gastos legales que les ha supuesto la sanci¨®n a perpetuidad a todos los colaboradores de Armstrong, que se elevaban a cerca de un mill¨®n de euros, los abonaran las personas sancionadas. ¡°Yo no puedo pagar¡±, hab¨ªa advertido Bruyneel. ¡°Estoy al borde de la bancarrota. No tengo ni para pagar a mis abogados. Adem¨¢s, con esta sanci¨®n, no veo c¨®mo encontrar trabajo. Yo creo que ya me han castigado lo suficiente como para a?adir ahora esto¡±. Se ahorran Bruyneel y los dem¨¢s sancionados la iron¨ªa de pagarle a la USADA los 2.000 euros que ha facturado por los gastos de viaje de su testigo estrella, Garc¨ªa del Moral, aquel cuya palabra gratificada supuso la gota que colm¨® el vaso de las pruebas contra todos.
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