Djokovic, Murray y gigantes en horas bajas

Lo que a priori era un grupo muy complicado, los ¨²ltimos acontecimientos lo han transformado en un arranque bastante m¨¢s amable; no exento de trampas, pero desde luego mucho menos espinoso. Espa?a sonri¨® al conocer la baja a ¨²ltima hora del fiero Daniil Medvedev, agotado y a priori la gran amenaza de Rusia, ganadora en 2002 y 2006, y finalista en 2007. Pero desde entonces, poca cosa. Cuenta con dos buenos argumentos individuales, Kharen Khachanov y Andrey Rublev, pero flaquea en el dobles. A la inversa, Croacia cuanta con una buena n¨®mina en parejas, pero llega despu¨¦s de un polvor¨ªn. A la ausencia de Marin Cilic se unieron las salidas del seleccionador, Zeljko Krajan, y el ca?onero Ivo Karlovic debido a un embrollo econ¨®mico con el reparto de las ganancias. Borna Coric ser¨¢ su referencia.

GRUPO A. Djokovic, la jerarqu¨ªa ¡®bleu¡¯ y la ¡®cenicienta¡¯ Jap¨®n

Aunque cost¨® ara?ar el ¡°s¨ª¡± de Novak Djokovic, el cuadro serbio contar¨¢ finalmente con su l¨ªder, que estar¨¢ acompa?ado por Dusan Lajovic, Janko Tipsarevic, Viktor Troiki y Filip Krajinovic. Dirige desde el banquillo Nenad Zimonjic, un hombre Davis que disput¨® 55 eliminatorias como jugador y suma m¨¢s triunfos que nadie (43) con su selecci¨®n. Pese a contar con Nole ¨C34 victorias y 10 derrotas en 25 series¨C y miembros experimentados, Serbia tan solo ha podido conquistar una Ensaladera en los ¨²ltimos tiempos. Fue en 2010, en Belgrado y contra Francia. La cita supondr¨¢ la despedida deportiva de Tipsarevic, de 35 a?os y con 35 apariciones a sus espaldas.

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Precisamente, los bleus fueron protagonistas de la ¨²ltima final, a¨²n bajo el antiguo formato. Equipo de pedigr¨ª, cedieron ante Croacia, pero ha sido uno de los m¨¢s competitivos en la historia de la competici¨®n ¨Cposee 10 trofeos, solo por detr¨¢s de Estados Unidos (32) y Australia (28)¨C y en las ¨²ltimas ediciones casi siempre ha ense?ado los colmillos: venci¨® en 2017 y en 2014 y 2010 fue finalista. El carism¨¢tico Yannick Noah dio un paso a un lado y ahora capitanea Sebastien Grosjean. El t¨¦cnico ha alistado al veterano Jo-Wilfred Tsonga, el d¨ªscolo Benoit Paire y el el¨¢stico Gael Monfil, que reemplaza a Lucas Pouille; a ellos se suma el consolidado d¨²o formado por Pierre-Hugues Herbert y Nicolas Mahut.

Frente al poder¨ªo galo y el intimidatorio esp¨ªritu competitivo de los serbios, Jap¨®n interviene como el conjunto m¨¢s d¨¦bil del grupo. Pese a haberse sostenido en el Grupo Mundial durante los ¨²ltimos a?os, el equipo nip¨®n tiene escasa recorrido en la Davis, con una sola final en tiempos remotos (1921). A ello se a?ade la baja de su estandarte, Kei Nishikori, que no comparece por problemas en un codo. La n¨®mina est¨¢ encabezada por Yoshihito Nishioka (70 del mundo), junto a Yasukata Uchiyama, Taro Daniel y Ben McLachlan; el banquillo lo ocupa Satoshi Iwabuchi. Este a?o, no obstante, Jap¨®n gan¨® la Copa Davis j¨²nior y en el horizonte se adivina talento en Shintaro Mochizuki.

GRUPO C. Oficio, juventud y nostalgia en un grupo abierto

Lejos quedan ya los tiempos de bonanza de Alemania, nost¨¢lgica ahora porque mira al pasado y recuerda las diabluras de Boris Becker y el tenis metal¨²rgico de Michael Stich. Con ellos, tres t¨ªtulos, los tres ¨²nicos: en 1988 y 1989, todav¨ªa con la bandera Federal, y en 1993. A partir de ah¨ª, un secarral porque el equipo fue desapareciendo del mapa, a excepci¨®n de la semifinal firmada en 2007. La gran esperanza se llama Alexander Zverev, pero Sascha se desentiende ¨Cdecidi¨® no disputar la fase final porque prioriza unos bolos con Federer en Latinoam¨¦rica¨C y el capit¨¢n Michael Kohlmann tirar¨¢ de Jan-Lennard Struff (36 de la ATP), el est¨¦tico Philipp Kohlschreiber, Dominik Koepfer, Kevin Krawietz y Andreas Mies.

Si en Alemania a?oran a Becker, en Argentina echan de menos al legendario Guillermo Vilas ¨Cm¨¢s triunfos (57), series (29) y a?os jugados (14)¨C y Juan Mart¨ªn del Potro. El gigant¨®n decidi¨® cerrar un ciclo tras ganar la competici¨®n en 2016, frente a Croacia, y ahora les corresponde a Diego Schwartzman, Guido Pella, Horazio Ceballos y Leonardo Mayer, tenistas de calidad y oficio, llenar ese vac¨ªo. El gu¨ªa espiritual del grupo es Gast¨®n Gaudio, campe¨®n de Roland Garros en 2004. Alcanzada la cima hace tres a?os, la historia refleja previamente cuatro semifinales: la de 1981 y el prol¨ªfico lustro de 2006, 2008 y 2011.

Mientras, Chile se agarra sin excesiva fe al br¨ªo del joven Cristian Gar¨ªn (23 a?os, 34 del mundo) y la torre Nicol¨¢s Jarry, en un elenco que se queda muy corto porque el nivel de los tres acompa?antes ¨CAlejandro Tabilo (212), Marcelo Tom¨¢s Barrios Vela (324) y Hans Podlipnik-Castillo (129)¨C es discreto. El seleccionador Nicol¨¢s Mass¨², tutor actual del austriaco Dominic Thiem, logr¨® devolver al equipo al Grupo Mundial y cuenta con la asistencia del controvertido Marcelo R¨ªos, exn¨²mero uno. Por delante, el reto de saber competir entre gigantes. La final de 1976 (4-1 ante Italia) marca el mejor resultado hist¨®rico.

GRUPO D. Australia, un gigante en horas bajas

Pese a ser uno de los t¨®tems de la competici¨®n, Australia ¨C28 t¨ªtulos y 19 finales, un verdadero transatl¨¢ntico¨C no escapa de la traves¨ªa por el desierto que inici¨® a partir de 2003, a?o de su ¨²ltimo ¨¦xito. Entonces bati¨® a Espa?a y en los dos cursos previos firm¨® dos subcampeonatos, pero luego se diluy¨® conforme la nueva hornada de jugadores, tan prometedores como decepcionantes, no fue respondiendo a las expectativas. Para elevar el vuelo de nuevo, el pa¨ªs oce¨¢nico recuper¨® a Lleyton Hewitt, la gran estrella de hace dos d¨¦cadas y ahora timonel. La excentricidad de Nick Kyrgios, genial y desidioso a la vez, contrasta con el buen hacer de Alex de Mi?aur, John Millman, Jordan Thompson y el doblista John Peers.

Por su parte, B¨¦lgica pone sobre la mesa la competitividad que ha ofrecido durante el ¨²ltimo lustro. En 2015 cedi¨® en la final contra Gran Breta?a y en 2017 tute¨® a Francia, aunque peca de tener un listado de tenistas demasiado tiernos. Al frente figura David Goffin, un meteorito (11 del mundo) que encarna esa mezcolanza de talento y fragilidad, y a sus costados le acompa?a una patrulla de jornaleros: el bregador Steve Darcis (157), Kimmer Coppejans (158) y el binomio Joran Vliegen-Sander Gille para el dobles. Johan van Herck capitanea un conjunto que no entra en las quinielas, pero que puede comprometer a sus rivales si estos se despistan lo m¨¢s m¨ªnimo.

Si B¨¦lgica se edifica sobre un bloque m¨¢s o menos uniforme, Colombia se apoya claramente en los hombros de Juan Sebastian Cabal y Robert Farah. Estos son, al fin y al cabo, la pareja m¨¢s en forma del circuito; lideran el ranking y conquistaron Wimbledon y el US Open este verano. El dobles tendr¨¢ una importancia capital esta edici¨®n ¨Clas series son al mejor de tres, no de cinco¨C y las opciones de su equipo pasan por ellos. En t¨¦rminos individuales, la historia es bien distinta. El seleccionador Pablo Gonz¨¢lez combina la veteran¨ªa de Santiago Giraldo (280) y Alejandro Gonz¨¢lez (471) con la juventud de Daniel Gal¨¢n (191) y Nicol¨¢s Mej¨ªa (357). Colombia, sin tradici¨®n en la Davis ¨Csolo ha estado un a?o en el Grupo Mundial¨C, es el caramelo del grupo.

GRUPO E. El incre¨ªble regreso de ¡®Sir¡¯ Murray

Cl¨¢sica entre las cl¨¢sicas, Gran Breta?a es la ¨²nica selecci¨®n que ha participado en todas las ediciones, completando un marat¨®n de 250 eliminatorias. Ahora bien, atr¨¢s quedaron los mejores tiempos, cuando engarz¨® nueve de sus diez Ensaladeras en la primera mitad del siglo XX. Despu¨¦s, tan solo una, la de 2016 frente a B¨¦lgica. El s¨ªmbolo de esa ¨²ltima coronaci¨®n fue Andy Murray, que regresa a filas despu¨¦s de dos operaciones de cadera y de tener pr¨¢cticamente colgada la raqueta. ?l encabeza a los de Leon Smith, que tiene un buen fondo de armario con Daniel Evans (42) y Kyle Edmund (68), y una buena baza de doblistas con Jamie Murray y Neal Skupski.

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Enga?osa, Kazajist¨¢n no cuenta con grandes nombres pero es una adversaria correosa. Comenz¨® a competir de forma independiente a partir de 1995 ¨Cantes estaba integrada en la URSS¨C y ¨²ltimamente se hab¨ªa hecho fuerte en casa, con 11 triunfos en las 12 ¨²ltimas series. En el global hist¨®rico de la competici¨®n, tiene un registro de 43 en 72. El t¨¦cnico Dias Doskarayev se encomienda al emergente Alexander Bublik (22 a?os, 48 del mundo) y al avezado Mikhail Kukushkin, siempre dif¨ªcil de batir. A ellos se suman Dmitry Popko (189), Aleksandr Nedovyesov (247) y Andrey Golubev, su especialista en parejas. Despach¨® a Portugal para firmar el pase a la ¨²ltima fase.

Si ellos conforman un bloque uniforme y rocoso, Holanda es m¨¢s bien lo contrario, con un equipo claramente descompensado. Posee un dobles notable ¨CWesley Koolhof y sobre todo el veterano Jean-Julien Rojer, el 12 y el 22 del mundo en la modalidad, respectivamente¨C, pero solo Robin Haase (162) parece poder ara?ar puntos en los individuales. Tallon Griekspoor (177) y Botic Van de Zandschulp (200) son los otros elegidos por el preparador Paul Haarhuis, a los mandos de una selecci¨®n que hist¨®ricamente ha tenido presencia, pero que no acostumbra a tener ¨¦xito; su tope lo fijan las semifinales de 2001. Accedi¨® a la fase final de Madrid al apear a la Rep¨²blica Checa.

?GRUPO F. EE UU, la gran potencia en busca del rumbo perdido

Vencedora en la inauguraci¨®n de 1900 y plusmarquista de la competici¨®n con 32 trofeos, despu¨¦s de ganar 219 de sus 291 series, Estados Unidos trata de encontrarse a s¨ª misma. Su ¨²ltimo laurel es el de 2007 y desde hace a?os intenta fabricar una gran estrella que tire del carro ¨Csiguiendo la pista de los Connors, McEnroe, Agassi, Sampras, Roddick¡­¨C, pero no llega. Su factor¨ªa produce proyectos interesantes, aunque ninguno termina de despegar. Mardy Fish conf¨ªa en la camada formada por Frances Tiafoe (21 a?os), Reilly Opelka (22) y Taylor Fritz (22), tutelados por el bombardero Sam Querrey (32) y el enigm¨¢tico Jack Sock, formidable doblista venido a menos.

Con una ¨²nica Ensaladera en su expediente, lograda en 1976, Italia es un lobo con piel de cordero que asiste reforzada por un plan nacional que est¨¢ empezando a obtener frutos. A la calidad de Fabio Fognini y el tenis curtido de Andreas Seppi y Simone Bolelli, se une la combatividad de Lorenzo Sonego y sobre todo la pegada del prometedor Matteo Berrettini, que llega procedente del Masters de Londres. Aspiran los italianos a reverdecer su tenis, deste?ido en los tiempos modernos despu¨¦s de la gran ¨¦poca de Nicola Pietrangeli ¨Cm¨¢s triunfos (120), m¨¢s series (66) y m¨¢s a?os jugados (18)¨C y el que ahora es comandante en el banquillo, Corrado Barazzutti.

Si la propuesta italiana es atractiva, no lo es menos la de Canad¨¢. Solo figuran un par de semifinales en su registro (1913 y 2013) y no tiene excesivo cach¨¦ ¨C155 eliminatorias en 90 a?os, con 67 victorias¨C, pero aterriza con dos de los j¨®venes con mayor proyecci¨®n del circuito: Denis Shapovalov (20 a?os, 15 del mundo) y Felix Auger-Aliassime (19/21). El primero, talentoso y en¨¦rgico zurdo, ya presume de haber derrotado a Rafael Nadal y recientemente disput¨® la final de Par¨ªs-Bercy; el segundo, de derecha imponente, fue semifinalista este curso en Miami y Queen¡¯s. Les secundan dos viejos rockeros como Milos Raonic y Vasek Pospisil. El seleccionador es Frank Dancevic.