Laia Sanz: ¡°Soy un poco masoca, me gusta complicarme la vida¡±

¡°Soy un culo inquieto¡±, dice Laia Sanz (Corbera de Llobregat, Barcelona; 35 a?os). Para hacer todo lo que a una deportista como ella se le pasa por la cabeza, tienes que ser as¨ª. ¡°Adem¨¢s, me gustan mucho los retos¡±, a?ade. Tras un a?o terrible para ella, en que contrajo la enfermedad de Lyme mientras todo el mundo trataba de esquivar la covid y se reclu¨ªa en casa; despu¨¦s de meses sin saber qu¨¦ ten¨ªa ni c¨®mo tratarse, de muchos d¨ªas de fiebre y de pr¨¢cticamente medio a?o tomando antibi¨®ticos, la piloto m¨¢s multidisciplinar del panorama mundial, mito viviente, ha decidido apostar por un m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa.

Despu¨¦s de acabar a trompicones su und¨¦cimo Dakar de los once que ha disputado ¨Calgo que muy pocos consiguen y que no ha logrado ning¨²n otro piloto espa?ol¨C, la catalana ha regresado al Mundial de Trial ocho a?os despu¨¦s y al de Enduro despu¨¦s de cuatro a?os. Y lo ha hecho con victoria. Si hace una semana ganaba la primera prueba de la temporada en Trial, en Italia, este s¨¢bado termin¨® tambi¨¦n en primer lugar la primera cita de Enduro, en Portugal.

No est¨¢ bien f¨ªsicamente, pero es un animal competitivo. Y la t¨¦cnica le salva, especialmente en trial, donde acumul¨® 13 campeonatos del mundo. Los ¨²ltimos dos cursos los combin¨® con el enduro, deporte en el que acab¨® ganando otros cinco mundiales. ¡°En aquella ¨¦poca, en trial sobre todo, viv¨ªa de las rentas. Hac¨ªa tantos a?os que hac¨ªa trial que me permit¨ªa el lujo de saltarme entrenos. Perd¨ª un poco la motivaci¨®n, y empec¨¦ con el enduro, donde al principio me met¨ªan unas palizas¡­ pero acab¨¦ ganando. Supongo que ahora el trial me vuelve a motivar porque s¨¦ que es dif¨ªcil ganar. Mis rivales de entonces han seguido evolucionando y en cambio mi nivel ha ido hacia atr¨¢s¡±, confiesa. Aun as¨ª hoy es la col¨ªder del mundial, empatada a puntos con Emma Bristow, su sucesora, campeona del mundo los ¨²ltimos siete a?os.

Sanz ha decidido volver a ocupar su agenda de viajes y pruebas. Todav¨ªa no est¨¢ recuperada tras aquella infecci¨®n bacteriana que la dej¨® hecha una piltrafa ¨C¡±Hace unos meses no pod¨ªa ni subir unas escaleras; estoy mejor, pero me canso mucho. Seis meses de antibi¨®ticos me dejaron muy d¨¦bil y con la barriga destrozada¡±, explica¨C, pero su mente necesitaba afrontar nuevos retos, sentirse competitiva. Y ni la fatiga le frena. ¡°Soy un poco masoca, me gusta complicarme la vida. Y me gusta mucho la moto¡±, se?ala.

Volver a GasGas, con quienes disput¨® el ¨²ltimo Dakar en Arabia Saud¨ª, le permiti¨® volver a tener moto de trial. Empez¨® a hacer salidas con amigos y le entr¨® el gusanillo. ¡°T¨¦cnicamente me encontr¨¦ muy bien, pero el f¨ªsico me pas¨® factura. El trial es muy explosivo. Y lo tienes que dar todo, especialmente ahora, que con el cambio de reglamento no puedes parar en cuanto entras a la zona. Cuando no est¨¢s en forma, aunque tu cabeza quiere hacer un movimiento, tus piernas est¨¢n cansadas, al final fallas. Pierdes mucho la precisi¨®n¡±.

El anuncio del regreso de Laia Sanz a estas dos disciplinas que abandon¨® en su d¨ªa para entrenarse espec¨ªficamente para correr el Dakar en moto se produjo apenas unas semanas despu¨¦s de que la deportista de Corbera de Llobregat debutara en una prueba del mundial de rallyies, en Andaluc¨ªa, con un Mini. ¡°Fue una pasada correr con un coche de verdad. Se me hizo todo bastante nuevo¡±, cuenta. Acab¨® en s¨¦ptima posici¨®n.

Muchos pensaron que aquello era el primer paso antes de anunciar que el pr¨®ximo Dakar lo disputar¨¢ en coche. Ella dice que no lo ha decidido todav¨ªa: ¡°Llevo muchos a?os en moto y cuesta dar el paso, pero tambi¨¦n es cierto que mi f¨ªsico no est¨¢ como hace diez a?os. Adem¨¢s, que no tengo 20 a?os y el peligro cada vez me frena m¨¢s. El Dakar ha cambiado mucho ¨²ltimamente. A m¨ª ya no me gusta tanto el Dakar en moto. Ya entra m¨¢s en juego el grado de locura que tengas. Y yo siempre he sido una piloto m¨¢s racional, en Sudam¨¦rica pod¨ªas planificar mejor; aqu¨ª es a ver qui¨¦n es el que aguanta m¨¢s tiempo con los ojos cerrados, eso no me va. Hemos visto muchos accidentes ¨²ltimamente. Con 25 a?os seguro que no era consciente de los peligros como ahora¡±.

Probablemente. Como probable es que tampoco pensara que a los 35 seguir¨ªa ganando montada en una moto de trial, disciplina en la que empez¨® a competir y a ganar con solo 12 a?os.

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