El Real Madrid vio salir en verano a su entrenador icono (Zidane) y a su capit¨¢n (Sergio Ramos), en ambos casos de una manera bastante poco amistosa. No reforz¨® la delantera, un movimiento que parec¨ªa inevitable para mejorar el equipo, seg¨²n la opini¨®n un¨¢nime. Por supuesto, no trajo a Mbapp¨¦. Se qued¨® sin la pareja referente de centrales de la ¨²ltima d¨¦cada (Ramos y Varane). No encontr¨® salida para viejas glorias con una elevada ficha (Bale, Marcelo e Isco). Y el fichaje m¨¢s caro del club (Hazard, 115 millones) figuraba ya en la columna de causas perdidas tras varios fiascos desde su llegada.

El paisaje de los blancos invitaba, cuando menos, a la cautela. Sin embargo, con el turr¨®n en la boca, su liderazgo en la Liga es tal que, si no termina levantando el t¨ªtulo, ser¨ªa considerado un descalabro. Con una jornada m¨¢s, aventaja en ocho puntos al Sevilla, en 13 al Betis, en 17 al Atl¨¦tico y Real, y en 18 al Barcelona.

Carlo Ancelotti -repescado del Everton seis a?os despu¨¦s de haber sido despedido porque el equipo necesitaba ¡°un nuevo impulso¡±- ha sabido conservar lo mejor de la segunda etapa ZZ (Courtois, el tri¨¢ngulo Casemiro-Kroos-Modric y Benzema) y ha solucionado, de momento, el d¨¦ficit atacante gracias a la aparici¨®n mariana de Vinicius: 10 goles y cinco asistencias en cuatro meses de torneo frente a los siete y nueve de los tres cursos anteriores completos.

Los mejores n¨²meros de una pareja de delanteros

Ya sin la mirada esc¨¦ptica de Zizou y con el pragmatismo de Ancelotti, no solo deton¨® Vinicius, sino que este encontr¨® el camino a Benzema, una alianza que se antojaba imposible. En el segundo partido, contra el Levante, el franc¨¦s le dio la primera asistencia de su vida al brasile?o. Hab¨ªan pasado 5.200 minutos y 103 encuentros de lejan¨ªa y, a menudo, incomprensi¨®n. Desde entonces, tres veces m¨¢s ha marcado Vini en todas las competiciones a pase de Karim.

Nadie lo hubiera podido pronosticar en agosto, pero, cifra a cifra, ellos son la segunda pareja de atacantes de las cinco grandes Ligas. Han participado en 36 dianas, solo dos menos que Lewandowski y M¨¹ller (Bayern). Porque la crecida de Vinicius ha sido un adem¨¢s a Benzema, que a los 34 a?os acumula sus mejores estad¨ªsticas en el torneo dom¨¦stico tras 18 partidos: protagonista en 22 tantos (15 goles y siete asistencias).

Y cuando el franc¨¦s ha faltado, resolvi¨® Vinicius (tres tantos y una asistencia en Elche, Anoeta y el derbi). Ancelotti empez¨® priorizando por la izquierda el apellido de Hazard, pero despu¨¦s del primer cohete del brasile?o en el Ciutat de Val¨¨ncia (doblete en el 3-3), ya no hubo debate. Ese d¨ªa empez¨® a pasarse del ¡°hermano, no juegues con ¨¦l¡±, de Benzema a Mendy de hace un a?o, al ¡°creo en ¨¦l, es top¡± de este septiembre. Con ellos, el Madrid luce la mejor cifra anotadora en Liga (41) del ¨²ltimo lustro.

De costa a costa

Con Courtois no ha habido novedades: sigue parando igual. O m¨¢s, porque su porcentaje de intervenciones en todas las competiciones es del 81%, el mejor de su trayectoria. Beneficiado, eso s¨ª, por una liguilla de la Champions no muy exigente (88%). En una temporada donde sus grandes competidores (Oblak y Ter Stegen) flojean, ¨¦l sigue a lo suyo. El tanto encajado este mi¨¦rcoles en Bilbao rompi¨® una imbatibilidad de 538 minutos, la quinta mejor racha de un meta blanco.

El tri¨¢ngulo infalible

A los 62 a?os, seguramente Ancelotti ya siente poca necesidad de darse pote. Tras golear 1-4 al Granada, reconoci¨® encantado que la media Casemiro-Kroos-Modric hac¨ªa cosas que nos les ped¨ªa. Ellos acabaron de armar al Madrid despu¨¦s de empezar el curso con el alem¨¢n lesionado y experimentando otras f¨®rmulas con Valverde, Camavinga e, incluso, Isco y Asensio. Sin embargo, desde el 0-5 al Shakhtar recurri¨® al molde cl¨¢sico y el Madrid se enderez¨®. Con una versi¨®n muy alta de Kroos y ¡°los menos de 30¡å que se empe?a en reivindicar Modric (tiene 36), el Madrid suma 13 victorias y dos empates en los ¨²ltimos 15 compromisos sin apenas rotaciones (en las diez citas previas, dos derrotas y dos igualadas).

El clic de Cornell¨¤

En el campo del Espanyol se terminaron las pruebas. La derrota (2-1) con Alaba de lateral izquierdo, cuatro medios y Casemiro de suplente movi¨® a Carletto a la reflexi¨®n. Al siguiente duelo, en Kiev, confes¨® que hab¨ªa concluido que el 4-3-3 era el mejor sistema para esa plantilla. Ya no movi¨® a Alaba de central, no negoci¨® la terna de la medular y, adem¨¢s, orden¨® con frecuencia a los suyos echarse un poco atr¨¢s para buscar los espacios. ¡°No es muy est¨¦tico, pero no tenemos medios para defender a campo abierto y lo hacemos bien¡±, argument¨®. Su primera idea de presionar arriba qued¨® aparcada.

El engrase Milit?o-Alaba

El estir¨®n del Madrid se ha producido con la ¨²nica novedad efectiva de Alaba (Camavinga es suplente). Su pareja con Milit?o en el centro de la defensa es el gran cambio de nombres. Las lesiones de Ramos y Varane en la segunda mitad de la pasada temporada ya ensayaron el salto, pero desde julio se quedaron sin red. El austriaco dirige y ataca mientras Milit?o domina por arriba y rectifica, si es necesario, por velocidad. Los c¨¢nticos recientes en el Bernab¨¦u al brasile?o, desterrado hace nueve meses, simbolizaron el subid¨®n del l¨ªder. Con ellos, m¨¢s Courtois y el denominado bloque bajo, los 16 tantos encajados en Liga es su segunda mejor cifra de la d¨¦cada, tras los 12 de la 2019/20. En el banco vuelve a esperar Nacho.

De los tres ratos veraniegos de Bale a la ¡°vuelta¡± de Hazard

En el desv¨¢n de los desterrados ha habido hasta causas perdidas que han dado alguna se?al de vida (Luka Jovic y Eden Hazard). Otros ¨¢ngeles ca¨ªdos, mientras, han seguido en el suelo (Isco, Bale y Marcelo). En plena crecida en el ¨²ltimo mes, el Madrid ha sido capaz de encontrar gotas de agua en los desiertos de Jovic y Hazard.

El serbio sali¨® en fr¨ªo en Anoeta por la lesi¨®n de Benzema, y acab¨® con un gol y una asistencia, toda una noticia en un jugador que cost¨® 60 millones y desde 2019 sumaba dos tantos y tres pases terminales. Y, en la ¨²ltima semana, el belga volvi¨® a disputar dos partidos seguidos como titular en tres d¨ªas, algo que su f¨ªsico no le permit¨ªa en septiembre, seg¨²n Ancelotti.

El t¨¦cnico no se mostr¨® tan complaciente con ¨¦l como Zidane, le dej¨® claro que la izquierda ahora solo tiene el nombre de Vinicius y lleg¨® a apelar a la fe para esperar su resurrecci¨®n. Su nivel de Inglaterra sigue siendo historia, pero el brote de covid le hizo un hueco por su extra?a derecha y, al menos, pudo completar dos duelos y dejar sendas actuaciones potables. En plena euforia, el italiano proclam¨®: ¡°Hazard ha vuelto¡±.

No hubo opci¨®n para decir lo mismo de otros. Bale, apuesta de los tres primeros encuentros, se lesion¨® en cuanto regres¨® al Bernab¨¦u en un entrenamiento. Desde entonces, lesiones, covid, minutos con Gales y ninguno como blanco desde el 28 de agosto. El capit¨¢n Marcelo cumple en silencio sus ¨²ltimos meses, lo mismo que Isco, que s¨ª ha generado m¨¢s ruido. Titular en agosto cuando faltaron Kroos y Modric, desde su presunta negativa a seguir calentando en Granada no ha vuelto a asomar. Al humanista y viejo zorro Carletto no le han faltado buenas palabras con el malague?o para bajar el volumen ambiental. De los canteranos, por su parte, no ha habido noticias.

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