Aleix Espargar¨® se equivoc¨® por mirar a la torre del circuito de Montmel¨®

Nada hac¨ªa imaginar que Aleix Espargar¨® terminar¨ªa el GP de Catalu?a sumido en un llanto desconsolado. En un fin de semana casi impecable, el de Granollers, segundo en el Mundial a solo ocho puntos de Fabio Quartararo, hab¨ªa dejado buenas sensaciones desde los primeros entrenamientos libres. El s¨¢bado, en la clasificaci¨®n, consigui¨® la pole por escasas cent¨¦simas y, confiado, afrontaba la carrera del domingo como su gran oportunidad para tomar las riendas del campeonato. Pero todo se trunc¨®. A una vuelta del final, cuando el de Aprilia cruzaba la l¨ªnea de meta en segunda posici¨®n, ya sin opciones de victoria, solt¨® la maneta del acelerador y comenz¨® a saludar a los aficionados presentes en Montmel¨®. En el box no se lo pod¨ªan creer. ¡°?Se pensaba que ya hab¨ªa acabado y queda una vuelta!¡±, gritaban en la retransmisi¨®n de DAZN. M¨¢s de veinte segundos despu¨¦s, al ver que sus rivales no bajaban el ritmo, Espargar¨® agach¨® la cabeza y volvi¨® a acelerar. Demasiado tarde. Perdi¨® todas las opciones de ser segundo y, tras adelantar a Luca Marini en la ¨²ltima vuelta, la de verdad, pudo terminar quinto.

¡°Estoy muy triste, si me pinchan ahora mismo no me sacan ni sangre¡±, dijo, cariacontecido, en la entrevista despu¨¦s de la carrera. Minutos antes, el espa?ol hab¨ªa regresado al box de Aprilia desolado, llorando bajo la visera del casco rosa que rend¨ªa honor a su hija M¨ªa, nacida hace cuatro a?os con una cardiopat¨ªa severa. De nada sirvieron los aplausos de todos sus mec¨¢nicos o el consuelo de Carmelo Ezpeleta, consejero delegado de Dorna. Espargar¨®, de 32 a?os, sab¨ªa que el error era suyo: ¡°No puedes permitirte un error as¨ª luchando por un campeonato de Moto GP. Me sabe muy mal por el equipo, solo me queda pedirles disculpas¡±.

El origen de la equivocaci¨®n est¨¢ en la torre del Circuito de Catalu?a. A diferencia del resto de circuitos del Mundial, la de Montmel¨® marca la pen¨²ltima vuelta como L1 ¡ªlap 1¡ª y la ¨²ltima como L0 ¡ªlap 0¡ª. En todos los dem¨¢s, la ¨²ltima vuelta es L1. ¡°No ten¨ªa mucho tiempo en la salida de la curva, as¨ª que solo he podido mirar en la pizarra [del equipo] la diferencia con Jorge Mart¨ªn. Las vueltas las he mirado en la torre¡±, dijo Espargar¨® tras la carrera. El de Granollers, claro, no recordaba la excepcionalidad de Montmel¨®: ¡°No me he acordado, la verdad. Me sabe muy mal. Esto no puede suceder, as¨ª que solo me queda volver a pedir disculpas al equipo. Hab¨ªamos hecho un trabajo muy bueno, pero bueno, son cosas que pasan¡±.

No es la primera vez que la torre de la recta principal desencadena una confusi¨®n as¨ª en el GP de Catalu?a. En 2009, en la categor¨ªa de 125cc, el toledano Juli¨¢n Sim¨®n, tambi¨¦n de Aprilia, crey¨® que hab¨ªa ganado la carrera a una vuelta del final y, como le sucedi¨® a Aleix Espargar¨® este domingo, perdi¨® varias posiciones para acabar siendo cuarto. El piloto de Villaca?as, sofocado por el error, reconoci¨® tras la carrera que pensaba que era la ¨²ltima vuelta: ¡°Cuando he querido reaccionar, iba en sexta, con la moto ahogada. He tirado de embrague, pero no ha podido ser. Cuando ocurren cosas como esta, a uno se le queda una cara de idiota tremenda. Y eso es lo peor¡±.

De haber sido segundo este domingo, Aleix Espargar¨® estar¨ªa a tan solo 13 puntos de Fabio Quartararo, l¨ªder en solitario del Mundial de Moto GP. Ahora, tras su error, el catal¨¢n se encuentra a 22 de la cabeza, casi una carrera completa: ¡°Ahora mismo me da igual haber perdido nueve que 900 puntos. Quer¨ªa subir al podio, quer¨ªa ganar y no lo he podido conseguir¡±.

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