Espa?a domina en Desaf¨ªo Urbi¨®n el Mundial de trail de la Espa?a vaciada

Dos amigos se retan en busca de la forma m¨¢s r¨¢pida de subir y bajar desde Covaleda (Soria) al Pico Urbi¨®n, el padre del Duero, y diez a?os despu¨¦s su obra se convierte en campeonato del mundo. Desaf¨ªo Urbi¨®n, un nombre acorde a sus or¨ªgenes, ha vivido este fin de semana su bautismo internacional, el colof¨®n al cari?o que ha sumado con el tiempo entre los corredores por monta?a, embaucados por tanta dedicaci¨®n, por ver un voluntario en cada esquina de un recorrido terrible, vecinos que enfrentan cada d¨ªa la despoblaci¨®n. Una cita en la que Espa?a estuvo a la altura de su rol organizador con cinco medallas y un nombre propio: Alain Santamar¨ªa, que se ha coronado este domingo como una de las grandes voces del trail tras proclamarse doble campe¨®n del mundo.

La falta de m¨²sculo por parte de las federaciones y el poder de los circuitos privados reparte el poder en el trail, lejos de la clara pir¨¢mide de poder de otros deportes. Espa?a albergaba el Mundial de la International Skyrunning Federation, que engloba a las federaciones de monta?a. Desaf¨ªo Urbi¨®n cont¨® con representaci¨®n de 41 pa¨ªses para las modalidades de ultra, kil¨®metro vertical y sky, la distancia intermedia, el valor de marca de Desaf¨ªo Urbi¨®n. El recorrido de unos 38 kil¨®metros y unos 2.800 metros de desnivel positivo con el que aquellos vecinos conquistaron corazones. Porque la despoblaci¨®n se intuye en el Sistema Ib¨¦rico, en sus carreteras envejecidas con escaso arc¨¦n que atraviesan pueblos que languidecen en invierno.

La dureza de Desaf¨ªo Urbi¨®n va m¨¢s all¨¢ de sus n¨²meros. Desde su perfil de constante sube y baja a la complejidad del terreno: no hay una zona que asuste, pero todo discurre por superficie minada: los metros de sendero limpio, sin ra¨ªces o piedras, se cuentan por cientos. Correr en praderas por 2.000 metros ¡ªse coronan tres cimas por encima de esta altitud¡ª es un arma de doble filo, pues el suelo es amable, pero las hendiduras dificultan la pisada. La subida desde la Laguna Negra, el epicentro tur¨ªstico, hasta Urbi¨®n es tan empinada que requiere una cuerda. Y el Hayedo, con may¨²scula, la subida final, ofrece escenas que piden una marcha f¨²nebre.

All¨ª, en la rampa m¨¢s dura del recorrido ¡ªpendiente por encima del 40% sin piedras a las que agarrarse, donde los mortales usan las manos, gatean, comen tierra¡ª fue donde Santamar¨ªa rompi¨® a Lorenzo Beltrami, que lo apost¨® todo a las bajadas, su maestr¨ªa, y no acab¨® de descolgar al riojano, obligado a dosificar tras ganar el viernes el Kil¨®metro Vertical. Sobrevivi¨® a los calambres, hasta que sus piernas despertaron. Lleg¨® en cabeza a esa ¨²ltima cima, llena de campanas y con un ambiente que hace olvidar por unos segundos unas constantes vitales de ingreso hospitalario inmediato. Y se dej¨® caer por una bajada r¨¢pida ¡ªque no f¨¢cil¡ª hacia Covaleda, al lugar del que hab¨ªa salido 3h33m11s antes. Diez minutos menos que su victoria el a?o pasado y arrebata a Manuel Merillas el r¨¦cord de la prueba.

Todo despu¨¦s de emerger entre la niebla el viernes a los pies del Moncayo, como el Chava en el Angliru, una comparaci¨®n que le emociona, pues fue ciclista profesional. As¨ª se llev¨® el kil¨®metro vertical que parti¨® de Aldehuela de ?greda, una pedan¨ªa de ?greda que no llega a la decena de habitantes. Desde sus calles empinadas, 4,8 kil¨®metros y 1.050 metros de desnivel positivo hasta Pe?a Negrilla, a 2.100 metros, el mejor mirador de la zona porque recoge la cima que asustaba a Gustavo Adolfo B¨¦cquer y cientos de kil¨®metros a la redonda. El riojano calculador se impuso a un especialista, el estadounidense Demoor Joseph, un esquiador de monta?a explosivo que le adelant¨®, pero tampoco le rompi¨®. As¨ª que cogi¨® su rueda y le machac¨® en el falso llano, los ¨²ltimos 50 metros, para ganar con 40m56s.

Tuvo tiempo para bajar y dar un alarido a Naiara Irigoyen, su pareja. Todo se pega, tambi¨¦n la estrategia de carrera, aunque es dif¨ªcil decir qui¨¦n ha contagiado a qui¨¦n. La navarra decant¨® la prueba en el tramo de m¨¢s pendiente, la pedrera de andar, como sus prestigiosas victorias en Txindoki o Zegama, dos verticales can¨®nicos. En ese terreno exprimi¨® su zancada larga, haciendo camino al andar, y bati¨® (50m08s) por 20 segundos a la suiza Paola Satampanoni. Una disciplina tan ag¨®nica se basa en el constante ejercicio de enga?ar al cerebro para que permita al cuerpo seguir sufriendo. Y correr cerca de casa ¡ªel chute de ver gritar a su madre, que nunca se inmuta¡ª le dio el resto.

La pareja ya ten¨ªa sus oros cuando unos ancianos pasaban por el arco de salida en Vinuesa y trataban de pronunciar Skyrunning. De all¨ª sali¨® el s¨¢bado Jes¨²s Gil, el manchego que entrena sin monta?as en Ciudad Real y que 7h21m29s despu¨¦s asimilaba con dificultad en Covaleda la etiqueta de subcampe¨®n del mundo tras un ultra dise?ado para la ocasi¨®n con 70 kil¨®metros y 4.500 metros de desnivel positivo. El ¡°pico y pala¡± de un profesor que se emocion¨® en meta: ¡°Era el objetivo de mi vida¡±. Un hito para alguien que empez¨® a correr como cuarent¨®n. ¡°Voy a hacer 48 a?os y cada d¨ªa estoy m¨¢s fuerte. El ser humano hace cosas incre¨ªbles¡±. El italiano Cristian Minoggio impuso su ley (6h53m47): dej¨® al manchego en la primera bajada t¨¦cnica ¡ªsu especialidad¡ª y no mir¨® atr¨¢s.

Tambi¨¦n hubo victoria italiana en el ultra de mujeres, la de Giulia Marchesoni (8h38m10s), que tom¨® el mando en el ecuador y releg¨® al tercer puesto a Gemma Arenas, que sufri¨® de lo lindo (8h48m54s), pero se sobrepuso a los efectos de la menstruaci¨®n en una distancia as¨ª y a una ca¨ªda en la que se qued¨® encajada en las costillas y necesit¨® ayuda para salir. Ahuyent¨® los fantasmas de retirada y silenci¨® los dolores en meta con una enorme sonrisa.

Como la de Oihana Kortazar, la corredora espa?ola m¨¢s laureada, una de las enamoradas de Desaf¨ªo Urbi¨®n, una prueba que hab¨ªa ganado las dos ¨²ltimas ediciones y que corri¨® el a?o pasado porque sab¨ªa que no iba a ser seleccionada. La Federaci¨®n Espa?ola de Deportes de Monta?a y Escalada exige a los corredores que descansen la semana anterior y la guipuzcoana, al¨¦rgica al barbecho, compiti¨® en una de las pruebas del Ultra Trail del Mont Blanc. Con todo, corri¨® en la categor¨ªa Open ¡ªtodas las distancias combinaron el Mundial con una participaci¨®n abierta¡ª y qued¨® cuarta (4h34m59s). Lejos de la campeona, la sueca Louise Jernberg (4h25m36s), pero siete minutos menos que la mejor espa?ola, Isabel Calero, s¨¦ptima.

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