A¨ªto Garc¨ªa Reneses: ¡°Soy entrenador desde que nac¨ª¡±
El hist¨®rico entrenador reflexiona sobre su carrera y sobre la evoluci¨®n del juego cuando se cumplen 50 a?os de su debut en un banquillo
Fue el 13 de enero de 1974, hace ahora medio siglo. El C¨ªrculo Cat¨®lico de Badalona gan¨® por 81-84 en la pista del N¨¢utico de Tenerife en un encuentro de Primera Divisi¨®n (la ACB nacer¨ªa nueve temporadas despu¨¦s) y en el banquillo catal¨¢n debut¨® como entrenador un joven madrile?o de 27 a?os llamado A¨ªto Garc¨ªa Reneses. Solo tres meses antes hab¨ªa dejado su puesto como base en el FC Barcelona y emprend¨ªa entonces una carrera como t¨¦cnico que se prolonga hasta hoy repleta de cumbres: nueve Ligas con el Bar?a, una plata ol¨ªmpica con la selecci¨®n, el r¨¦cord de m¨¢s partidos dirigidos en la Liga (1.111, 67% de victorias) y una largu¨ªsima lista de estrellas a sus ¨®rdenes, desde Epi y Soloz¨¢bal a Navarro y los hermanos Gasol, Ricky, Rudy, Djordjevic, Jasikevicius, Villacampa¡ A los 77 a?os, y tras sus ¨²ltimas experiencias en el Alba Berl¨ªn y el Girona, el gran maestro de una generaci¨®n de entrenadores reflexiona sobre sus 50 cursos en la pizarra mientras rumia la posibilidad de volver al ruedo.
Pregunta. ?Busca trabajo?
Respuesta. Estoy en un a?o sab¨¢tico. No tengo ni idea de lo que pasar¨¢ ni me preocupa nada. Ya se ver¨¢ en su momento si sigo o no entrenando. Suelo vivir el presente y no el futuro. Acabo de estar tres semanas en M¨¦xico con unos cl¨ªnics. Me he divertido mucho y es probable que vuelva.
P. ?A¨²n se siente entrenador?
R. S¨ª, eso sin duda. Soy entrenador desde que nac¨ª. No me importa mucho si los equipos est¨¢n pensando en los a?os que tengo. Cada uno que piense lo que debe. Yo entrenar y dirigir no tengo ning¨²n problema. Otra cosa fueron los dos ¨²ltimos a?os en Berl¨ªn. Viaj¨¢bamos en vuelos regulares y adem¨¢s en pandemia, cuatro partidos por semana con sus aviones y sus escalas¡ Eso no me apetece.
P. ?Ve mucho baloncesto?
R. S¨ª, en directo poco, algunas veces. Pero por televisi¨®n, enorme. La oferta es exagerada por el n¨²mero de partidos que hay. Los lunes descanso. La NBA me gusta poco verla. Han seguido mejorando en marketing pero no en baloncesto. Para favorecer ese marketing, un jugador estrella hace lo que quiere, aunque lo que quiera sea no defender nada. Muchos equipos defienden su marketing y refuerzan a esa estrella. Los partidos no son muy interesantes.
P. ?Los j¨®venes se van demasiado pronto a la NBA?
R. Algunos pueden acertar pero otros se van producto de la propaganda. Luego vuelven al cabo de un a?o o dos sin haber triunfado. Es precipitado. Si nos remitimos a Pau Gasol, se fue en un momento en el que estaba progresando y tuvo la suerte de caer en Memphis, que era un equipo flojo donde pudo seguir desarroll¨¢ndose hasta ir a los Lakers. Otros se van y no tienen opci¨®n de jugar.
P. ?Usted por qu¨¦ se hizo entrenador?
R. Cuando estudiaba en el Ramiro [jug¨® en el Estudiantes entre 1963 y 1968 antes de ir al Bar?a], un d¨ªa faltaron los profesores de Educaci¨®n F¨ªsica y me dediqu¨¦ a hacer un equipo reserva. Entren¨¢bamos con lo poco que ten¨ªamos, retamos a los titulares y les ganamos. Al a?o siguiente cogimos al Infantil C de Estudiantes. Sin saber nada, yo estaba entrenando.
P. ?C¨®mo se form¨®?
R. Cuando terminaba de entrenar al infantil me quedaba a ver al juvenil. Y escuchaba a los entrenadores. Aparte de haber ido a cientos de torneos internacionales cada verano, m¨¢s de 20 veces a Estados Unidos¡ Es la pasi¨®n de mi vida. A los 26 a?os dej¨¦ de ser jugador del Bar?a porque yo no era lo suficientemente importante. A los tres meses comenc¨¦ como entrenador.
P. ?Ese primer partido?
R. En la escala del vuelo a Tenerife, en Madrid, saqu¨¦ unas monedas y as¨ª les ense?aba a los jugadores los movimientos defensivos y de ataque. Hab¨ªa tres jugadores de m¨¢s edad que yo.
P. ?En qu¨¦ ha cambiado m¨¢s el baloncesto?
R. Ahora en su mayor¨ªa los equipos defienden. Antes no lo hac¨ªan casi. A nosotros algunos rivales y prensa nos dec¨ªan que hac¨ªamos k¨¢rate. De eso nada. Defend¨ªamos m¨¢s, los jugadores se esforzaban y hab¨ªa m¨¢s rotaciones. Ahora lo hacen todos.
P. ?Qu¨¦ legado deja?
R. La intensidad y la progresi¨®n. Hoy los entrenadores, igual que los jugadores, duran poco en los equipos. Y la manera de entrenar de algunos es solo t¨¢ctica. Yo quiero ense?ar fundamentos. Tambi¨¦n he querido siempre motivar intelectualmente a los jugadores. Xavi Fern¨¢ndez jugaba al ajedrez, y a Tavares cuando le tuve dos a?os en el Gran Canaria le puse a hacer sudokus. Era hacerles pensar. Me encanta cuando eso lo han aprovechado para el baloncesto y para su vida.
P. ?Qu¨¦ es una estrella?
R. El jugador que sabe hacer de todo, ataca, defiende y est¨¢ implicado con sus compa?eros. El entrenador marca la l¨ªnea.
P. ?Ha cambiado hoy el papel del entrenador?
R. Hay muchos partidos y as¨ª es dif¨ªcil la progresi¨®n. En Berl¨ªn utiliz¨¢bamos los encuentros de la Euroliga para entrenar. Si no, es imposible mejorar.
P. ?Tiene la espina clavada de no haber ganado la Euroliga pese a estar en seis Final Four?
R. Tiene su parte negativa, aunque una vez tuvimos un perjuicio arbitral [el tap¨®n ilegal de Vrankovic a Montero en 1996 entre Bar?a y Panathinaikos]. Haber estado all¨ª tantas veces est¨¢ muy bien, al margen de haber ganado la Recopa y la Korac.
P. ?Y la plata de Pek¨ªn 2008?
R. Hubo una muy buena implicaci¨®n de unos jugadores que adem¨¢s eran muy buenos. El m¨¢s joven, Ricky, no hab¨ªa cumplido 18 a?os y jug¨® 29 minutos en la final porque Calder¨®n estaba lesionado. Si el jugador es una estrella, el ego pasa a un segundo lugar.
P. En los a?os sesenta cre¨® el primer marcador electr¨®nico¡
R. S¨ª. Yo estudiaba F¨ªsicas, y luego Telecomunicaciones. En Espa?a solo hab¨ªa unos marcadores de baloncesto, que eran americanos y el¨¦ctricos. Yo hice un proyecto para que eso fuera electr¨®nico y se vendieron 30 marcadores de 30 segundos de posesi¨®n. Eran m¨¢s baratos. Siempre me ha gustado pensar en muchas cosas. Hasta hoy. Cada d¨ªa es diferente.
Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.