Los Celtics de Boston tocan el cielo de la NBA con su 18? t¨ªtulo de campeones

Estallido verde de felicidad en Boston. Los Celtics izar¨¢n una ense?a m¨¢s en el TD Garden junto a las otras 17 que les proclaman ¡°campeones del mundo¡± por haber ganado el t¨ªtulo de la NBA en otras tantas ocasiones. El equipo dirigido por Joe Mazzulla ha ganado (106-88) el quinto y definitivo partido de las finales contra los Dallas Mavericks, con el que cierran la serie con 4-1. Los Celtics vuelven a lo m¨¢s alto por primera vez desde 2008, cerrando una etapa de fracasos y decepciones en una ciudad con una pasi¨®n especial por el baloncesto. Con el 18? t¨ªtulo se ponen por delante de los Lakers en la carrera hist¨®rica de los dos eternos rivales. Es el sexto campe¨®n diferente en seis a?os, lo que da una idea de la igualdad que se ha instalado en la NBA. Para los Mavericks liderados por Luka Don?i?, es una gran oportunidad perdida.

El partido de este lunes se acab¨® en el descanso. Casi sin tiempo, sobre la bocina, Payton Pritchard encest¨® un triple desde su propio campo que pon¨ªa el marcador en 67-46 para delirio de la marea verde que abarrotaba el TD Garden. Un estallido de euforia atron¨® el pabell¨®n. En el descanso, un escalofr¨ªo colectivo recorr¨ªa el recinto ante el t¨ªtulo inminente. Nunca en las 157 ocasiones en que un equipo que ha empezado 3-0 una eliminatoria o final de la NBA a siete partidos, la ha dejado escapar. Despu¨¦s de ese triple estratosf¨¦rico, los jugadores siguieron jugando, botando el bal¨®n, pas¨¢ndoselo, tirando a canasta y cogiendo rebotes, con mayor o menor acierto, pero en realidad las finales de la NBA se hab¨ªan terminado.

Los Celtics conquistan su 18? t¨ªtulo, mientras los Lakers (estos ¨²ltimos primero en Minnesota y luego en Los ?ngeles) han sido 17 veces campeones de la NBA. Sin embargo, desde el tercer anillo de Larry Bird, en 1986, los Celtics solo hab¨ªan ganado el trofeo de 2008, mientras que los eternos rivales hab¨ªan conquistado ocho. Aunque muchos t¨ªtulos de la NBA de los de Boston sean en blanco y negro, ahora son los campeones. Aspiran, adem¨¢s, a un periodo de hegemon¨ªa con un bloque sin fisuras.

Solo el ¨²ltimo t¨ªtulo, la final de 2008 contra los Lakers de Kobe Bryant y Pau Gasol, se hab¨ªa celebrado en el actual pabell¨®n. Todos los anteriores proven¨ªan de la ¨¦poca del vetusto Boston Garden, en el terreno contiguo al actual TD Garden, en cuyo solar hoy se erige un rascacielos con un centro comercial, oficinas y viviendas.

Los Celtics se reponen de la decepci¨®n de hace dos a?os, cuando los Golden State Warriors de Stephen Curry conquistaron el t¨ªtulo en el sexto partido de la serie en Boston. La columna vertebral de aquel equipo se mantiene, con Jayson Tatum, Jaylen Brown, Derrick White y Al Horford, m¨¢s los suplentes Sam Hauser, Payton Pritchard y Luke Kornet. Tatum, Brown y White est¨¢n en su mejor momento y Horford se mantiene en sorprendente buena forma a sus 38 a?os, pero adem¨¢s al equipo se han sumado esta temporada dos piezas clave: Jrue Holiday, que ha reforzado la defensa y ya fue campe¨®n con los Bucks, y Kristaps Porzi??is, que cuando las lesiones lo permiten da al juego de los Celtics poder¨ªo bajo los aros y versatilidad en ataque. Los Celtics han sido los mejores en la temporada regular y en los playoffs. Joe Mazzulla se convierte en el t¨¦cnico m¨¢s joven en coronarse campe¨®n desde el m¨ªtico Bill Russell en 1969.

Clara superioridad

Pese a la paliza que sufrieron en Dallas en el cuarto partido, los Celtics se han mostrado claramente superiores en las finales. Empezaron con un golpe de autoridad en casa, seguido de otras dos victorias un poco m¨¢s apretadas, antes de su peque?a gran debacle de Dallas del pasado viernes. M¨¢s all¨¢ de que los Mavericks hicieran ese d¨ªa un gran partido, visto lo ocurrido este lunes, da la sensaci¨®n de que el subconsciente ped¨ªa a los Celtics reservarse para ganar en Boston, delante de su apasionada afici¨®n. El quinto partido fue, de hecho, el reverso verde del anterior, con los locales superando a sus rivales en todas las facetas del juego.

Han sido unas finales ganadas en los dos aros, pero particularmente en la defensa. Cada vez que los Celtics han logrado dejar a Dallas por debajo de 100 en el marcador, han ganado el partido. El t¨¦cnico de los Celtics, Joe Mazzulla, insiste en que el juego est¨¢ conectado, en que defensa y ataque se interrelacionan m¨¢s de lo que parece, una lecci¨®n que dice haber aprendido del Manchester City del espa?ol Pep Guardiola. Lo cierto, sin embargo, es que m¨¢s all¨¢ de las transiciones, la defensa est¨¢tica de Boston, con un despliegue f¨ªsico colectivo que lideran Jrue Holiday y Jaylen Brown.

Esa defensa mantuvo al d¨²o m¨¢s prol¨ªfico de la NBA, el compuesto por Luka Don?i? y Kyrie Irving, con solo 14 puntos entre los dos al final de la primera mitad del partido de este lunes. Los Mavericks tardaron este lunes tres minutos en encestar su primera canasta y otros dos en lograr la segunda. Los Celtics se pudieron por delante nada m¨¢s empezar, se escaparon 9-2 al principio y no cedieron la delantera en los 48 minutos de partido.

Jaylen Brown, el mejor de las finales

Los Celtics se han coronado campeones, adem¨¢s, con un juego m¨¢s colectivo que nunca. Tienen en Jayson Tatum y Jaylen Brown a sus dos principales estrellas, pero no est¨¢ claro qui¨¦n es m¨¢s que el otro. A ambos les coreaban los aficionados este lunes M-V-P, un t¨ªtulo que solo pod¨ªa recibir uno. El elegido como mejor jugador de las finales fue con toda justicia Jaylen Brown, que se lo ha merecido por su aportaci¨®n tanto en ataque como en defensa. A ellos se han juntado otros dos jugadores de nivel All Star: el p¨ªvot let¨®n Kristaps Porzi??is y Jrue Holiday, el base campe¨®n con los Bucks.

En ataque, Tatum, Brown, Holiday y White se han repartido este lunes el protagonismo anotador. El partido se ha definido en los rebotes, los robos y el acierto en los triples, que los Celtics no hab¨ªan encontrado en los tres primeros partidos.

Hubo un momento en que el partido de este lunes pudo ser otra cosa. Con menos de dos minutos para el final del primer cuarto, los de Dallas se acercaron 19-18 y parec¨ªa que el parcial iba a acabar equilibrado, pero un sprint final de los Celtics les permiti¨® adquirir una ventaja de 10 puntos (28-18) antes de entrar en el segundo cuarto, en que se mantuvo la misma t¨®nica.

Con una canasta m¨¢s tiro adicional de Jayson Tatum que puso el marcador 46-31 a falta de siete minutos para el descanso, empez¨® a instalarse una sensaci¨®n de inevitabilidad, sobre todo despu¨¦s de que Luka Don?i?, que estaba viviendo una noche negra, fallase dos tiros libres en la jugada siguiente. El esloveno y Kyrie Irving solo hab¨ªan anotado 5 puntos cada uno con 17 minutos de partido transcurridos, gracias en gran parte a la agresiva defensa de Holiday y Brown. Los de Dallas tuvieron una peque?a reacci¨®n que los puso a 9 puntos a falta de cuatro minutos y medio para el descanso, pero era una ilusi¨®n. Los Celtics apretaron el acelerador y se fueron con 21 de ventaja al descanso gracias al triple de Pritchard desde su propio campo.

La segunda mitad sirvi¨® para mantener las distancias y para que, ante la confirmaci¨®n de lo inevitable, Joe Mazzulla fuera sustituyendo a sus jugadores uno por uno a modo de homenaje. M¨¢s tarde lleg¨® la lluvia de confeti, la entrega de trofeos, la fiesta y la celebraci¨®n. Aunque el resultado final fue otro (106-88), el partido se termin¨® con aquel triple.

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