El Madrid es de Vinicius
El brasile?o despierta con un recital y un ¡®hat trick¡¯ a su equipo, de nuevo desorientado, que se vio en una situaci¨®n desesperada con dos goles de desventaja ante un mermado Borussia Dortmund
Cuando ya atisbaba el naufragio, a¨²n con 1-2, Carlo Ancelotti olfate¨® un aroma familiar. Ten¨ªa ya listos en la banda a Camavinga y Tchouameni para provocar algo, y lleg¨® el empate de Vinicius, que hab¨ªa agarrado el partido como una cuesti¨®n personal, un sistema de ataque en s¨ª mismo al que no importan los desajustes estructurales ni las b¨²squedas de sentido general. El brasile?o hab¨ªa incendiado el choque y la grada volv¨ªa a arder como en aquellas noches sinsentido de otras remontadas. Ancelotti detuvo los cambios y dej¨® que Vinicius siguiera volteando un partido del que solo ¨¦l hab¨ªa encontrado las llaves. A menos de una semana de la entrega del Bal¨®n de Oro y cuatro d¨ªas del cl¨¢sico, volvi¨® a emerger el genio incontrolable para tumbar con su agitaci¨®n y un hat trick al Borussia Dortmund, que hab¨ªa llegado al Bernab¨¦u como l¨ªder hasta entonces de esta nueva Champions.
Hasta la aparici¨®n de Vinicius, la noche pintaba a algo muy raro. La Copa de Europa, que tantas veces ha servido para fijar la talla de la grandeza del Madrid, devolv¨ªa en esta ocasi¨®n la medida de la desorientaci¨®n. Ah¨ª estaba de nuevo el Dortmund, el rival al que ganaron la ¨²ltima Orejona hace menos de cinco meses. Aunque ni siquiera era aquel equipo de Wembley, sino uno bastante afeitado por las salidas de jugadores y por las lesiones. Mientras que el Madrid, sobre el papel, se parec¨ªa bastante al de Londres, con el a?adido de Mbapp¨¦, la pieza m¨¢s deseada de la d¨¦cada, y sin Kroos. Pero esta banda no toca ni por asomo aquella m¨²sica. Y eso que Ancelotti lo intent¨® regresando a lo b¨¢sico.
Retom¨® el 4-3-3 bajo el mando de Luka Modric, cuya renovaci¨®n no fue casi nunca una prioridad la temporada pasada. La pieza m¨¢s prescindible entonces resulta ser en este punto de desorientaci¨®n la ¨²nica capaz de marcar un rumbo. El s¨¢bado en Vigo ya los sac¨® de un problema con un pase ¨²nico a Vinicius. Ancelotti prescindi¨® de Camavinga y Tchouameni y situ¨® a Valverde como ancla, acompa?ado del croata y de Bellingham por la derecha. Intenta buscar por ah¨ª la fundaci¨®n de una sociedad con Rodrygo, pero los frutos son escasos.
Despu¨¦s de un primer tramo de relativo control y energ¨ªa, con robos arriba y Modric y Bellingham tejiendo cada uno por su lado, al Dortmund se le pas¨® el susto de visitar al campe¨®n. Cuando el equipo de Sahin cruz¨® esa primera barrera adelantada de entusiasmo se encontr¨® al Real replegado mirando c¨®mo se familiarizaban con el bal¨®n alrededor de Nmecha y Brandt. Hasta que el Madrid tropez¨® de nuevo en una de sus piedras de estos d¨ªas: Lucas V¨¢zquez se confi¨® al ir a salir y le birlaron la pelota muy cerca de su ¨¢rea. Tanto, que Guirassy se vio con ella enseguida, pivote¨® alrededor de R¨¹diger y dej¨® solo a Malen, que bati¨® a Courtois y pasm¨® al Bernab¨¦u. A los de la grada y a los de la hierba, que vieron llegar a Malen por la derecha y poner un centro al ¨¢rea, pero no vieron a Gittens llegar por la espalda y marcar el segundo.
Ah¨ª, en plena ca¨ªda, el Madrid produjo un primer episodio de rebeld¨ªa, con un cabezazo de Bellingham a las manos de Kobel y dos remates al larguero, uno de chilena de Rodrygo y otro del ingl¨¦s. Pero la llama no prendi¨® y los alemanes aguantaron la sacudida.
Sin embargo, ese no era el calambrazo definitivo. Eso fue cosa de Vinicius, al que hab¨ªa sujetado bien Ryerson en los primeros lances. Pero cuando m¨¢s plano se ve¨ªa al Madrid, el brasile?o decidi¨® que iba a transformar una noche en la que no asomaba Mbapp¨¦. Y lo hizo.
Dispar¨® la carga que empez¨® a tumbar al Dortmund, volando por la banda, disparando, buscando centros con el exterior. Hasta que la avalancha puso un bal¨®n en la cabeza de R¨¹diger y reventaron las compuertas alemanas. Marc¨® Vinicius luego y Lucas V¨¢zquez, con el brazalete de capit¨¢n, acert¨® con el que terminaba de voltear el marcador. Sin embargo, aquello no resultaba suficiente para el brasile?o desatado en una noche voraz. Ya en el 85 vol¨® solo de ¨¢rea a ¨¢rea y marc¨®. Y luego acert¨® de nuevo con el hat trick. ?l a¨²n guarda las claves del Madrid, que tal vez era eso: remontar.
Clasificaci¨®n | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
10
BCN
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
11
BDO
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
12
RMA
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
13
BEN
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
14
JUV
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
Clasificaci¨®n | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
9
ARS
|
7 | 3 | 2 | 1 | 0 |
10
BCN
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
11
BDO
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
12
RMA
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
13
BEN
|
6 | 3 | 2 | 0 | 1 |
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