Espa?a eleva su cr¨¦dito por derecho

Se asoma el Mundial a la ronda de terceros partidos y son escasos los de gran calado. La desigualdad presidi¨® las brillantes actuaciones de Inglaterra y Espa?a frente a Ir¨¢n y Costa Rica. Brasil no impresiona por su funcionamiento, pero s¨ª por los destellos que le han garantizado victorias m¨¢s sufrientes de lo previsto. Vinicius extiende a la selecci¨®n su trascendencia en el Real Madrid. Es una de las noticias de este Mundial, que ya registra la clasificaci¨®n para la siguiente ronda de los dos grandes favoritos: Brasil y Francia, dos equipos con toda clase de recursos. Espa?a llega desde atr¨¢s, sin fanfarria previa y con un juego que acredita una propuesta n¨ªtida, elegante, disciplinada y plena de convicci¨®n.

El partido con Alemania reivindic¨® al equipo, que llegaba con el lastre de las decepciones en los Mundiales de Brasil y Rusia. Es una selecci¨®n peculiar, con j¨®venes muy prometedores, veteranos contestados en sus equipos y un n¨²mero inusual de suplentes, o sin garant¨ªa de titularidad, en sus clubes. Es el lugar, en definitiva, que re¨²ne a Busquets y Jordi Alba, imprescindibles en la selecci¨®n y se dice que prescindibles en el Bar?a; a Pedri y Gavi, dos jugadores menores de 20 a?os sobre los que se delega una enorme responsabilidad en la direcci¨®n del juego; a Ferran, Asensio y Olmo, que entran y salen con frecuencia de las alineaciones del Bar?a, Real Madrid y RB Leipzig. Sus puestos los ocupan estrellas de otras selecciones.

Alemania representa una indiscutible unidad de medida en el f¨²tbol. Sali¨® tempranamente eliminada del Mundial 2018, pero su historial es un monumento a la fiabilidad. A ra¨ªz de sus malos resultados en la Eurocopa y en la Liga de las Naciones se habla de un periodo decadente, contrariado por la vigencia del Bayern de M¨²nich, el equipo que desde hace m¨¢s de 50 a?os sirve como bar¨®metro de Alemania. Seis jugadores del Bayern figuraron en la alineaci¨®n titular: Neuer, Kimmich, Goretzka, Musiala, Gnabry y Thomas M¨¹ller. Otro m¨¢s, San¨¦, ingres¨® en el segundo tiempo, y con consecuencias en el partido. Son el espinazo del Bayern, ganador de la Liga de Campeones en 2020 y perenne candidato al t¨ªtulo. ?Puede ser un equipo decadente y vigente a la vez? ?Puede serlo el que ha aterrorizado al Bar?a en los tres ¨²ltimos a?os, el Bar?a que a su vez constituye el centro de gravedad de la selecci¨®n espa?ola?

Alemania siempre mide, pero de nuevo se sinti¨® medida por Espa?a, que tiene una insospechada historia de ¨¦xitos en esta vieja rivalidad. Desde la Eurocopa de 1988, no pierde en una competici¨®n oficial con los alemanes, sin olvidar lo que algunos de estos partidos han significado para el f¨²tbol espa?ol: victoria en la final de la Eurocopa 2008 y en las semifinales del Mundial de Sud¨¢frica 2010.

Qued¨® claro que Alemania casi siempre encuentra la manera de escapar de sus dramas, y su problema era m¨¢s grave despu¨¦s del gol de Morata. Perfecta jugada colectiva que el delantero espa?ol termin¨® con categor¨ªa y delicadeza. Antes y despu¨¦s se detectaron errores en la selecci¨®n, que transmiti¨® sensaci¨®n de debilidad en las jugadas a bal¨®n parado y perdi¨® el comp¨¢s frente al juego de viento racheado que propugn¨® Alemania en los ¨²ltimos minutos, pero por encima de todo emergi¨® un equipo ambicioso, atractivo y sin dudas.

Despu¨¦s de dos Mundiales deprimentes, Espa?a emite las mejores se?ales desde el c¨¦lebre periodo 2008-2012. No es favorita, no despierta el mismo miedo en los rivales que en aquellos d¨ªas, pero en poco tiempo Luis Enrique ha construido una selecci¨®n envidiable. En un Mundial donde la brillantez asoma con cuentagotas, Espa?a es noticia por su compostura, ideas y desinhibici¨®n.

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