La carta n¨¢utica puede ser falsa
D¨ªa 12 de mayo08,00. El buque tanque Urquiola se encuentra en demanda del puerto de La Coru?a, procedente de Rastanura (Arabia Saudita), con un cargamento de petr¨®leo crudo de 107.000 toneladas, situado en la enfilaci¨®n de entrada dentro de la canal; tal como se indica en la posici¨®n A de la carta n¨¢utica adjunta. El capit¨¢n est¨¢ en el puente y mantiene contacto telef¨®nico con el pr¨¢ctico que viene en su embarcaci¨®n en direcci¨®n al buque. Calados: 15,30 metros, popa; 15,10 metros, proa.
08,20. El buque sigue el rumbo de la enfilaci¨®n dentro de los l¨ªmites correctos, navegando por la canal de entrada, velocidad tres nudos, a la vista de la embarcaci¨®n del pr¨¢ctico. Se nota un roce en el casco, sin poder determinar qu¨¦ parte del buque ha podido ser afectada. El buque sigue navegando normalmente, pero se detecta una fuga que puede ser crudo o fuel-oil procedente del tanque de combustible. El capit¨¢n comunica al pr¨¢ctico por radiotel¨¦fono que cree haber tocado fondo, a lo que el pr¨¢ctico contesta desde su embarcaci¨®n que el buque est¨¢ viniendo perfectamente por la enfilaci¨®n y que no puede entender c¨®mo ha tocado. (Posici¨®n B.)
08,40. Embarca el pr¨¢ctico a bordo del B/T Urquiola. Capit¨¢n y pr¨¢ctico comprueban que existe una p¨¦rdida por la banda de estribor y deciden comunic¨¢rselo a la Comandancia de Marina. Enterada la Comandancia de Marina, da orden al capit¨¢n que proceda a salir de la bah¨ªa cuanto antes y se aleje hasta que los derrames no ofrezcan peligro para la costa. (Posici¨®n C.)
08,50. Con ayuda de dos remolcadores, el buque comienza a revirarse para buscar la enfilaci¨®n de salida y poner proa a la mar.
09,15. Nuevamente en la canal, sin remolcadores, con rumbo de salida, el buque inicia el rumbo a mar abierta. El pr¨¢ctico asesora al capit¨¢n en la maniobra. (Posici¨®n E.)
09,30. Se nota una serie de golpes bruscos, el buque frena su arrancada y comienza a escorarse poco a poco a estribor, qued¨¢ndose finalmente parado. Se tiene la evidencia de haber embarrancado.
10,15. El capit¨¢n, ante un posible riesgo de explosi¨®n, ordena abandono de buque, realiz¨¢ndose la operaci¨®n con completo orden. La tripulaci¨®n, con excepci¨®n del capit¨¢n y del pr¨¢ctico, que siguen a bordo del B/T Urquiola, pasan a bordo de un remolcador, que permanece a una prudente distancia del buque esperando instrucciones.
10,45. El capit¨¢n, con objeto de tomar un cabo de remolque del remolcador Priori?o ordena que tres de sus hombres vuelvan a embarcar en el Urquiola y realicen la maniobra. Una vez realizada, los hombres que la han ejecutado vuelven al remolcador de donde proced¨ªan. El Priori?o comienza a tirar tratando de sacar al B/T Urquiola de su posici¨®n.
11,20. El buque vuelve a quedar ¨²nicamente con el capit¨¢n y el pr¨¢ctico a bordo, que terminan de desconectar los aparatos que a¨²n pueden haber quedado en servicio. Alrededor del buque se mueven cuatro remolcadores, una lancha de la Comandancia de Marina y el buque de salvamento de la Cruz Roja del Mar. Tambi¨¦n evoluciona en las proximidades del buque el remolcador de salvamento alem¨¢n Artick.
12,20. Poco despu¨¦s se rompe el cabo de remolque que un¨ªa al B/T Urquiola con el Priori?o. El buque est¨¢ firmemente trincado al objeto que le hizo embarrancar y se mueve solamente a impulsos de la mar.
13,50. Testigos oculares, situados en las proximidades de la Torre de H¨¦rcules ven c¨®mo explota la proa del buque, apreciando claramente c¨®mo salta la cubierta a la altura del castillo y de los tanques de proa del buque. A la explosi¨®n le sigue una gran columna de humo y el incendio del buque, tambi¨¦n a la altura de los tanques de proa. El pr¨¢ctico y el capit¨¢n se arrojan al agua.
14,10. Desde las 13,50 hasta esta hora, el incendio ha ido progresando hacia popa y se han o¨ªdo peque?as explosiones. A las 14,10 se oye y se observa otra gran explosi¨®n. El incendio se generaliza; la columna de humo aumenta hasta hacer que se oscurezca el sol. De vez en cuando se ven separarse del buque masas de petr¨®leo inflamado, que contin¨²an ardiendo en su desplazamiento.
17,00. Aparece el pr¨¢ctico en la costa pr¨®xima a la cala de Canobal, despu¨¦s de haber nadado durante tres horas huyendo de los gases, humos y manchas incendiadas. Su decisi¨®n de nadar a barlovento y su buena preparaci¨®n f¨ªsica le han salvado la vida. El capit¨¢n sigue sin aparecer. Se ha lanzado al agua poco despu¨¦s del pr¨¢ctico, con el chaleco salvavidas puesto.
D¨ªa 13 de mayo
08,00. El incendio ha remitido mucho, el buque ha estado ardiendo dieciocho horas violentamente y desde la costa no se observan m¨¢s que espor¨¢dicas salidas de peque?as columnas de humo. Las manchas de crudo se han extendido, y arrastradas por el viento, la marea y las corrientes, van contaminando la costa.
La Comandancia de Marina, que desde el primer momento se ha hecho cargo del problema, ha movilizado todos los recursos a su alcance para acudir a remediar el siniestro en todos sus aspectos, el salvamento del buque y la contaminaci¨®n de la costa. Independientemente de los medios de que dispone la refiner¨ªa de La Coru?a, se han hecho traer dispersantes y espum¨®genos de todos los puertos de Espa?a donde hay existencias. Los armadores, que han llegado a La Coru?a, han requerido la presencia de uno de los mundialmente famosos expertos en salvamento, la compa?¨ªa holandesa Smit Tak y su filial en Espa?a, Sayremar. Tambi¨¦n est¨¢n en La Coru?a los representantes de las compa?¨ªas aseguradoras y algunos de los m¨¢s conocidos expertos mundiales en contaminaci¨®n de las aguas del mar. La Marina de Guerra ha enviado desde El Ferrol varias unidades que, al mando de un vicealmirante, colaboran en los trabajos. Helic¨®pteros de la Marina sobrevuelan la zona para estudiar los movimientos de las manchas. El subsecretario de la Marina Mercante y el director general de Navegaci¨®n se encuentran- en La Coru?a.
D¨ªa 14 de mayo
16,00. Se aproxima al buque, cuyo incendio ha remitido mucho, el remolcador R.A1, de la Marina de Guerra. Sube a bordo del B/T Urquiola un equipo de 17 hombres de la Marina al mando del capit¨¢n Carlos Prieto, que consigue dominar el fuego.
17,00. Aparece el cad¨¢ver del capit¨¢n del B/T Urquiola, en las proximidades del dique de abrigo del puerto. M¨¢s tarde se determinar¨¢ que su muerte se ha debido a asfixia producida por los gases y humos del incendio. Don Francisco Rodr¨ªguez Castelo ten¨ªa cuarenta y un a?os, y era natural de La Coru?a.Estaba casado, con dos hijos y en espera de un tercero. Mandaba el buque desde hac¨ªa m¨¢s de un a?o y era la quinta vez que entraba en La Coru?a al mando del B/T Urquiola.
D¨ªa 24 de mayo
Despu¨¦s de varios retrasos por razones t¨¦cnicas, comenz¨® por fin el trasvase del crudo que quedaba a bordo del B/T Urquiola, a primeras horas de la tarde del d¨ªa 21. Puede haberse trasvasado en la ma?ana de hoy algo m¨¢s de 6.000 toneladas, quedando a bordo del B/T Urquiola, seg¨²n c?alculos estimativos, unas 8.000 toneladas m¨¢s. Es muy dif¨ªcil hacer un c¨¢lculo del crudo que se quem¨® en el incendio, pero evidentemente nuestro c¨¢lculo de 20.000 toneladas se ha quedado muy corto. Muy posiblmente las toneladas quemadas pasan de las 60.000.
Contin¨²a la limpieza de las playas y costas afectadas, trabajando en ello numerosas embarcaciones, que se han ofrecido voluntariamente.
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