Shirley McLaine: "Nunca har¨ªa de prostituta, aunque la prostituta llegara a presidente"

Seg¨²n el director de The turning point, la historia de la pel¨ªcula ?cuenta ese dificil momento de las bailarinas en que su cuerpo empieza a no responder al arte que, justo entonces, est¨¢ empezando a desarrollarse plenamente en ellas. Para las bailarinas, ese momento llega alrededor de los cuarenta a?os. Para los bailarines, aun antes. Y el personaje que encarna Shirley McLa¨ªne es el de la mujer que tuvo que dejar la danza porque esperaba un hijo, en el momento en que la ni?a retoma la vocaci¨®n y la genialidad de la madre. En contraposici¨®n dial¨¦ctica con otro personaje, la bailarina triunfadora, Bancroft, que llega al final de su carrera y cede el fuego a la chica, encarna Shirley McLaine las contradicciones, las frustraciones especialmente duras para las mujeres entre la vida profesional -que ahora es lo que hubiera podido ser y no fue- y la vida personal, familiar, que se va desgajando tambi¨¦n.Shirley McLaine. He hecho este apel porque me gustaba. Creo que la productora, la Fox, se lo ofreci¨® a la princesa de M¨®naco, que est¨¢ en su consejo de administraci¨®n. No s¨¦ por qu¨¦ no acept¨® ella. A m¨ª me parece que este papel y esta pel¨ªcula entran dentro de mis actividades feministas, y le aseguro que si llevo bastante tiempo sin hacer cine es porque elijo mis papeles. Nunca har¨ªa de prostituta, aunque la prostituta llegara a presidente. Shirley McLaine lleva una intensa actividad que ella define como pol¨ªtica, ?pero hay que entender la palabra de otra manera que en Europa. Las feministas americanas somos pol¨ªticas porque luchamos organizadas y porque inscribimos la lucha fenfinista dentro de toda la lucha social?.

EL PAIS. ?Cu¨¢l es la situaci¨®n actual del Movimiento de Liberaci¨®n de la Mujer en Estados Unidos?

S. M. Hay distintas tendencias. Curiosamente, las mujeres de derecha, de extrema derecha, se est¨¢n organizando. Llevan campa?as contra el aborto, contra la supresi¨®n de las pensiones alimenticias en el divorcio, y cuando hablan de liberaci¨®n de la mujer lo reducen todo a la liberaci¨®n sexual. Olvidan que en el fondo del problema hay siempre cuestiones econ¨®micas... Nosotras entendemos la liberaci¨®n de la mujer como su derecho a elegir. Enti¨¦ndame: hay muchas madres de familia que est¨¢n en el movimiento porque, aunque han elegido ese camino, aunque muchas lo siguen eligiendo, lo importante es ue creen que nada debe ser obli gatorio para la mujer. La libertad es la capacidad de elegir libremente. Y por eso luchamos. Cuando la mujer sea libre,el hombre tambi¨¦n lo ser¨¢. Toda la sociedad lo ser¨¢.

EL PAIS. Como usted sabe, en Espa?a no existe a¨²n el divorcio civil. No hay, pues, planteado, de momento, el problema de las pensiones alimenticias. ?Podr¨ªa usted aclar¨¢rnoslo?

S. M. Las feministas pensamos que conviene revisar la cuesti¨®n de la pensi¨®n alimenticia a la mujer, en caso de divorcio, porque es un rma para que ella, que vive en tonces a costa del hombre, se ado cene y no trabaje para ganar su propio sustento. Las mujeres de extrema derecha rechazan esta cuesti¨®n, porque no quieren ser obligadas a trabajar... Pero la igualdad es la igualdad. Y de existir pensiones alimenticias, deben ser pagadas por uno o el otro c¨®nyuge, sea el hombre o la mujer. Ahora la tarea de la mujer es encontrar su capacidad de elegir por s¨ª misma, independientemente de lo que diga el marido o de lo que diga la Iglesia... Y el peligro del feminismo, por lo que la derecha siente miedo es, precisamente, por nuestro car¨¢cter organizado, pol¨ªtico.

Shirley McLaine est¨¢ terminando su primera novela, despu¨¦s de estos tres o cuatro a?os dedicada a la escritura intensamente.

S. M. En realidad he escrito sobre los temas m¨¢s diversos, aunque creo que siempre relacionados en algo con la mujer. He escrito sobre China, este gran pa¨ªs que me impresion¨® profundamente, y donde el trabajo de liberaci¨®n de la mujer es tan especial. Sobre el derecho al aborto, sobre la libertad de expresi¨®n, sobre la pornografia, que yo considero un mal necesario. Me explico: creo que la pornografia es el resultado natural de la represi¨®n y que coinciden los que manejan sus aparatos econ¨®micos con los que ejercitan m¨¢s o menos directamente la represi¨®n sexual y dem¨¢s. Aqu¨ª tambi¨¦n el sexo y el dinero est¨¢n juntos. Pero creo que no se puede reprimir la pornografia si queremos conseguir la libertad de expresi¨®n. Cuando el hombre sea libre sexual y econ¨®micamente, la pornografia dejar¨¢ de existir. De momento es, adem¨¢s de todo lo dem¨¢s, un s¨ªntoma de libre expresi¨®n. Por eso digo que es un mal menor.