Funeral en el Cuartel General del Ej¨¦rcito por el comandante Imaz

En el patio del Cuartel General del Ej¨¦rcito -antiguo Ministerio del Ej¨¦rcito- se celebr¨® a primeras horas de la tarde de ayer un funeral por el alma del comandante de la Polic¨ªa Armada de Pamplona, Joaqu¨ªn Imaz, asesinado el pasado mes de noviembre por un comando de ETA militar. Al funeral asisti¨® el vicepresidente del Gobierno para Asuntos de la Defensa, teniente general Guti¨¦rrez Mellado, y la viuda del comandante Imaz.

Al final de la misa, los asistentes -militares de los tres ej¨¦rcitos y representaciones de la Polic¨ªa Armada y la Guardia Civil- prorrumpieron en gritos de ?Mueran los traidores? y ?Viva Espa?a?, que fueron ampliamente coreados. El acto se desarroll¨® a puerta cerrada, ya que les fue impedida la entrada al edificio a los periodistas, tanto gr¨¢ficos como redactores, y a las c¨¢maras de televisi¨®n.A la salida del funeral, sobre las seis y cuarto de la tarde, pudo observarse que un numeroso grupo de personas con uniforme militar y de alg¨²n cuerpo de las, Fuerzas de Orden P¨²blico sub¨ªa en masa compacta por la calle Conde de Xiquena, que nace enfrente del Cuartel General del Ej¨¦rcito y se extiende en direcci¨®n a la plaza de Col¨®n. No obstante, se ha se?alado que el grupo no obedec¨ªa a nada anormal, sino que esta calle es la salida natural del edificio donde se celebr¨® el funeral, si bien existen otras calles que parten del Cuartel General del Ej¨¦rcito.

Por otra parte, en la plaza de Col¨®n, cerca del Ministerio del Interior, se hab¨ªa desplegado desde el mediod¨ªa un gran contingente de Fuerzas de Orden P¨²blico pertenecientes al cuerpo de Polic¨ªa Armada. Sin embargo, fuentes oficiales han manifestado que estas medidas hab¨ªan sido tomadas ante una pretendida convocatoria de manifestaci¨®n, ante el Ministerio del Interior, relacionada con los sucesos ocurridos en M¨¢laga. La entidad convocante era el Centro Social y Cultural de Andaluc¨ªa en Madrid.

Las mismas fuentes han confirmado que el grupo uniformado que sal¨ªa del Cuartel General del Ej¨¦rcito -integrado por unas quinientas personas- se disemin¨® normalmente. A la salida del funeral, un grupo de personas de paisano que se encontraba en las inmediaciones del edificio militar aplaudi¨® a los miembros de la Polic¨ªa Armada que acababan de salir.