Dif¨ªcil situaci¨®n econ¨®mica: 79.000 coches sin vender

La dif¨ªcil situaci¨®n por la que atraviesa SEAT se concreta especialmente en su elevado nivel de stock, que alcanza los 79.000 coches en la actualidad, seg¨²n datos de la direcci¨®n de la empresa. Sin embargo, fuentes de la sociedad se?alaban, en la nota difundida ayer, que la aplicaci¨®n de una nueva pol¨ªtica comercial hab¨ªa rendido sus frutos y que los niveles de ventas estaban recuper¨¢ndose notablemente en las ¨²ltimas semanas. Asimismo, las mismas fuentes rechazaban cualquier posibilidad de reducir las plantillas de la empresa, que en estos momentos totalizan las 32.140 personas, insistiendo en las excelentes perspectivas que se plantean a SEAT en el mercado automovil¨ªstico, adelantadas por su presidente en una multitudinaria rueda de prensa, en febrero, y concretadas en el incremento de las exportaciones y la apertura de los mercados europeos a partir de la integraci¨®n espa?ola en la CEE. Por otra parte, la direcci¨®n de la empresa proyecta introducir mejoras est¨¦ticas en algunos de sus modelos, incrementar la gama y mejorar su servicio al cliente. En un plazo no concretado, la sociedad afirma que proyecta invertir m¨¢s de 30.000 millones de pesetas.La situaci¨®n de SEAT en el mercado automovil¨ªstico nacional puede calificarse de peculiar, ya que su posici¨®n en el mismo ha ido degrad¨¢ndose progresivamente en los ¨²ltimos a?os, especialmente a partir de las medidas liberalizadoras de 1974, en cuyo contexto se autoriz¨® la instalaci¨®n de Ford Espa?a en Almusafes (Valencia) y diversas ampliaciones en las restantes multinacionales del autom¨®vil establecidas a trav¨¦s de filiales en Espa?a. De una situaci¨®n, de privilegio, en la que su participaci¨®n en la cuota de mercado es permanentemente mayoritaria, SEAT pasa a un segundo plano en un contexto de liberalizaci¨®n creciente del mercado, dejando los puestos de preponderancia a las firmas competidoras. Dicho de otro modo, la libre concurrencia resquebraja las estructuras de la sociedad, enfrentada con su propia impotencia comercial.

Las cr¨ªticas a SEAT, por parte de los aludidos informes de sindicatos, patronales y Generalidad, as¨ª como de los propios trabajadores, se centran precisamente en. sus deficienles estructuras y la escasa agresividad de su penetraci¨®n en los mercados.

Con todo, la inc¨®gnita sustancial del proceso es la postura del socio mayoritario de la empresa: la multinacional FIAT, con el 37 % de las acciones. El 36% est¨¢ en manos del INI, un 14 % en poder de bancos espa?oles y el resto pertenece a peque?os accionistas. FIAT no ha definido todav¨ªa su estrategia respecto a la filial espa?ola, a la que controla a trav¨¦s de la asistencia t¨¦cnica y pago de royalties, adem¨¢s de su participaci¨®n accionarial.