La familia de Robert Graves desmiente que est¨¦ gravemente enfermo

La noticia sobre una supuesta grave enfermedad del escritor brit¨¢nico Robert Graves fue desmentida ayer por la familia del gran poeta, novelista y profundo conocedor de los temas mitol¨®gicos. Cuando las agencias transmit¨ªan informaciones contradictorias sobre su estado de salud, el se?or Graves, que hace un mes cumpli¨® 84 a?os, tomaba el t¨¦, como todos los d¨ªas, en su casa de Dei¨¢ (Mallorca), donde reside desde hace m¨¢s de cuarenta a?os. habl¨® con la familia de Robert Graves.?Mi padre est¨¢ enfermo y ni siquiera se encuentra en cama; hoy mismo ha hecho vida normal y esta misma tarde ha tomado el t¨¦ en compa?¨ªa de mi madre. No s¨¦ de d¨®nde ha podido salir la noticia de que se estaba muriendo.? Quien as¨ª nos hablaba a primeras horas de la tarde de ayer era Luc¨ªa Graves, hija del escritor ingl¨¦s Robert Graves, autor, entre otras obras de gran calidad, de la novela Yo, Claudio que tanto ¨¦xito logr¨® en la versi¨®n que para la televisi¨®n hizo la BBC brit¨¢nica, ¨¦xito que se repiti¨® en Espa?a cuando fue emitida por RTVE.

A primeras horas de la ma?ana de ayer, un diario de Mallorca anunciaba en su primera p¨¢gina que Robert Graves, que reside en la isla desde los a?os treinta, se encontraba gravemente enfermo.

En realidad, a sus 84 a?os, cumplidos el pasado 21 de julio, Robert Graves hace vida normal en su finca de Ca'n Alluny, en el pueblo de Dei¨¢, situado en la costa norte de Mallorca, rodeado de sus hijos, muchos de los cuales han nacido en Mallorca, y de varios nietos. Se re¨²nen todos en este bello paraje mallorqu¨ªn en torno al ?abuelo Roberto?, pues ya han espa?olizado su nombre, y con la abuela Beryl. En los ¨²ltimos a?os, el autor de Yo, Claudio, ha dejado pr¨¢cticamente de escribir y solamente ha repasado algunos originales o las pruebas que de las nuevas ediciones de sus obras le enviaban sus editores de Inglaterra y Estado Unidos.

Robert Graves ha sufrido ¨²ltimamente algunos per¨ªodos de amnesia, aunque segu¨ªa haciendo vida normal en compa?¨ªa de los suyos y vistiendo como siempre le gust¨®: como un viejo pay¨¦s de Mallorca, tocado con su gorro de paja y apoyado en su bast¨®n de madera.