Los precios de los cereales suben m¨¢s del 10%

El Gobierno aprob¨® ayer la campa?a de cereales 1980-1981 y fij¨® el precio de regulaci¨®n del trigo en 16,65 pesetas por kilo, lo que supone un incremento del 10% respecto de la precedente campa?a; el de la cebada ser¨¢ de 12,30 pesetas (12% de incremento); el del centeno ha quedado fijado en 12,90 (9,8%); el de la avena, en 11,70 pesetas (9,5%), y el del ma¨ªz, en 16,65, lo que supone un incremento del 11%. Esta regulaci¨®n de campa?a, que aparece hoy publicada en el BOE, fue explicada ayer tarde a los periodistas por el ministro de Agricultura, Jaime Lamo.

Comenz¨® el acto el ministro confirmando la subida de los precios de los carburantes, que ha sido de cuatro pesetas por libro en el caso de gas¨®leo B (agr¨ªcola). ?Pero como un acuerdo complementario a esta medida?, dijo, ?el Gobierno prorrogar¨¢ durante el segundo semestre de este a?o la subvenci¨®n de cinco pesetas por litro de gas¨®leo, por lo que el agricultor pagar¨¢ solamente dieciocho pesetas y no veintitr¨¦s, seg¨²n establece la nueva tabla de precios?. El precio del gas¨®leo B era de siete pesetas/litro en el mes de julio de 19718; esta nueva subida supone, pues, que se ha incrementado en menos de dos a?os en un 228,5%.La producci¨®n de cereales de oto?o-invierno, dadas las favorables condiciones climatol¨®gicas en las que se est¨¢ desarrollando su cultivo, superar¨¢ ampliamente la cosecha de 1979 y tambi¨¦n la cosecha r¨¦cord de 1978. La superficie de cultivo de trigo s¨®lo se ha aumentado en un 3,8% respecto de la del a?o pasado, pero el rendimiento ser¨¢ de 2.054 kilos por hect¨¢rea, un 17% superior a la media obtenida durante el decenio pasado y el m¨¢s alto de toda la historia de Espa?a. As¨ª, la producci¨®n de trigo supondr¨¢ un incremento del 32,6% respecto de la de 1979; la de cebada, un 27,9 %, y la de avena, el 31,2%.

Para el ministro de Agricultura, la regulaci¨®n que ayer aprob¨® el Gobierno supondr¨¢ mejorar los ingresos del sector cerealista en m¨¢s de 50.000 millones de pesetas, es decir, en un porcentaje superior al 40% a la aportaci¨®n de todos los cereales a la producci¨®n final agraria en 1979; esta cosecha equivale a 0,3 puntos de crecimiento en el producto interior bruto nacional.

Otra incidencia b¨¢sica positiva apuntada por el ministro es que la campa?a aprobada recoge con holgura los aumentos de costes habidos durante el a?o, incluidos los del propio gas¨®leo, permitir¨¢ reducir los costes de la ganader¨ªa y tendr¨¢ una m¨ªnima incidencia (3 %) en el aumento del pan al consumidor (como hay trigo almacenado por el SENPA, el Gobierno no subir¨¢, por el momento, el precio de la harina panificable).

Esta nueva normativa, a diferencia de la de otros a?os, regula tambi¨¦n el mercado de cereales-pienso y establece figuras jur¨ªdicas nuevas: el SENPA subastar¨¢ permanentemente ma¨ªz nacional que compita con el importado; se autoriza al FORPPA para que, sin mediaci¨®n previa del Gobierno, inmovilice cebada por todo el territorio nacional; no se fijan los precios de entrada de cebada y sorgo de importaci¨®n (la gran cosecha que se espera hace pensar que no ser¨¢ necesario importar); se prev¨¦, en la medida de lo preciso, la salida de trigo al mercado de cereales-pienso (para aligerar stocks), y se introduce en la campa?a la figura del dep¨®sito reversible para el trigo (con una capacidad de financiaci¨®n del 60%), en el intento de que el agricultor se acostumbre a almacenar en sus propias explotaciones.

La campa?a cerealista comenz¨® el pasado d¨ªa 1 de junio. Este desfase con la aprobaci¨®n de los precios (primera vez que sucede) ha originado un vac¨ªo jur¨ªdico reconocido por los propios responsables ministeriales.

Habl¨® tambi¨¦n Lamo de Espinosa sobre las declaraciones del presidente franc¨¦s, Giscard d'Estaing, en las que ped¨ªa un receso en la integraci¨®n espa?ola. Y al margen de la declaraci¨®n oficial del Gobierno, dijo que ?los problemas agrarios de la CEE no se solucionan en ning¨²n modo retrasando el ingreso de Espa?a?.