Concierto para Europa de la Sinf¨®nica de Radiotelevisi¨®n

Un concierto de la serie Uni¨®n Europea de Radiodifusi¨®n (UER) ha inaugurado la temporada de la Sinf¨®nica de RTVE y, al mismo tiempo, las actividades sinf¨®nicas madrile?as del presente curso.Se trata de la participaci¨®n espa?ola, a trav¨¦s de RNE, en el ciclo que se transmite en directo por los organismos radiof¨®nicos participantes (europeos y americanos), y cuya intenci¨®n se desprende del mismo enunciado: ?A la b¨²squeda de nuevos nombres?.

Recordemos que la mec¨¢nica de dicha serie combina un solista, un compositor, un director y una orquesta, cada uno de diferente nacionalidad. Unicamente la orquesta, por razones obvias, coincide con el pa¨ªs fuente del concierto. Resulta ocioso, igualmente, que nuevos nombres no quiere decir valores j¨®venes necesariamente, sino artistas que, por diversas razones, no han alcanzado todav¨ªa suficiente lanzamiento internacional. Al final de cada serie (dos temporadas), todos los organismos participantes han intervenido en las cuatro especialidades.

Cengiz Tang tiene ahora 47 a?os y es profesor en el Conservatorio de Estambul. Su partitura S¨ªntesis I, estrenada hace cinco a?os, combina, a trav¨¦s de un lenguaje actual, una orquestaci¨®n clara y colorista y una precisi¨®n de concepto evidente, un cosmopolitismo de hoy con rasgos, dir¨ªa que insoslayables, de origen nacional. Brillante, contrastada en sus diversos acontecimientos sonoros, fue acogida muy favorablemente por el p¨²blico que llenaba el Teatro Real.

Todav¨ªa alcanz¨® Lise Boucher los ¨²ltimos d¨ªas del magisterio de Cortot, despu¨¦s de ser galardonada en Montreal y en Quebec. Pero el esp¨ªritu ¨ªntimo, elegante que da al concierto de Ravel, quiz¨¢ deba m¨¢s a su aprendizaje con VIado Perlemuter. Bien fraseado y expresado con moderaci¨®n (casi con pudor), el Ravel propuesto por la Boucher muestra bien a las claras el entronque del vasco-franc¨¦s con el intimismo de Gabriel Faur¨¦. La solista desempe?a actualmente una c¨¢tedra de piano superior en el Conservatorio de Montreal.

Kuljeric, un director mediterr¨¢neo

Personalidad joven, muy interesante y de gran vitalidad, el yugoslavo Igor Kuljeric ha participado en los Solistas de Zagreb como instrumentista, ha trabajado la direcci¨®n coral y la orquestal, en la que fue disc¨ªpulo de Markevitch. Al mismo tiempo, realiza tareas organizativas, y en estos momentos preside la Bienal de M¨²sica Contempor¨¢nea de Zagreb

De gesto claro y nervioso, de conceptos l¨ªricos y bien iluminados, Kuljeric mostr¨® su talento en dos partituras de distinto signo: las Arias y danzas antiguas, de Respighi, y la suite stravinskiana de El p¨¢jaro de fuego. Con una carrera bastante considerable, que le ha llevado desde la Uni¨®n Sovi¨¦tica hasta Estados Unidos, desde Canad¨¢ hasta Francia y Alemania, el joven maestro yugoslavo posee dos virtudes que le valdr¨¢n grandes triunfos: comunicatividad y atractivo. En sus manos, toda m¨²sica es algo vivo, incisivo, inquietante.

En cuanto a su trabajo t¨¦cnico, hay que se?alar que los sinf¨®nicos de RTVE tocaron a gusto y con libertad, hasta rendir los valores que nuestra entidad luce cada d¨ªa en m¨¢s alto grado de calidad. Excelente la cuerda en Respighi -con un sonido de hermosa plasticidad-, todo el conjunto se pleg¨® con justeza a las intenciones de la solista en Ravel y despleg¨® la mejor imaginaci¨®n sonora -en el ritmo, la din¨¢mica, la l¨ªrica- en el po¨¦tico y violento P¨¢jaro stravinskiano.

El concierto, que, como todos los de la serie, persigue una audiencia amplia a trav¨¦s de obras de gran repertorio junto a la de estreno, convoc¨® un p¨²blico preferentemente juvenil, interesado y entusiasta.