El estado de Jos¨¦ Antonio Gurriar¨¢n, herido en los atentados de la Gran V¨ªa, sigue siendo grave
Jos¨¦ Antonio Gurriar¨¢n, subdirector del diario Pueblo, herido muy grave por la explosi¨®n de una de las dos bombas que el grupo terrorista armenio Octubre 3 coloc¨® poco antes de las diez de la noche en la Gran V¨ªa, recuperaba ayer sus constantes vitales con una notable mejor¨ªa, aunque persista la gravedad, seg¨²n informaron ayer los m¨¦dicos que le atienden en el Hospital Cl¨ªnico de Madrid. Seg¨²n inform¨® la polic¨ªa, todav¨ªa ayer no hab¨ªa ning¨²n detenido relacionado con el atentado, aunque se manten¨ªan los controles en las salidas de la ciudad, tanto por carretera como en las estaciones de ferrocarril y aeropuerto de Barajas.
Las hermanas Raquel y Mar¨ªa Poggio, de cuatro y siete a?os de edad, as¨ª como el padre, Jos¨¦ Ignacio Poggio, abandonaron ayer la sala de recuperaci¨®n por encontrarse ya fuera de peligro.Un parte m¨¦dico de las siete de la tarde se?alaba la necesidad de revisar las heridas de Gurriar¨¢n, pero durante su internamiento posterior en el quir¨®fano, los m¨¦dicos que le atienden se limitaron a limpiarlas por no ser necesario otro tratamiento.
Durante toda la noche del lunes y a lo largo del d¨ªa de ayer, los pasillos pr¨®ximos a la habitaci¨®n en la que se encuentra internado Gurriar¨¢n permanec¨ªan repletos de compa?eros de profesi¨®n, fundamentalmente del diario Pueblo, de familiares y de personalidades pol¨ªticas. A primera hora estuvo Juan Jos¨¦ Ros¨®n, ministro del Interior, para interesarse por la evoluci¨®n del estado del herido Tambi¨¦n visitaron a los familiares Enrique Tierno, Nicol¨¢s Redondo, Pedro Bofill, Javier Solana, Enrique M¨²gica y Guillermo Galeote, entre otros.
La ¨²nica persona que ayer pod¨ªa pasar a ver a Gurriar¨¢n -que se encontraba en la UVI- era su mujer, Mar? Carmen Luna, quien cada cuatro horas entra un par de minutos y est¨¢ con su marido. ?Se encuentra totalmente l¨²cido?, coment¨® a EL PAIS, tras una de las visitas; ?le acabo de decir que tiene muchos amigos, porque la gente no para de venir y llamar, y se ha echado a llorar. Ahora le han dado unos tranquilizantes y se quedaba como dormido?.
En la cara de Mari Carmen se refleja la tensi¨®n y la angustia pasada durante toda la noche, mientras los m¨¦dicos se ocupaban en el quir¨®fano, durante tres horas, en salvar la vida de su marido. Gurriar¨¢n sufre graves heridas en las piernas, y los m¨¦dicos no pod¨ªan todav¨ªa ayer hablar de la repercusi¨®n de estas heridas. ?Nos estamos preocupando por su vida, luego nos encargaremos del estado de las piernas?, dijeron.
Los comunicados de condena ante el atentado han sido r¨¢pidos. La comisi¨®n ejecutiva federal del Partido Socialista Obrero Espa?ol -en el que milita Gurriar¨¢n- conden¨® en¨¦rgicamente el atentado. En el mismo sentido se pronunciaron la Federaci¨®n Socialista Madrile?a del PSOE y la Uni¨®n General de Trabajadores. Por su parte, la secretar¨ªa de Estado para la Informaci¨®n rechaz¨®, en nombre de UCD y del Gobierno, el atentado y record¨® que el partido centrista rechaza cualquier acci¨®n violenta que ?pueda coaccionar a la opini¨®n p¨²blica y poner en peligro la paz ciudadana?.
Como ya public¨® ayer este peri¨®dico, la primera bomba (un kilo de Goma 2) hizo explosi¨®n hacia las 21.35 horas ante la fachada de las oficinas de la TWA, en la esquina entre la calle de Garc¨ªa Molina y Gran V¨ªa. Entre los cientos de personas que transitaban a esa hora, estaba Jos¨¦ Antonio Gurriar¨¢n, quien ante el cine Pompeya, a escasos metros de la explosi¨®n, sali¨® corriendo hacia una cabina telef¨®nica a avisar a su peri¨®dico de lo ocurrido. ?Acaba de estallar una bomba ... ?, pudo alcanzar a decir, porque su llamada qued¨® interrumpida con la explosi¨®n del segundo artefacto, el colocado ante las oficinas de la Swissair (quinientos gramos de Goma 2), junto a la cabina telef¨®nica. El caos y el p¨¢nico seguir¨ªan durante largos minutos todav¨ªa, a la vez que numerosos efectivos de la Polic¨ªa Nacional, Bomberos y Polic¨ªa Municipal acordonaban la zona. Siete heridos, tres de ellos graves, fueron el tr¨¢gico balance.
Jos¨¦ Antonio Gurriar¨¢n, nacido en la localidad gallega de Barco de Valdeorras hace 37 a?os, casado y con tres hijos (Roc¨ªo, de ocho a?os; Cristina, de catorce, y Jos¨¦ Antonio, de diecis¨¦is) empez¨® su carrera period¨ªstica en El Alc¨¢zar. Pas¨® despu¨¦s a Nuevo Diario y, posteriormente, dirigi¨® el Diario Monta?¨¦s. De aqu¨ª cambi¨® en distintas ocasiones de medio y trabaj¨® en la revista Semana, S. P., Pueblo, Arriba, El Socialista, del que fue director desde mayo de 1978 hasta diecis¨¦is meses despu¨¦s, en que volvi¨® al diario Pueblo como subdirector. Militante del PSOE y de la UGT, forma parte del Colectivo de Periodistas Socialistas.
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