Mubarak regresa de Estados Unidos con las manos vac¨ªas

El presidente egipcio, Hosni Mubarak, regresa a El Cairo con las manos vac¨ªas despu¨¦s de que el presidente norteamericano, Ronald Reagan, rechazase su propuesta de que Estados Unidos entable conversaciones con una delegaci¨®n jordano-palestina como paso previo a una negociaci¨®n directa ¨¢rabe-israel¨ª. Reagan calific¨® de "positiva, pero insuficiente" la propuesta de Mubarak. La Administraci¨®n norteamericana ha negado tambi¨¦n al dirigente egipcio los 870 millones de d¨®lares (unos 161.000 millones de pesetas) de ayuda suplementaria que hab¨ªa solicitado para este a?o, alegando dificultades presupuestarias.La doble negativa de EE UU a intervenir activamente en Oriente Pr¨®ximo deja en una mala situaci¨®n al frente ¨¢rabe de pa¨ªses moderados, que entiende que ¨¦sta puede ser la ¨²ltima oportunidad de un arreglo pac¨ªfico del conflicto de esa zona. Para Hussein de Jordania y Mubarak, el tiempo se est¨¢ acabando y la falta de soluciones juega a favor de las posiciones radicales en la regi¨®n. Los dirigentes moderados necesitan demostrar que su pol¨ªtica conciliadora obtiene resultados concretos, lo que no ha ocurrido hasta ahora.

Mientras Reagan y Mubarak almorzaban el martes en la Casa Blanca, EE UU vetaba en el Consejo de Seguridad de la ONU una resoluci¨®n de condena a Israel por su pol¨ªtica de castigo militar en el sur de L¨ªbano. El Departamento de Estado manifest¨® ayer su preocupaci¨®n por las posibles represalias de terroristas shi¨ªes contra los intereses norteamericanos y las Embajadas de EE UU han sido puestas en estado de alerta. El portaaviones Eisenhower est¨¢ preparado para una eventual evacuaci¨®n de los diplom¨¢ticos y la colonia estadounidenses de Beirut.

Washington cree que lo que trata de hacer Mubarak es "meter por la puerta de atr¨¢s" a la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP) y lograr as¨ª un contacto directo de Arafat con EE UU. Fuentes norteamericanas afirman que los ¨¢rabes intentan evitar una negociaci¨®n directa con Israel, la soluci¨®n que apoya EE UU, y quieren que Reagan negocie con Peres, en su nombre.

Mubarak tampoco ha tenido suerte con el Congreso, que le ha advertido que el aumento de la ayuda que recibe Egipto est¨¢ condicionado a que El Cairo vuelva a enviar a su embajador a Israel.