La aduana de La Jonquera ha incautado numerosas partidas destinadas al mercado clandestino espa?ol

Cuatrocientos falsos relojes Rolex fueron intervenidos por la Guardia Civil el pasado d¨ªa 1 de abril en La Jonquera (Gerona) cuando iban a ser introducidos en Espa?a por dos ciudadanos italianos. Italo Stefano Fasanotti y Pasquale Gambardella, conductor y ocupante respectivamente del Fiat 131 en el que se encontraban ocultos los relojes permanecen en libertad provisional y est¨¢n acusados de un presunto delito de falsificaci¨®n. Sin embargo las medidas adoptadas por la Justicia espa?ola en anteriores aprehensiones permiten suponer que el caso ser¨¢ sobrese¨ªdo y los relojes, destruidos. Los relojes se encontraban ocultos en el interior del respaldo del asiento trasero dispuestos en 16 paquetes o bultos de color blanco. En atestado instruido por la Guardia Civil precisa que fueron intervenidos un total de 150 falsos relojes Rolex de caballero modelo de acero inoxidable. En el mismo lugar se encontraban tambi¨¦n 250 relojes m¨¢s, de tama?o menor o de se?ora. El material aprehendido ha sido valorado en 5.500.000 liras, unas 468.000 pesetas.

De las declaraciones prestadas por los detenidos ante la Guardia Civil se desprende que los relojes fueron adquiridos por Gambardella a "un compatriota desconocido" en la ciudad de Reggio Emilia por 28.000 liras. El propio Gambardella admiti¨® que no se trataba de "aut¨¦nticos Rolex" y declar¨® que su intenci¨®n era venderlos a "unos amigos" en Madrid.

El hecho de que los relojes intervenidos hubiesen sido adquiridos en Italia no ha sorprendido a la letrado Carmela Cus¨ª, representante en Catalu?a, para los temas relacionados con las falsificaciones, de la Federaci¨®n de Relojeros Suizos. Cus¨ª se?ala que en Italia se fabrican la mayor¨ªa de los relojes falsos que se venden en Espa?a.

En los juzgados de Figueres se han visto diversos casos por falsificaci¨®n de relojes procedentes de Italia. En noviembre de 1979 fueron detenidos en La Jonquera los italianos Bonetto Renzo y Mario de Filippi, a quienes se les ocuparon 328 falsos relojes Cartier, que transportaban ocultos en distintas partes del veh¨ªculo Fiat 127 en el que viajaban y en "el bajo vientre, entre la ropa interior". Los dos presuntos falsificadores fueron puestos en libertad previo pago de una fianza de 25.000 pesetas cada uno, que fue depositada en el juzgado por Luis Mar¨ªa Barros Leunda, un industrial vecino de Ir¨²n.

A principios de 1980 fue detenido tambi¨¦n en La Jonquera Pedro Torrico Bernardo, que portaba 698 falsos relojes Omega y Cartier. Unos meses despu¨¦s, en septiembre del mismo a?o, fue puesto a disposici¨®n judicial por un hecho de similares caracter¨ªsticas Antonio Ambrosanio. El juez Esteban Ferrer orden¨® el sobreseimiento libre de la causa al considerar que "de lo actuado se desprende que la falsificaci¨®n de los relojes se realiz¨® fuera de Espa?a, por lo que los hechos no son constitutivos del delito de falsificaci¨®n previsto en el art¨ªculo 280 del C¨®digo Penal".

En el marco de la legislaci¨®n vigente en Espa?a, los fabricantes "s¨®lo puede proteger sus intereses solicitando la destrucci¨®n de los relojes falsos", ha indicado Carmela Cus¨ª. Fuentes de la aduana de La Jonquera consultadas por este diario han se?alado que actualmente hay en esa dependencia 343 relojes "cuya destrucci¨®n se efectuar¨¢ pr¨®ximamente". Las mismas fuentes se negaron a facilitar ning¨²n dato sobre la procedencia de este material.