Endurecidas las condiciones para el cobro de tributos locales

Los ayuntamientos tendr¨¢n que pagar un 5% de los impuestos y recargos que cobre el Estado en su nombre, seg¨²n un decreto aprobado ayer por el Consejo de Ministros. El Gobierno autoriz¨® tambi¨¦n una subida de 2.000 millones de pesetas anuales en las aportaciones de la banca al Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos, destinada a sanear el Banco Urquijo-Uni¨®n.Por la primera medida se endurecen las condiciones de colaboraci¨®n del Estado en la gesti¨®n de tributos locales. Los contribuyentes obligados a pagar recargos sobre la renta en seis centenares de ayuntamientos donde Hacienda proyecta distribuir 2,2 millones de impresos no podr¨¢n compensar su importe de la cantidad que les debe la Hacienda central.

El decreto que regula la gesti¨®n por Hacienda de varios tributos municipales (recargos en el impuesto sobre la renta, contribuciones rural y urbana y licencias fiscales) ofrece a cada ayuntamiento la opci¨®n de gestionarlos directamente o que el Estado se haga cargo de ello.

En el primer caso, la corporaci¨®n municipal que decida afrontar la gesti¨®n del tributo dejar¨¢ de percibir las entregas a cuenta que hasta ahora les anticipaba Hacienda. Si el ayuntamiento se inclina por la alternativa de que el Estado recaude en su nombre, perder¨¢ un 551. de la recaudaci¨®n obtenida por los servicios de la Administraci¨®n central, en concepto de gastos que hasta ahora corr¨ªan a cargo de Hacienda. Junto a los tres ¨²nicos art¨ªculos del decreto, valorados por fuentes municipales como un endurecimiento de las condiciones actuales, la disposici¨®n faculta al Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda para dictar las normas de gesti¨®n. Sin embargo, en contra de lo anunciado por el secretario de Estado de Hacienda, Jos¨¦ Borrell, el decreto no autoriza a los contribuyentes con derecho a devoluci¨®n en el impuesto sobre la renta y afectados por recargos municipales sobre el mismo a compensar el importe del recargo de la cantidad que les deber¨¢ devolver la Administraci¨®n central.

La compensaci¨®n, reclamada insistentemente por los ayuntamientos, fue ya rechazada por Hacienda el a?o pasado, al hacer efectiva por primera vez la exigencia de recargo sobre la renta de 1983. Esta negativa ha contribuido al fracaso de dichos recargos: deber¨ªan haber sido pagados cerca de 10.000 millones de pesetas, y apenas fueron ingresados 4.000 millones. M¨¢s de un 60% de los contribuyentes que declaren renta en los dos pr¨®ximos meses tendr¨¢ derecho a devoluciones por valor pr¨®ximo a los 100.000 millones de pesetas. Por ello, hasta el mismo d¨ªa que la Comunidad Aut¨®noma de Madrid anunci¨® la suspensi¨®n del proyecto de cobrar su 3%, Hacienda cambi¨® de actitud y decidi¨® descontar de las eventuales devoluciones el importe de los recargos. Lleg¨® a preparar al efecto un decreto que derogaba las normas de hace un a?o. Jos¨¦ Borrell justificaba el cambio en que hace un a?o la Administraci¨®n central no ten¨ªa capacidad de gesti¨®n suficiente y ahora ha mejorado, mucho. Pero el texto del decreto aprobado por el Gobierno y conocido ayer por este peri¨®dico no autoriza la compensaci¨®n.

Un portavoz de la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias, organizaci¨®n que refleja la mayor¨ªa socialista en los ayuntamientos, declin¨® ayer pronunciarse sobre el decreto hasta conocerlo textualmente. Agreg¨® que, seg¨²n' sus noticias del Consejo de Ministros, la disposici¨®n s¨®lo se refiere a las contribuciones urbana y r¨²stica y a las licencias fiscales.

Aumento del Fondo

En cuanto al aumento de aportaciones de la banca privada al Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos, regulado tambi¨¦n por decreto, tiene por objetivo financiar, en un periodo de seis a?os, 12.800 de los 50.000 millones de pesetas que recibir¨¢ suplementariamente el Banco Urquijo-Uni¨®n. Para financiar estos 12.800 millones de pesetas, dicho fondo -formado al 50% por la banca privada y el Banco de Espa?a, que le ha anticipado casi medio bill¨®n de pesetas- elevar¨¢ la aportaci¨®n anual de la banca privada desde el 1 por 1.000 de sus dep¨®sitos a final de a?o hasta el 1,2 por 1.000.