El acta de La Habana

Fidel Castro ha conseguido aglutinar durante una semana, en La Habana, al espectro pol¨ªtico completo de la izquierda latinoamericana. Pese a que la invitaci¨®n del presidente cubano inclu¨ªa a las fuerzas pol¨ªticas de izquierda, centro y derecha, estas ¨²ltimas han estado ausentes. Pr¨¢cticamente todas las intervenciones cubrieron las posturas de la izquierda marxista, socialdem¨®crata y cristianos cr¨ªticos. El l¨ªder cubano declar¨® que esta reuni¨®n hab¨ªa sido "la m¨¢s democr¨¢tica y pluralista de cuantas se han celebrado en el hemisferio sobre la deuda externa".El encuentro ha conseguido crear una conciencia colectiva de que los casi 60 billones de pesetas que debe Am¨¦rica. Latina son el elemento actual m¨¢s indentificador de una conciencia regional. Se han rechazado una y otra vez los planteamientos individuales y se ha reivindicado que, frente a la actuaci¨®n cartel de los acreedores (Club de Par¨ªs, sindicato de bancos afectados, etc¨¦tera), las naciones deudoras han de organizar un frente com¨²n para las cuestiones generales, aunque haya especificidades para cada situaci¨®n concreta.

Sin embargo, el fantasma de un club de deudores activo no apareci¨® por el palacio de Convenciones de La Habana en casi ning¨²n momento. Una vez conseguida la independencia pol¨ªtica (excepto el caso de Puerto Rico permanentemente recordado), se trata de ver ahora si el continente es capaz de desarrollar la independencia econ¨®mica.

El Encuentro de La Habana ha servido tambi¨¦n para que se oyera la voz de los peque?os, olvidados casi siempre frente a las enormes dificultades de los grandes, como Brasil, M¨¦xico, Argentina o Venezuela. Per¨², con su nuevo Gobierno socialdem¨®crata, ha sido la estrella de la funci¨®n.

La ¨²nica propuesta concreta aceptada en el encuentro cubano ha sido la de apoyar una jornada continental de protesta contra la deuda exterior, el pr¨®ximo 3 de octubre.