Las estad¨ªsticas la hora de Espa?a

La entrada de Espa?a en la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) ha dado lugar a algunas reflexiones p¨²blicas sobre la situaci¨®n actual de las estad¨ªsticas espa?olas y el reto que la integraci¨®n supone para la adaptaci¨®n de un sistema que se considera insuficiente para satisfacer las necesidades de informaci¨®n planteadas. Concretamente, y desde estas mismas p¨¢ginas, el art¨ªculo Las estad¨ªsticas en la hora de Europa, publicado en EL PA?S del 30 de noviembre, ofrec¨ªa algunas consideraciones respecto al papel que debe desempe?ar el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) en este contexto, aludiendo asimismo a la dispersi¨®n que se est¨¢ produciendo, al asumir algunos ministerios y comunidades aut¨®nomas tareas estad¨ªsticas.

Habr¨ªa que aludir, en primer lugar, al papel fundamental que debe desempe?ar el INE como organismo central y coordinador de la estad¨ªstica espa?ola, reconocido desde la propia "ley de 31 de diciembre de 1945, por la que se organiza la estad¨ªstica oficial y se crea el INE", al establecer en su exposici¨®n de motivos que la funci¨®n de "coordinaci¨®n, que implica ordenaci¨®n y direcci¨®n, no abarcar¨¢, por m¨²ltiples razones, la ejecuci¨®n de todas las estad¨ªsticas, pero comprender¨¢ una intervenci¨®n amplia que evite la multiplicidad de trabajos con id¨¦ntico objeto, las faltas de m¨¦todo, y haga posible la comparaci¨®n de los resultados". La misma ley, en su art¨ªculo segundo, dispone lo siguiente: "El INE tendr¨¢ como misi¨®n primordial la: centralizaci¨®n de las estad¨ªsticas de inter¨¦s p¨²blico. La centralizaci¨®n comprender¨¢, en unos casos, la realizaci¨®n por el INE de todas las operaciones del proceso estad¨ªstico, y en otros, s¨®lo la ejecuci¨®n de parte de ellas o la coordinaci¨®n de las estad¨ªsticas, con miras de inter¨¦s general y perfecci¨®n. Los ministerios realizar¨¢n por s¨ª mismos las estad¨ªsticas que consideren necesarias a sus propios fines, quedando facultado el Instituto Nacional de Estad¨ªstica para ejercer una funci¨®n general de car¨¢cter coordinador".

Alternativa global

Junto a este papel central del INE en el sistema estad¨ªstico espa?ol, que deber¨ªa ser fortalecido no s¨®lo mediante las oportunas dotaciones de medios organizativos, personales y materiales, sino tambi¨¦n a trav¨¦s de la elaboraci¨®n de una alternativa global y planes de actuaci¨®n a corto y medio plazo suficientemente respaldados por los poderes p¨²blicos, es necesario que la estad¨ªstica de los ministerios sea, asimismo, potenciada, con el fin de enriquecer el conjunto de la informaci¨®n disponible mediante la explotaci¨®n de los datos de origen administrativo, ' en gran medida in¨¦ditos en nuestro pa¨ªs, y que en otros pa¨ªses de estad¨ªstica avanzada constituyen una valiosa fuente de informaci¨®n complementaria de la obtenida de las investigaciones espec¨ªficas, bien se trate de censos o de encuestas.

Esta distribuci¨®n inicial de tareas estad¨ªsticas entre el INE, dedicado. fundamentalmente a la realizaci¨®n de censos, encuestas y cuentas nacionales, y los ministerios, encargados de la explotaci¨®n con fines estad¨ªsticos de los datos que derivan de su gesti¨®n, no debe. implicar una compartimentaci¨®n absoluta de funciones. Por el contrario, ser¨ªa conveniente que el INE profundizara en la utilizaci¨®n de la informaci¨®n administrativa para la elaboraci¨®n de sus estad¨ªsticas y que los departamentos ministeriales incorporaran m¨¦todos estad¨ªsticos adecuados al tratamiento de sus datos.

Las estad¨ªsticas laborales

En el art¨ªculo Las estad¨ªsticas en la hora de Europa se afirma que la dispersi¨®n de ' tareas induce a pensar al menos a los malevolentes, que "se persigue precisamente esa amigable proliferaci¨®n de datos de la que siempre resulta aquel que se acomoda mejor a los deseos de los gestores econ¨®micos", aludi¨¦ndose, por ser un buen ejemplo, al desempleo y al "reforzamiento de la Direcci¨®n General de Estad¨ªstica del Ministerio de Trabajo a expensas del funcionariado del INE".

Como responsable de la citada direcci¨®n general, considero obligado exponer algunas razones para demostrar que el ejemplo utilizado es malo, lo que lleva a restar validez a una argumentaci¨®n que podr¨ªa estar no exenta de raz¨®n en algunos de sus puntos.

Hay que decir, en primer lugar, que la Direcci¨®n General de Estad¨ªstica a la que se alude es, en realidad, la Direcci¨®n General de inform¨¢tica y Estad¨ªstica, creada en abril de 1985 con el objetivo de disponer de una unidad con capacidad efectiva de direcci¨®n, coordinaci¨®n y planificaci¨®n de uno de, los mayores parques inform¨¢ticos de la Administraci¨®n; coordinaci¨®n necesaria no s¨®lo en lo que se refiere a los medios f¨ªsicos, sino tambi¨¦n en cuanto a la informaci¨®n en s¨ª misma, como un recurso que debe administrarse eficazmente. Con este objetivo se est¨¢ elaborando un plan inform¨¢tico,o mejor de informaci¨®n, teniendo en cuenta, en primer lugar, las necesidades de los entes gestores del ministerio, organismos aut¨®nomos y Seguridad Social, y, en segundo lugar, las necesidades de informaci¨®n estad¨ªstica que est¨¢n siendo dise?adas por los servicios t¨¦cnicos, en un trabajo de medio plazo que se superpone con las tareas de elaboraci¨®n, de algunas estad¨ªsticas en todas sus fases, recopilaci¨®n y an¨¢lisis de otras, difusi¨®n de publicaciones peri¨®dicas, etc¨¦tera.

Desde comienzos de 1983i el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social ha venido potenciando los servicios estad¨ªsticos y centralizando tareas anteriormente dispersas, con el fin de elaborar y ejecutar un Plan de Estad¨ªsticas Laborales y de la Seguridad Social, basado en la adecuada explotaci¨®n de la informaci¨®n derivada de la gesti¨®n administrativa.

. Una simple revisi¨®n de las materias contenidas en el Bolet¨ªn de Estad¨ªsticas Laborales y en otras publicaciones monogr¨¢ficas del ministerio (paro registrado y movimiento laboral registrado, regulaci¨®n de empleo, convenios colectivos, huelgas, accidentes de trabajo, conciliaciones, afiliaci¨®n, pensiones, etc¨¦tera) permite deducir que el campo de actuaci¨®n de las estad¨ªsticas elaboradas por el departamento no es redundante con el ¨¢mbito propio de las investigaciones del INE, si bien se precisa una colaboraci¨®n estrecha en materias conexas para, precisamente, evitar redundancias.

Estad¨ªstica estatal y auton¨®mica

Hechas estas necesarias aclaraciones, volvamos al marco de la estad¨ªstica oficial espa?ola y a la que, considero, deber¨ªa ser la distribuci¨®n de funciones entre los distintos organismos de las Administraciones p¨²blicas, y concretamente el INE, los departamentos ministeriales de la Administraci¨®n central del Estado, las distintas consejer¨ªas de las comunidades aut¨®nomas y los servicios centrales de estad¨ªstica que se est¨¢n creando por algunos Gobiernos auton¨®micos,

Los departamentos ministeriales tendr¨ªan que cumplir una funci¨®n importante como organismos ejecutores de planes sectoriales parciales dentro de un plan estad¨ªstico nacional debidamente coordinado por el IN-E. La potencialidad como fuente estad¨ªstica de la informaci¨®n de origen administrativo no ha sido suficientemente desarrollada por haber sido organizada, en general, para resolver problemas espec¨ªficos de gesti¨®n en pr¨¢ctica de conexi¨®n con las necesidades de informaci¨®n estad¨ªstica existentes.

El papel de los delegados del' INE, en los ministerios, en la actualidad pr¨¢cticamente vac¨ªo de contenido, tendr¨ªa que ser claramente definido para que contribuyeran con eficacia a la funci¨®n coordinadora que corresponde al instituto y a la canalizaci¨®n de las necesidades estad¨ªsticas hacia los sistemas de informaci¨®n orientados a la gesti¨®n.

Por lo que respecta a las comunidades aut¨®nomas, hay que recordar que la Constituci¨®n establece la competencia exclusiva del Estado en "la estad¨ªstica para fines estatales", sin perjuicio de las competencias atribuidas por los estatutos de autonom¨ªa de las comunidades aut¨®nomas a las mismas en las estad¨ªsticas de inter¨¦s propio.

En el ¨¢mbito de la estad¨ªstica administrativa, el precepto constitucional aludido lleva a la conclusi¨®n de que las transferencias de la gesti¨®n de determinadas funciones y servicios no deber¨ªan implicar las de las estad¨ªsticas de inter¨¦s estatal que de ellos se derivan, lo que significa que las comunidades aut¨®nomas deben suministrar a la Administraci¨®n del Estado la, informaci¨®n de base relativa a las materias transferidas de acuerdo con la metodolog¨ªa establecida con car¨¢cter homog¨¦neo, ya que en otro caso no ser¨ªa factible su integraci¨®n con el resto de la informaci¨®n para la elaboraci¨®n de estad¨ªsticas de ¨¢mbito estatal, todo ello sin perjuicio de las estad¨ªsticas, relativas o no a materias transferidas, que las comunidades aut¨®nomas puedan elaborar para sus propios fines.

En lo que se refiere a las estad¨ªsticas laborales de origen administrativo, este principio ha sido plasmado, en general, en los propios decretos de transferencias, de tal forma que las comunidades aut¨®nomas suministran los cuestionarios normalizados relativos a las materias transferidas (convenios colectivos, regulaci¨®n de empleo, huelgas,- cooperativas, etc¨¦tera), cumplimentados de acuerdo con las medolog¨ªas existentes. En contrapartida, el Ministerio de Trabaj¨® y Seguridad Social proporciona a las comunidades aut¨®nomas toda la informaci¨®n elaborada relativa a dichas materias y consulta a las mismas los cambios en la metodolog¨ªa de elaboraci¨®n de las estad¨ªsticas que se est¨¢n produciendo.

Para cerrar el c¨ªrculo hay que aludir a las oficinas o servicios centrales de estad¨ªstica creados en la mayor¨ªa de las comunidades aut¨®nomas con el objetivo de coordinar las estad¨ªsticas de la comunidad. La existencia de tales servicios es una consecuencia l¨®gica de la organizaci¨®n auton¨®mica del Estado.

En el campo de las estad¨ªsticas de origen administrativo que derivan de funciones transferidas, la captura del dato original corresponde- necesariamente a las comunidades aut¨®nomas y, en particular, a las consejer¨ªas que tienen encomendada la gesti¨®n, pero nada se opone a que en otro tipo de estad¨ªsticas, las encuestas, por ejemplo, que lleva a cabo el INE, se pueda convenir en algunos casos con las comunidades aut¨®nomas la realizaci¨®n por ellas de algunas fases de proceso, reserv¨¢ndose en todo caso la Administraci¨®n del Estado, cuando se trate de estad¨ªsticas de ¨¢mbito estatal, la delimitaci¨®n inicial de objetivos, la metodolog¨ªa y la supervisi¨®n del trabajo de campo en su caso.

Conclusiones

1. El INE tiene que ser potenciado para que cumpla con mayor eficacia que la actual su papel de organismo central y coordinador de toda la estad¨ªstica oficial, cualquiera que sea el origen de los datos, lo que no pasa solamente por la elaboraci¨®n de una ley de estad¨ªstica que sustituya a la de 1945, sino tambi¨¦n por el establecimienlo de un plan que no constituya un simple cat¨¢logo de buenas intenciones, sino que, previo an¨¢lisis de las necesidades, lagunas, limitaciones y prioridades existentes, establezca un inventario de estad¨ªsticas a realizar, organismos ejecutores, adem¨¢s del INE, y relaciones entre los mismos, incorporando una evaluaci¨®n, aunque sea aproximada, de plazos y medios para su implantaci¨®n gradual.

2. En la medida en que los departamentos ministeriales deben desempe?ar un papel significativo en la ejecuci¨®n del plan estad¨ªstico nacional, los medios asignados a los mismos deben incrementarse, lo que, consecuentemente, lleva a la necesidad de aumentar las plantillas de los cuerpos estad¨ªsticos de la Administraci¨®n y de establecer planes de formaci¨®n o reciclaje para que los funcionarios de nivel auxiliar y administrativo se adapten a las tareas estad¨ªsticas.

3. En lo que se refiere a la Administraci¨®n auton¨®mica, y tambi¨¦n a la local, tendr¨ªan que establecerse f¨®rmulas de colaboraci¨®n que concilien el ejercicio efectivo por la Administraci¨®n del Estado de la competencia en "la estad¨ªstica para fines estatales" con la satisfacci¨®n de las necesidades de informaci¨®n de tipo regional o local y la competencia que las comunidades aut¨®nomas tienen atribuida en las estad¨ªsticas para sus propios fines, evitando la redundancia de trabajos y las guerras de cifras.

En definitiva, el sistema estad¨ªstico espa?ol exige una potenciaci¨®n y un plan de actuaciones, en cuya elaboraci¨®n participen las diferentes- administraciones p¨²blicas y agentes sociales en el marco que proporciona el Consejo Superior de Estad¨ªstica y en el que se definan las necesidades, las prioridades y la distribuci¨®n de funciones entre los ejecutores del mismo.

Carmen de Mipel Casta?o es estad¨ªstica y directora general de Infom¨¢tica y Estad¨ªstica en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.