La junta de accionistas del Banco Central acept¨® mantener el dividendo

El presidente del Banco Central, Alfonso Esc¨¢mez, no tuvo que enfrentarse a ning¨²n accionista cuando en la junta general de la entidad, celebrada ayer, explic¨® que el dividendo del ejercicio pasado era el mismo que el repartido con cargo a 1984. Las explicaciones que dio sobre la necesidad de sanear al m¨¢ximo los bancos filiales adquiridos del Fondo de Garant¨ªa de dep¨®sitos y el anuncio de que la marcha del primer trimestre de 1986 auguraba unos mejores resultados debieron bastar.

El Banco Central obtuvo en el ejercicio pasado 15.064 millones de pesetas de beneficios, despu¨¦s de destinar 4.000 millones al pago de impuestos, cifra ligeramente superior a la de 1.984. Por ello, el Consejo de Administraci¨®n propuso a la junta de accionistas mantener el mismo dividendo por acci¨®n - 115 pesetas- y destinar el resto a aumento de las reservas. Alfonso Esc¨¢mez dio cuenta de los cambios habidos en el Consejo de Administraci¨®n y en la gerencia de la entidad durante el ¨²ltimo a?o, entre los que destacaron la salida del consejo de los hermanos Fierro, la entrada en el mismo de dos personas que hasta entonces eran directores generales, el nombramiento de Epifanio Ridruejo como consejero director general de la entidad y la designaci¨®n como vicepresidente de la entidad de Luis Coronel de Palma.El presidente del Banco Central se?al¨® que la cifrade morosos que tiene la entidad asciende a 41.000 millones de pesetas, de los que 38.000 millones est¨¢n provisionados, y que la deuda latinoamericana asciende a un total de 66.000 millones de pesetas, existiendo unos fondos de provisiones superiores a los 8.000 millones de pesetas. En el mismo sentido recalc¨® que el fondo para cubrir las pensiones efectivam ente causadas est¨¢ cubierto por encima de las necesidades, seg¨²n estudios actuariales.

Los modestos resultados que reflejan las cuentas del Banco Central y el balance consolidado de las entidades del grupo fueron explicados por Alfonso Esc¨¢mez como consecuencia del esfuerzo de saneamiento llevado a cabo en buena parte de los bancos filiales. El Banco de Granada y el de Cr¨¦dito e Inversiones -que absorbieron en 1985 al banco de Sevilla y el Noroeste, procedentes de Rumasa- amortizaron parte de las p¨¦rdidas acumuladas, lo mismo que afloraron otras en el Internacional de Comercio y el Banco de Valencia.

En su interverici¨®n, Alfonso Esc¨¢mez se refiri¨® a los resultados de las grandes empresas industriales y de servicios en las que participa el grupo Central, y anunci¨® la posibilidad de que Andaluza de Piritas, a pesar de su creciente explotaci¨®n, incurriera en unas p¨¦rdidas cifradas en unos 2.000 millones de pesetas.

Para Esc¨¢mez, el ejercicio de 1985 ha tenido unos resultados peque?os como consecuencia de la p¨¦rdida de valor del d¨®lar respecto a la peseta, "ya que no es lo mismo ganar un d¨®lar cuando ¨¦ste vale 180 pesetas que cuando se reduce a 140 pesetas". En el primer trimestre de 1986, los recursos generados por el Banco Central ascienden a 16.000 millones de pesetas, lo que representa un incremento del 28% sobre el a?o anterior.