UGT incluir¨¢ en sus candidaturas electorales a no afiliados y formaciones independientes

UGT abrir¨¢ sus candidaturas a trabajadores no afiliados o formaciones sindicales independientes en las pr¨®ximas elecciones a represenlantes de los trabajadores, seg¨²n afirm¨® ayer Ant¨®n Saracibar, secretario confederal de formaci¨®n de la central socialista. Nicol¨¢s Redondo, secretario general del sindicato, manifest¨®, por su parte, que su organizaci¨®n no entrar¨¢ en ning¨²n caso en una din¨¢mica de insultos y descalificaciones en la campa?a electoral que ahora comienza.

UGT intentar¨¢ llegar a cada una de las 170.000 empresas en las que, en teor¨ªa, habr¨¢n de celebrarse elecciones sindicales. Para ello, explic¨® Ant¨®n Sarac¨ªbar, la central socialista abrir¨¢ sus listas a los no afiliados y formaciones independientes, "tal como ya hicimos en 1982".Las elecciones de 1986, cuyo per¨ªodo de computo estar¨¢ comprendido entre los meses de octubre a noviembre, afectar¨¢n a casi seis millones de trabajadores que prestan sus servicios en 170.000 empresas.

Ello, sin contar el colectivo de funcionarios y ense?antes, cuya normativa electoral no ha visto a¨²n la luz y previsiblemente no la vea en lo que queda de a?o. Las elecciones en estos sectores habr¨¢n de celebrarse tras el per¨ªodo de c¨®mputo -despu¨¦s de diciembre-, y en ese caso los delegados elegidos no se tendr¨¢n en cuenta para determinar la representatividad de cada sindicato. UGT insist¨ªa ayer en arbitrar alguna f¨®rmula que permita salvar este escollo.

Los casi seis millones de posibles electores habr¨¢n de elegir a 285.000 delegados. No obstante, el mayor contingente electoral lo forman las empresas que tienen plantillas entre seis y 50 trabajadores, que totalizan 150.000.

Ser¨¢ en este segmento donde UGT pondr¨¢ mayor enf¨¢sis con el fin de superar, seg¨²n Ant¨¢n Sarac¨ªbar, los 60.000 delegados. "Vamos a continuar siendo sindicato mayoritario, y procuraremos estar en todas las empresas".

Todo vale

La gu¨ªa de la campa?a electoral de UGT analiza la pol¨ªtica sindical, la t¨¢ctica a seguir durante el proceso y la organizaci¨®n de la propia campa?a. Nicol¨¢s Redondo dec¨ªa ayer que "no caeremos en el insulto y la descalificaci¨®n. Queremos que sea una campa?a limpia, que consolide, y no debilite, a los sindicatos".Sin embargo, y aunque en esta ocasi¨®n la obligatoriedad del preaviso es una buena f¨®rmula antifraude -los sindicatos tienen la obligaci¨®n de anunciar con diez d¨ªas de antelaci¨®n la convocatoria de elecciones-, se teme una fuerte confrontaci¨®n entre los dos sindicatos. Marcelino Camacho, cuando apenas hab¨ªan transcurrido cuatro d¨ªas de su reuni¨®n con UGT, hac¨ªa p¨²blicas sus sospechas de que el Gobierno estaba preparando un "pucherazo" electoral a favor de UGT. Redondo confesaba no entender una ruptura tan r¨¢pida de las hostilidades.

En el fondo era algo con lo que ya contaba UGT. En la mencionada gu¨ªa se advierte que durante el proceso electoral CC OO utilizar¨¢ la idea de que la central socialista est¨¢ sujeta al Gobierno y se la intentar¨¢ identificar con el PSOE. La respuesta de UGT tampoco tiene desperdicio. En el citado documento se aconseja que se contraataque: con argumentos paralelos, tales como que la "crisis del PCE afecta de manera muy directa a CC OO".

Todo parece indicar que por encima de la buena voluntad expresada por los dos sindicatos tras la reuni¨®n conjunta celebrada recientemente, persisten en cada uno resabios y resquemores dificilmente superables que saldr¨¢n a relucir con toda su fuerza en las elecciones sindicales. Y ello en perjuicio evidente de ambas formaciones.