Virtualmente desierto el concurso de la Generalitat de la autopista Terrassa-Manresa

El concurso convocado por la Generalitat de Catalu?a para la adjudicaci¨®n de la concesi¨®n de la autopista Terrassa-Manresa ha quedado virtualmente desierto tras la decisi¨®n adoptada ayer por el Consejo de Administraci¨®n de T¨²nel del Cad¨ª de no presentar oferta alguna. ?sta es la ¨²nica sociedad que hab¨ªa realizado varios estudios que resultaron favorables a la viabilidad de la obra. La decisi¨®n de no presentarse al concurso, cuyo plazo finaliza ma?ana, ha sido provocada por la oposici¨®n al proyecto de La Caixa, que, junto a la Caixa de Barcelona, es el principal accionista de T¨²nel del Cad¨ª, con el 28% del capital cada una.

El antiguo proyecto de construir la autopista Terrassa-Manresa cobr¨® visos de una mayor verosimilitud el pasado 5 de junio cuando el Consell Executiu de la Generalitat aprob¨® las cl¨¢usulas del concurso de adjudicaci¨®n. La noticia despert¨® importantes expectativas en los medios econ¨®micos y financieros por el volumen de la inversi¨®n, unos 19.000 millones de pesetas, en un momento de ausencia casi absoluta de grandes proyectos de inversiones. Tambi¨¦n trascendieron muestras de apoyo al proyecto por parte de las poblaciones que enlazar¨ªa en sus 32 kil¨®metros de recorrido, as¨ª como de varias c¨¢maras de comercio.La Generalitat ha mostrado un expl¨ªcito apoyo al proyecto, tal como revela la convocatoria del concurso y su decidida postura a favor del proyecto en el consejo de T¨²nel del Cad¨ª, sociedad en la que participa con un 10%. El presidente de la sociedad, Eusebi D¨ªaz Morera, el director general de la Caixa de Barcelona, Joan Torres Picamal, y el conseller de Econom¨ªa y Finanzas de la Generalitat, Josep Maria Cullell, han sido quiz¨¢ los impulsores m¨¢s entusiastas del proyecto desde que se hizo p¨²blica la convocatoria del concurso. La Caixa de Catalunya, otra entidad cuya participaci¨®n oscila en tomo al 10% en T¨²nel del Cad¨ª, no est¨¢ presente en el consejo y no ha exteriorizado p¨²blicamente su posici¨®n.

Posteriormente, el inter¨¦s de la autopista contagi¨® tambi¨¦n a la Diputaci¨®n de Barcelona y a la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Madrid, cuyos responsables manifestaron estar dispuestos a participar en la nueva sociedad con un capital de 225 y 400 millones de pesetas, respectivamente.

Esta correlaci¨®n de fuerzas tan favorable al proyecto s¨®lo contaba con la oposici¨®n de La Caixa. Al parecer, las reticencias de La Caixa al proyecto ya eran conocidas desde hace tiempo.

Sin embargo, los propulsores y sobre todo la Generalitat confiaban en una reconsideraci¨®n de su posici¨®n por parte de La Caixa cuando llegase el momento de la verdad, circunstancia que no se ha producido.

Las razones de la Caixa

La Caixa sostiene que la presentaci¨®n por parte de T¨²nel del Cad¨ª al concurso significar¨ªa una vulneraci¨®n de los estatutos de la propia sociedad, que establecen que su objetivo social es exclusivamente la construcci¨®n y explotaci¨®n de la concesi¨®n. Considera igualmente inviable la participaci¨®n a trav¨¦s de una filial.Otra raz¨®n esgrimida es su disconformidad con el sistema de financiaci¨®n previsto. La propuesta dise?ada por T¨²nel del Cad¨ª supone la creaci¨®n de una nueva sociedad por los mismos socios y los nuevos, con un capital de unos 4.000 millones de pe setas, lo que representa contar con una financiaci¨®n propia del proyecto superior al 20%. Seg¨²n

La Caixa, la mitad de estos recursos proceder¨ªa del capital de T¨²nel, que disminuir¨ªa de 6.000 a 4.000 millones, (el capital pasar¨ªa de representar del 30%, al 20% de los recursos totales utilizados) y el resto proceder¨ªa de los nuevos candidatos. Los directivos de la entidad de ahorro insisten en que los criterios financieros de su instituci¨®n son muy conservadores y consideran un riesgo excesivo el proyecto.

Estos argumentos no han convencido a los promotores, quienes los han calificado se excesivamente formales y todos negociables y superables si existiera voluntad de realizar la obra. En reuni¨®n a los riesgos, se?alan que la ley de autopistas autoriz¨® a las concesionarias a actuar con s¨®lo un 10% del capital, por lo que consideran que un capital del 20% para ambos proyectos supon¨ªa una garant¨ªa superior al resto de autopistas espa?olas.