Visi¨®n global del pasado de la regi¨®n
Muestra de 130 a?os de arqueolog¨ªa madrile?a
Grupos de colegiales y universitarios forman la mayor¨ªa de los visitantes que se acercan a la exposici¨®n 130 a?os de arqueolog¨ªa madrile?a. En ella, abierta al p¨²blico en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, pueden contemplarse m¨¢s de dos centenares de objetos que van desde una mand¨ªbula de elefante del Paleol¨ªtico hasta platos de cer¨¢mica del XVIII. "Es la primera vez que se da una visi¨®n global de la arqueolog¨ªa de la regi¨®n", afirma Fernando Velasco, uno de los encargados de la muestra.
En el departamento de Arqueolog¨ªa de la Comunidad no niegan las dificultades que han tenido para conseguir ciertos materiales y las reticencias de los museos al pr¨¦stamo de fondos. La Edad de Bronce, Roma y el per¨ªodo isl¨¢mico son las etapas de mayor presencia en la exposici¨®n. Aunque est¨¢ prevista su clausura para el 31 de marzo, puede que se prorrogue otro mes.Para Araceli Pereda, directora general de Cultura, "el tesoro arqueol¨®gico de la regi¨®n se ha venido sacrificando en aras de un desarrollismo mal entendido", refiri¨¦ndose a la explosi¨®n industrial y urban¨ªstica de los a?os sesenta. Ahora, las principales batallas son acabar con los furtivos y "concienciar a la gente de que el arque¨®logo no es el inoportuno que s¨®lo paraliza obras y da problemas" se?ala el arque¨®logo Velasco.
La plaga del furtivo
Respecto al furtivismo cuenta que "es una aut¨¦ntica plaga que expolia importantes yacimientos y escaquea datos a los cient¨ªficos". "La exportaci¨®n al extranjero es un aut¨¦ntico negocio, pero siempre es m¨¢s espectacular para la Administraci¨®n recuperar un Goya en vez de tesoros de miles de monedas".
La arqueolog¨ªa madrile?a comenz¨® en los dep¨®sitos aluviales del r¨ªo Manzanares cuando, en 1847, Graells obtuvo restos de elefantes f¨®siles, y en 1862, Casiano del Prado y Valle localiz¨® varias piezas de s¨ªlex que identific¨® como hachas paleol¨ªticas.
Desde entonces, la colecci¨®n se ha incrementado con restos encontrados en las cuencas de los r¨ªos Manzanares y Jarama, principales referencias del Paleol¨ªtico. La cueva de El Aire (Patones) y la sepulcral de Juan Barbero (Tielmes de Taju?a) han aportado los principales datos sobre el Neol¨ªtico y la Edad del Bronce, respectivamente. Respecto a la Edad del Hierro, el cerro del Ecce Horno (Alcal¨¢ de Henares) y La Torrecilla (Getafe) son enclaves obligados.
Tres n¨²cleos urbanos fueron importantes durante la ¨¦poca romana: Miaccum, en las proximidades de la capital; Titulcia, posiblemente cerca de Aranjuez, y Complutum, en Alcal¨¢, que constituye la ¨²nica excavaci¨®n permanente. En ¨¦poca visigoda destacan, entre otras, las necr¨®polis de Los Afligidos (Alcal¨¢) y El Espartal (Talamanca de Jarama). La muralla ¨¢rabe de Madrid y los asentamientos de Alcal¨¢ la Vieja (Alcal¨¢) y Calatalifa (Villaviciosa de Od¨®n) son lo m¨¢s demostrativo de los cuatro siglos de la presencia ¨¢rabe en la regi¨®n.
La Angosta de los Mancebos, la cuesta de la Vega y la plaza de los Carros, en Madrid, y el teatro Cervantes, en Alcal¨¢, son los principales puntos de exploraci¨®n de tiempos m¨¢s cercanos.
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