Uso del 'off'

Soy otro partidario del off. Me parece que ya somos legi¨®n. Desde que se prohibi¨® la emisi¨®n por televisi¨®n del largometraje Interior de un convento, ha abundando en esta secci¨®n de Cartas al Director la opini¨®n de que el usuario telespectador es libre en todo momento de desconectar su aparato receptor mediante el pulsador off. Soy padre de dos ni?os peque?os, tambi¨¦n usuarios del televisor, y por necesidad me he convertido en un militante del off touch: escenas violentas, off, im¨¢genes desagradables, ojj, programas est¨²pidos, off. Y as¨ª, todo aquello que sea susceptible de herir la sensibilidad m¨ªa o la demis hijos tiene la inexorable respuesta* del sencillo, pero efectivo off. Sin cabreos ni colapsos de la centralita de RTVE * Y no es conformismo. Simplemente creo que ser¨ªa de psiquiatra pretender que la programaci¨®n de Televisi¨®n Espa?ola me contentase segundo a segundo.

. Evidentemente, y siempre bajo mi punto de vista, hay programas nefastos (programas, concursos o series alienantes y ya archicriticadas). Algunos, rid¨ªculos (como el reci¨¦n estrenado Y usted qu¨¦ opina, que pretende sintetizar con elforceps de s¨ªno-no sabe-no contesta cuestiones que tienen muchos matices y que desvirt¨²an el sentido del opinar). Algunos de buen gusto-cultural (La hora del lector). Y, en ¨¢, algunos muy divertidos (como El inspector Gadget, Las chicas de oro).

Resumiendo, en la sociedad de la informaci¨®n, los consumidores, de programas de radio o televisi¨®n tenemos la obligaci¨®n, mientras no existavoluntad pol¨ªtica (porque s¨ª hay medios t¨¦cnicos) de establecer un feed-back m¨¢s adecuado, m¨¢s humano, de decidir por nosotros mismos lo que deseamos ver y o¨ªr.:m- Jos¨¦ Monz¨®. Valencia.