Procesado el due?o de Destiler¨ªas Centuri¨®n, de la antigua Rumasa

El magistrado juez del juzgado n¨²mero 29 de Madrid ha dictado auto de procesamiento contra Luis Miguel Torrijos Var¨®n, propietario de Vinos Oca?a, SA, que el 2 de agosto de 1984 adquiri¨® al Patrimonio del Estado la firma Destiler¨ªas Centuri¨®n, SA, perteneciente al antiguo grupo de empresas Rumasa. Torrijos Var¨®n ha sido procesado por acusaci¨®n de apropiaci¨®n indebida, consecuencia de la denuncia previa formulada por el Patrimonio.

Este proceso se inscribe en la promesa formulada por el ministro de Econom¨ªa y Hacienda, Carlos Solchaga, en el Congreso de los Diputados de perseguir a aquellos compradores de empresas, de Rumasa que no cumplan los compromisos adquiridos con el Patrimonio y que queden al descubierto de las obligaciones contra¨ªdas con Rumasa, SA, a consecuencia de los contratos de compraventa de empresas.

Centuri¨®n adeudaba un pasivo fiscal a la fecha de la venta de 338 millones de pesetas, que fue asumido por Rumasa, determin¨¢ndose en la escritura de compraventa que Rumasa facilitar¨ªa al comprador de Centuri¨®n los fondos necesarios para atender tales pagos. Rumasa entreg¨®, en consecuencia, a Luis Miguel Torrijos talones por importe de 67,6 millones de pesetas, que no fueron dedicados a amortizar las citadas deudas fiscales.

Desviaci¨®n de fondos

Como el Patrimonio detectara la desviaci¨®n de tales fondos, a partir de un determinado momento los talones en cuesti¨®n fueron girados desde Rumasa nominativamente a favor del Tesoro p¨²blico. La inmediata inspecci¨®n financiera y tributaria estableci¨® que el propietario de Destiler¨ªas Centuri¨®n hab¨ªa dejado de ingresar en Hacienda la suma de 64 millones de pesetas, cantidad que fue desviada a las cuentas bancarias de la empresa para ser utilizada en el tr¨¢fico mercantil normal de la misma, al margen del objeto para el que fue instrumentada, que era saldar esas deudas fiscales.En el auto de procesamiento, el juez establece prisi¨®n para el gerente de Centuri¨®n, con fianza de un mill¨®n de pesetas para conseguir la libertad provisional. Para asegurar las responsabilidades pecuniarias, el juez requiere adem¨¢s al procesado fianza de 84 millones de pesetas o el embargo de bienes de su propiedad por cantidad equivalente.

Destiler¨ªas Centuri¨®n fue vendida a Vinos Oca?a, propiedad del encausado, que ofreci¨® pagar 88 millones de pesetas, 15% al contado, oblig¨¢ndose a no hacer regulaci¨®n de empleo en dos a?os. La privatizaci¨®n supuso para Rumasa, SA, un coste de 328 millones de pesetas, ante la alternativa de la liquidaci¨®n, que hubiera supuesto la p¨¦rdida de los puestos de trabajo. Por ajustes de balance, y de acuerdo con los t¨¦rminos del contrato de compraventa, el comprador pag¨® al final 67,8 millones de pesetas.