La familia Ballv¨¦ toma el control del 100% de Campofr¨ªo, al recuperar el 50% en manos de Beatrice Foods

Los hijos de Jos¨¦ Luis Ballv¨¦, Pedro y Fernando, culminaron ayer casi dos a?os de negociaciones para recuperar el 50% del capital del grupo Campofr¨ªo que estaba en poder de la multinacional de la alimentaci¨®n Beatrice Foods desde 1978. En la ¨²ltima fase de las negociaciones, Pedro Ballv¨¦, presidente del grupo, ha tenido que v¨¦rselas con Reginal Lewis, del grupo TLC, que en abril de este a?o hab¨ªa adquirido el control de la divisi¨®n internacional de Beatrice. Los hermanos Ballv¨¦ han pagado por el 50% de la empresa fundada por su padre 90 millones de d¨®lares, unos 10.000 millones de pesetas, en una operaci¨®n de financiaci¨®n en divisas instrumentada por el Banco Central.

Ayer fue un d¨ªa significativo para la industria alimentaria espa?ola: un joven empresario recuper¨® el pleno control de una de las empresas m¨¢s importantes del sector, Campofr¨ªo, que este a?o facturar¨¢ 30.000 millones de pesetas, con un cash-flow (beneficios m¨¢s amortizaciones) de 4.000 millones. Una historia ejemplar en un sector cada vez m¨¢s penetrado por intereses extranjeros.En 1978, Jos¨¦ Luis Ballv¨¦, que hab¨ªa fundado Campofrio ea 1952, vendi¨® el 50% de la firma a la norteamericana Beatrice Foods al resolver la disyuntiva a la que terminan enfrentados todos los negocios familiares. Aquella fue una asociaci¨®n mod¨¦lica, puesto que los norteamericanos jam¨¢s intervinieron en la gesti¨®n de la firma espa?ola.

Tras la muerte del fundador, su hijo Pedro inici¨®, en noviembre de 1985, los contactos para recuperar el 50% en manos extranjeras. La tarea result¨®, sin embargo, extremadamente compleja por culpa de los cambios de propiedad ocurridos en la propia Beatrice. En efecto, la multinacional fue v¨ªctima, en abril de 1986, de una OPA hostil por parte del grupo KKR, en una operaci¨®n de 6.500 millones de d¨®lares en la que participaron 138 bancos. Y en junio del a?o en curso, el grupo TLC que lidera el empresario negro Reginald Lewis, el nuevo adalid de la black enterprise, compr¨® a KKR la divisi¨®n internacional de Beatrice por la que pag¨® al contado 985 millones de d¨®lares, unos 118.000 millones de pesetas, con financiaci¨®n de Drexel Burham Lambert. Dicha divisi¨®n estaba compuesta por 35 compa?¨ªas, repartidas por 65 pa¨ªses, y en ella Campofrio era responsable de cerca del 22% de los beneficios globales.

Con Reginald Lewis, un t¨ªpico tibur¨®n burs¨¢til, la negociaci¨®n se hizo m¨¢s compleja, al agudizarse el conflicto de intereses entre un inversor financiero interesado en el corto plazo y unos industriales con la vista puesta en el largo plazo. Adem¨¢s, en el ¨²ltimo tramo de los contactos, ocurri¨® el crash burs¨¢til. Pero Lewis hab¨ªa iniciado una tarea de poda en la citada divisi¨®n, destinada a deshacerse de la mayor parte de sus compa?¨ªas. De esa estrategia han podido beneficiarse al final los hermanos Ballv¨¦.

As¨ª fue corno en la madrugada de ayer, en un cierre simultaneo celebrado en Sidney, Toronto, Madrid y Nueva York, el empresario negro se deshizo de las sociedades de Beatrice en Australia (vendidas a Cadbury Sweppes), en C¨¢nada y de Campofrio en Espa?a.

Financiaci¨®n ajena

El 50% rescatado por Pedro Ballv¨¦, valorado en libros en algo m¨¢s de 8.500 millones de pesetas, ha sido recomprado por 90 millones de d¨®lares, unos 10.000 millones de pesetas al cambio actual. La operaci¨®n se ha efectuado con financiaci¨®n ajena, instrumentada por el Banco Central.

Con este paso, los Ballv¨¦ inician un proceso que puede convertir a Campofrio en la multinacional espa?ola de la alimentaci¨®n, abordando no s¨®lo la industria c¨¢rnica sino otras especialidades alimentarias. El primer paso es la pr¨®xima apertura de una f¨¢brica en la Alta Saboya francesa para comercializar jam¨®n curado en Europa, proyecto en el que acude asociado con Industrias Manuel D¨ªaz, de Torrijos (Toledo). Otros proyectos en marcha incluyen la construcci¨®n de una nueva f¨¢brica en Burgos, con inversi¨®n superior a los 3.000 millones de pesetas.