El Ballet Nacional, "cenicienta de la danza"

Cuando se pregunta a Ma¨ªa Plisetskaia -cuyo contrato estipula que no est¨¢ obligada a pasar m¨¢s de seis meses al a?o en Espa?a y que contin¨²a bailando con el Bolshoi de Mosc¨² y haciendo giras con su propio grupo- qu¨¦ planteamientos le hicieron los responsables del Ministerio de Cultura de Madrid, qu¨¦ objetivos se le propusieron para la compa?¨ªa, dice sin vacilar: "A m¨ª no me plantearon nada. Yo entend¨ª que lo que se pretend¨ªa era que yo les ayudara a salir al escenario mundial. El baile espa?ol es algo ¨²nico en el mundo, inimitable. En eso Espa?a es n¨²mero uno, no tiene competencia. Pero el ballet aqu¨ª era una cenicienta. Yo vi en seguida que la compa?¨ªa no era peor que las dem¨¢s que hay en el mundo, que estaba compuesta por gente capaz. El problema era que la gente no cre¨ªa -ni siquiera dentro del pa¨ªs- que Espa?a pod¨ªa tener una buena compa?¨ªa de ballet. Al p¨²blico le gusta reconocer, no descubrir. Hay teatros y compa?¨ªas que viven del nombre que tienen, el nombre es su reclamo. Esta compa?¨ªa ten¨ªa poco nombre, actuaba poco, y as¨ª es muy dificil atraer al p¨²blico".Cuenta c¨®mo, a lo largo de la gira que ha hecho este verano con el BTLN -por una docena de ciudades espa?olas-, iba subiendo la moral de los bailarines conforme iban cosechando m¨¢s ¨¦xitos. "Empezaron a llenarse los teatros, hab¨ªa expectaci¨®n. En M¨¦rida [final de la gira] bailaron todos como nunca de bien".

Buenas relaciones con Cultura

De momento no piensa dar en Madrid clases p¨²blicas, como hizo Alicia Alonso en abril pasado, porque "nadie me lo ha pedido", a pesar de que s¨ª las dio el a?o pasado en Nueva York. ?Y qu¨¦ tal se lleva con los bur¨®cratas del Ministerio de Cultura de Espa?a? "Pues mire, es muy simple. Son los ¨²nicos bur¨®cratas del mundo con los que me llevo bien. En mi pa¨ªs, en el Ministerio de Asuntos Exteriores, todos son mis amigos [la se?ora de Schevardnadze vino a la sede del BTLN el a?o pasado, durante su visita a Madrid], pero con el Ministerio de Cultura, fatal, siempre fatal".