Jordi Pujol fuerza el relevo en la presidencia de T¨²nel del Cad¨ª para refinanciar la empresa

Eusebi D¨ªaz-Morera present¨® el pasado lunes la dimisi¨®n como presidente de T¨²nel del Cad¨ª, lo que ha supuesto la culminaci¨®n de una de las situaciones m¨¢s ins¨®litas de la vida econ¨®mica catalana. En la reuni¨®n del consejo, los representantes de los principales accionistas, Josep Joan Pint¨® -presidente de la Caixa de Barcelona- y Pere Vall¨¦s -vicepresidente de La Caixa-, valoraron altamente la labor desarrollada por D¨ªaz-Morera.

Todas las fuentes consultadas han destacado el rigor de la gesti¨®n realizada. La dimisi¨®n, que ayer anunci¨® p¨²blicamente el presidente como una simple cuesti¨®n formal, supone sin embargo el cumplimiento de la condici¨®n impuesta por el presidente Jordi Pujol para que la Generafitat refinanciase la sociedad con unos 1.500 millones de pesetas, aumentando su participaci¨®n en la sociedad del 10% al 23%, indican fuentes contrastadas.Distintas fuentes del consejo coincidieron en que el propio Jordi Pujol hab¨ªa puesto la condici¨®n de sustituir a D¨ªaz-Morera, argumentando que "ya que la Generalitat hac¨ªa un esfuerzo de inversi¨®n importante quer¨ªa poner en la presidencia a una persona de su confianza". La persona de confianza elegida es el ex conseller de Econom¨ªa y Finanzas de la Generalitat, Josep Manuel Bas¨¢?ez. La condici¨®n puesta por Pujol no se debe ¨²nicamente a la confianza en su ex conseller de Hacienda, Bas¨¢?ez, sino sobre todo a la animadversi¨®n manifiesta del actual titular de la Generalitat hacia Eusebi D¨ªaz-Morera por la actuaci¨®n de ¨¦ste en su intento de reflotar Banca Catalana, cuando ocup¨® la presidencia de la entidad en 1982.

Pujol no acept¨® nunca la estrategia desarrollada por D¨ªaz Morera para salvar Banca Catalana, quien recab¨® el apoyo de todas las instancias posibles, incluidos los socialistas, que se perfilaban ya como los vencedores en los comicios de octubre y para lo que consigui¨® un compromiso de apoyo de Felipe Gonz¨¢lez. En la posterior causa judicial contra los administradores de Banca Catalana, D¨ªaz Morera hizo una declaraci¨®n exculpator¨ªa penalmente para Pujol, pero el pol¨ªtico "jam¨¢s le perdon¨®" haber desarrollado una rigurosa estrategia de salvaci¨®n del banco sobre la doble base de aflorar totalmente las p¨¦rdidas generadas y de recabar apoyos pol¨ªticos ajenos al propio fundador del banco.La ejecuci¨®n de las obras ha supuesto una inversi¨®n de 9.792 millones de pesetas, cantidad pr¨®xima a la presupuestada. Sin embargo, la sociedad ha sufrido siempre una falta de capitalizaci¨®n en relaci¨®n a la inversi¨®n prevista. Con un capital de 5.280 millones de pesetas ha precisado un recurso constante al endeudamiento. Las deudas han evolucionado hasta llegar a 17.500 millones a finales de 1988.