Por menos de 40.000 no se alquila una vivienda, ni siquiera fuera de la capital
Ni en Parla ni en M¨®stoles se encuentran pisos de alquiler por menos de 40.000 pesetas al mes. Hay propietarios de agencias que llevan 25 a?os en el negocio y afirman que el m¨ªnimo est¨¢ a¨²n m¨¢s caro: 50.000 pesetas. Pero la prueba m¨¢s tajante la aporta el diario de anuncios gratuitos Segundamano, cuyo apartado de pisos hasta 40.000 pesetas desaparecer¨¢ en breve. Pero el precio del piso es s¨®lo una m¨¢s entre las muchas penalidades que han de sufrir los 500 inquilinos que alquilan pisos cada mes a trav¨¦s de anuncios y agencias."SEA EUROPEO. Alquile su piso de particular a particular sin gastos de agencia". Ese anuncio apareci¨® hace dos d¨ªas en Segundamano. La supuesta europeidad se conseguir¨ªa en una empresa que afirma no ser agencia, sino "central de particulares" que pone en contacto a inquilinos y caseros. Lo ¨²nico objetable es que despu¨¦s de llamar al 523 41 15, el futuro inquilino descubrir¨¢ que abonarse a la central le sale por 19.000 pesetas.Otras empresas son m¨¢s h¨¢biles: "Pisos en todo Madrid a partir de 60.000 pesetas. Sin comisiones. Tel¨¦fono 523 34 50". Y el servicio que proporcionan es poner en contacto a inquilinos y arrendatarios. Exactamente igual que la anterior, s¨®lo que esta vez inscribirse en el centro de informaci¨®n cuesta s¨®lo 15.000 pesetas.
En la misma p¨¢gina se observa otro anuncio recuadrado: "Atenci¨®n, propietario, alquilamos su piso". Aparece otro tel¨¦fono, pero la direcci¨®n es la misma: calle de Preciados, 11, 3? B. El negocio es limpio.
El consejero delegado de Segundamano, Carlos Maier, asegura que su diario, que tiene una tirada mensual de 45.000 ejemplares, se mantiene al margen de todos esos movimientos.
Su peri¨®dico es escrutado desde las oficinas de las m¨¢s insignificantes agencias de alquiler hasta las m¨¢s importantes inmobiliarias. Si ¨¦l elimina en breve, como asegura que har¨¢, el apartado de pisos "hasta 40.000 pesetas" es porque algo ha cambiado. "Hace pocos meses se anunciaban una docena de viviendas, y ahora apenas lo hacen dos o tres en cada edici¨®n", asegura.
Trucos posibles
Dice que el peri¨®dico ha superado todos los trucos posibles para evitar filtraciones. "Durante un tiempo tuvimos problemas, porque el diario se edita un d¨ªa o dos antes de su publicaci¨®n, pero lo superamos". Por eso, ahora, cuatro vigilantes jurados cuidan para que nadie acceda siquiera a los ejemplares defectuosos que salen de las rotativas.
Sin embargo, a las cinco de la ma?ana llamaron el mi¨¦rcoles pasado a la propietaria de un estudio que se alquilaba en la calle de Goya por 70.000 pesetas. Podr¨ªa haber dos posibilidades: que alguien que trabaja en el peri¨®dico tuviera acceso a ¨¦l o que uno de los repartidores o ruteros lo utilizara en provecho propio. "Por los trabajadores de plantilla pongo la mano en el fuego", dijo el consejero.
Carlos Fern¨¢ndez Mart¨ªn, propietario de una de las principales agencias de alquiler en Madrid, con 25 a?os de experiencia, asegura que el precio m¨ªnimo est¨¢ en 50.000 pesetas. "Por eso se puede encontrar algo viejo en Torrej¨®n, pero m¨¢s barato ser¨ªa casi milagroso".
En el precio no acaban las exigencias de los caseros. Un funcionario soltero ser¨ªa el inquilino ideal, a tenor de los anuncios. Pero se puede pedir m¨¢s: que sea soltero, que est¨¦ casado y sin hijos, que sean se?oritas, a ser posible hermanas, o que sea enfermera o haga un master. La puerta suele abrirse tras cumplir alguno de esos requisitos y no olvidarse de pagar la fianza. Una vez dentro, las exigencias contin¨²an. A Lourdes Garc¨ªa Soto, por ejemplo, no le pidieron fianza cuando entr¨® en un piso de 70 metros cuadrados en Vallecas. Pero ahora ni su casero ni el Ayuntamiento quieren pagar el mill¨®n de pesetas que cuesta ponerle el techo a la cocina que se cay¨® hace un a?o.
C¨®mo echar en un a?o a un inquilino que no paga
Si no utiliza m¨¦todos violentos y acata la ley, al casero le llevar¨¢ un a?o expulsar a su inquilino. Si adem¨¢s dispone de un abogado que no le cobre caro, el deshaucio por falta de pago s¨®lo le saldr¨¢ por unas 150.000 pesetas. Eso, en caso de que el inquilino no conozca bien los procedimientos judiciales.Porque un inquilino bien informado sobre la burocracia judicial puede demorar su expulsi¨®n m¨¢s de medio a?o. Mecanismo: no darse por enterado de la primera citaci¨®n del juez (dos meses), no comparecer en la primera citaci¨®n (dos o tres meses), ni al se?alamiento del deshaucio (varias semanas). Hasta ese ¨²ltimo momento, el inquilino siempre puede dar marcha atr¨¢s y pagar la renta.
Los honorarios del abogado dependen del precio de la deuda, pero si el casero pretende cobrar el dinero, el letrado puede llevarse unas 125.000 pesetas m¨¢s. Cuando el juez se pronuncie pueden haber transcurrido otros tres a?os. Al inquilino s¨®lo le podr¨¢n retirar cada mes el 25% de su n¨®mina, en caso de que la tenga.
"Una barbaridad"
El presidente de la Asociaci¨®n de Inquilinos, Enrique Pedreros, cree que son muy pocos los que no pagan. "Cuando se da un caso as¨ª es porque hay mucha humedad en el piso o algunas deficiencias que ninguno quiere pagar. Pero, de cualquier forma, echar a alguien por problemas econ¨®micos me parece una barbaridad. Es como si echan a un enfermo porque no puede pagar el hospital".
Carlos Fern¨¢ndez, propietario de una de las mayores agencias de alquiler que hay en la Comunidad, reconoce que los que no pagan suponen s¨®lo un 5% de los inquilinos "o quiz¨¢ menos".
Con n¨®minas y avales bancarios s¨®lo se presentan a las agencias, seg¨²n Fern¨¢ndez, un 40% de los inquilinos: "El resto no trae m¨¢s que la fianza y su palabra".
Fern¨¢ndez cree que s¨®lo un porcentaje m¨ªnimo de los caseros que han logrado deshauciar a sus deudores al cabo del a?o prosiguen las diligencias para cobrar la deuda acumulada en ese tiempo. "No suelen hacerlo porque en muchas ocasiones el inquilino es alguien insolvente".
Historia de un fracaso
La Asociaci¨®n de Inquilinos se dio a conocer hace dos a?os con la okupaci¨®n de varias viviendas y la propagaci¨®n de algunas ideas originales: "Queremos inculcar en los ciudadanos la cultura de alquiler", dec¨ªa entonces su presidente, Enrique Pedrero, resaltando bien lo de cultura ante grabadoras de peri¨®dico, radio y emisoras de televisi¨®n. Pedrero, sus amigos y 15 familias de Vallecas se met¨ªan a vivir en casas abandonadas hasta que la polic¨ªa los desalojaba d¨ªas despu¨¦s. Ni el Instituto de la Vivienda (Ivima) les dio casa, ni el Ayuntamiento tampoco.Ahora disponen de. 700 afiliados, pero, seg¨²n su presidente, s¨®lo se movilizan unas 30 personas. Lo ¨²ltimo que hicieron fue la okupaci¨®n simb¨®lica del Museo Reina Sof¨ªa, y lo pr¨®ximo ser¨¢ ante la Casa de la Villa, con disfraces de ?lvarez del Manzano y Felipe Gonz¨¢lez como trileros. Por ah¨ª van los tiros ahora: poca gente y actuaciones simb¨®licas.
"Pero para el verano del 92, cuando est¨¦ en su m¨¢ximo auge lo de la capitalidad cultural, organizaremos una okupaci¨®n masiva de un edificio importante. Necesitar¨ªamos la infraestructura de instituciones fuertes, como sindicatos y partidos, para hacer algo de m¨¢s envergadura", dice Pedrero.
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