Objeto de discordia

S. C. Jos¨¦ Meli¨¢ Sinisterra, empresario valenciano, desconoc¨ªa probablemente que la empresa que fund¨® en el a?o 1947, Viajes Meli¨¢, iba a convertirse al cabo de los a?os en campo de batalla para dos capos de los negocios internacionales como son Fiorio Fiorini y Giancarlo Parretti.

Jos¨¦ Meli¨¢, hotelero, inmobiliario, hijo de empresarios, de la saga de los hombres de negocios surgidos al calor del franquismo (los Barreiro, Ban¨²s, Coca, Caprile ... ), manej¨® sus empresas (Viajes Meli¨¢, Hoteles Meli¨¢, International Hotels, Inmobiliarias Meli¨¢, Lavander¨ªas Meli¨¢ y Club Meli¨¢) al viejo estilo: las cuentas, a grosso modo, y los amigos, esenciales.

Por ello, cuando en la d¨¦cada de los setenta Meli¨¢ tuvo dificultades financieras, acudi¨® a sus amigos: los banqueros Coca. Los Coca entraron como socios mayoritarios en el grupo de empresas Meli¨¢ respetando la saga familar, sus cargos en los consejos y su buen nombre.

Posteriormente, el banco Coca fue absorbido por Banesto y Meli¨¢ estuvo diez a?os en la ¨®rbita del Espa?ol de Cr¨¦dito. Hasta que Parretti lleg¨® a Espa?a dispuesto a comprar todo lo comprable. Compr¨® sociedades cotizadas del Banco Exterior (Escala y Corporaci¨®n Mobiliaria); compr¨® Meli¨¢; puj¨® por la deuda de los Coca con Banesto; intent¨® hacerse con Galer¨ªas Preciados. Fue la apoteosis.

Plusval¨ªas jugosas

Parretti compr¨® Meli¨¢ a Banesto por 7.500 millones de pesetas. Posteriormente, vendi¨® la cadena de hoteles al Grupo Sol por 13.500 millones. El empresario, como era norma en sus actuaciones, consigui¨® una jugosa plusval¨ªa y se reserv¨® Viajes Meli¨¢, una agencia de viajes que, a pesar de que no existen datos completamente fiables, no gana dinero desde comienzos de los a?os ochenta.

Hoy, la empresa que form¨® parte de un grupo que lleg¨® a facturar 100. 000 millones de pesetas a trav¨¦s de 17 sociedades, atraviesa uno de sus peores momentos.

Debe alrededor de 5.000 millones de pesetas; las grandes compa?¨ªas de transportes como Renfe, Iberia y Trasmediterr¨¢nea no dejan que venda sus billetes, y est¨¢ pendiente de que se aclare qui¨¦n manda en la compa?¨ªa y, lo que es m¨¢s importante, de que alguien, de una vez, aporte algo m¨¢s que palabras.