Desidia de los ayuntamientos

Muchos ayuntamientos se resisten a ejercer las facultades que la ley les atribuye en materia de disciplina urban¨ªstica, control de vertidos y contaminaci¨®n del medio ambiente, se?ala el informe del Defensor del Pueblo, que refiere casos concretos de desidia por parte del Ayuntamiento de Madrid y alguno de sus alrededores -entre otros del resto del pa¨ªs- en la demolici¨®n de obras ilegales.Sobre la Administraci¨®n de Justicia, el Defensor da cuenta de varias quejas formuladas por ciudadanos de padre o madre desconocidos a los que se les obliga a inventarse nombres para cumplimentar tr¨¢mites ante el Registro Civil o el DNI. Gil-Robles pide en su informe que se suprima tal obligatoriedad.

En cuanto a la actuaci¨®n .de la propia justicia, advierte la imposibilidad de aplicar la disciplina a los jueces frente a sus propias faltas, dado el brev¨ªsimo plazo de prescripci¨®n. Es el caso de los errores cometidos por fiscales en la detenci¨®n de un ciudadano que denunci¨® la comisi¨®n de un delito o el de otro detenido debido a un error judicial. El Defensor denuncia el colapso de la jurisdicci¨®n contencioso-administrativa en los tribunales superiores de justicia de Castilla y Le¨®n -ubicado en Burgos-, Pa¨ªs Vasco, Galicia, Madrid y la Audiencia Nacional.

Las reclamaciones sobre Educaci¨®n se centran en el retraso en la tramitaci¨®n de asuntos (t¨ªtulos) y en la aplicaci¨®n de las normativas; las de Obras P¨²blicas, en las retribuciones pendientes por expropiaciones forzosas (4.300 millones pendientes a finales de 1991) y las presuntas irregularidades en el procedimiento, y las de Medio Ambiente, al impacto de grandes v¨ªas de comunicaci¨®n, ruidos de locales, vertidos y la protecci¨®n de las riberas del mar.

Sobre la prestaci¨®n del servicio militar, el Defensor considera positivo que las reclamaciones comiencen a presentarlas los propios soldados en lugar de sus familiares, y advierte que, aunque se ha avanzado, no se han erradicado a¨²n las novatadas y los tratos degradantes.