Rusia renegocia con el G-7 el pago de la deuda contra¨ªda por la URSS

Representantes del Gobierno de Rusia y del Grupo de los Siete (G-7) se reunir¨¢n ma?ana para negociar un replanteamiento global del pago de la deuda exterior contra¨ªda por la desaparecida Uni¨®n Sovi¨¦tica. Las autoridades econ¨®micas rusas se han mostrado incapaces de hacer frente a estas obligaciones, y del total de 10.000 millones de d¨®lares que deb¨ªan ser abonados este a?o, se prev¨¦ que s¨®lo ser¨¢n desembolsados una cuarta parte como m¨¢ximo.

Actualmente, Rusia y el resto de Estados ex sovi¨¦ticos tienen congelado el pago del principal de los pr¨¦stamos recibidos con anterioridad al 1 de enero de 1991. Ahora las autoridades rusas pretenden que ese tratamiento sea extendido a todos, los cr¨¦ditos percibidos por la URSS, es decir, los concedidos hasta el 8 de diciembre pasado, fecha en que los presidentes de Rusia, Ucrania y Bieolorrusia dieron por liquidada la Uni¨®n Sovi¨¦tica. La deuda era entonces de unos 70.000 millones d¨¦ d¨®lares.Para reprogramar las condiciones de la deuda externa, las autoridades econ¨®micas rusas insisten en que se ha de calcular con precisi¨®n las posibilidades reales que tiene Rusia de afrontar los pagos en- un momento de crisis profunda derivada tanto de la propia desaparici¨®n de la URSS como del tr¨¢nsito hacia la econom¨ªa de mercado. Se calcula que el d¨¦ficit comercial se situar¨¢ el pr¨®ximo a?o entre los 4.000 y los 5.000 millones de d¨®lares, cifra que pone en evidencia las dificultades que tendr¨¢ Rusia para detraer divisas y pagar. La Hacienda rusa, adem¨¢s, sigue sin ser capaz d¨¦ apoderarse de buena parte de las divisas que obtienen las empresas privadas y p¨²blicas por sus exportaciones, lo que le resta margen e maniobra.

Los deudores, por su parte, tienen que decidir sobre la posibilidad de establecer negociaciones separadas con el Gobierno ucranio, que sigue neg¨¢ndose sistem¨¢ticamente a que su pa¨ªs sea incluido en el paquete conjunto de las ex rep¨²blicas sovi¨¦ticas. Ucrania ha asumido el 16% de la deuda y, como compensaci¨®n, reclama a Rusia un porcentaje similar de los activos de la URSS fuera de sus fronteras.

El resto de rep¨²blicas de la Comunidad de Estados Independientes acepta el protagonismo de Rusia, aunque s¨®lo tres (Kirguizist¨¢n, Turkmenist¨¢n y Armenia) han aceptado renunciar a su parte de propiedad sovi¨¦tica en el exterior a cambio de, quitarse de encima su parte de deuda. Alemania, que soporta pr¨¢cticamente la mitad de la deuda sovi¨¦tica, es poco partidaria de hacer demasiadas concesiones.