Un juez investiga presuntas estafas y falsedades en Macosa y toma declaraci¨®n a sus ex gestores'

El juez Llu¨ªs Pascual Estivill est¨¢ llamando a declarar a los ex gestores de Macosa -Eduardo Santos y Juan Llopart, entre otros-e investiga presuntas estafas y falsedades en la empresa, a partir de una querella presentada por accionistas minoritarios. La instrucci¨®n investiga supuestas irregularidades en la venta del principal activo de Macosa -Diagonal Mar, valorado en 30.000 millones-, un gran complejo inmobiliario situado en Barcelona en el que Kepro, el actual propietario, proyecta construir 5.000 viviendas y un parque de oficinas.

Esta venta y la condonaci¨®n de 1.500 millones de pesetas correspondientes a los intereses de un pr¨¦stamo del Banco Central, a Macosa son las principales l¨ªneas de investigaci¨®n judicial. La intervenci¨®n del juez obedece a la denuncia presentada por un grupo de peque?os accionistas representados por el abogado Francesc Jofresa.En el sumario abierto se afirma que la venta de Diagonal Mar a Kepro se realiz¨® muy por debajo de su valor real y que la empresa no ingres¨® la totalidad' de la cifra pagada por el comprador. Kepro abon¨® 12.000 millones de pesetas y de esta cantidad, 700 millones se entregaron a trav¨¦s de una sociedad interpuesta, seg¨²n refleja el sumario. El actual valor de estos terrenos supera los 30.000 millones, seg¨²n una auditor¨ªa encargada por Macosa.

. En la venta participaron Eduardo Santos y F. Albi?ana, a la saz¨®n presidente y consejero delegado de Macosa respectivamente, seg¨²n declar¨® Juan Manuel Rosillo, consejero delegado de Kepro, ante el juez instructor el pasado 21 de octubre. El magistrado ha tomado declaraci¨®n en fechas recientes a los ex gestores de Macosa, a los gestores de Arco, SA -denominaci¨®n actual de Macosa- y al consejero delegado de Kepro.

Las diligencias judiciales abiertas tienen su origen en la acusaci¨®n de los accionistas minoritarios contra los gestores de Macosa por la revalorizaci¨®n supuestamente irregular del activo de la empresa en el balance de 1988.

Aquella revalorizaci¨®n -efectuada sobre los terrenos de Diagonal Mar- permiti¨® a Macosa presentar un beneficio de 7.500 millones de pesetas. Esta revalorizaci¨®n contable del terreno levant¨® expectativas al accionariado sobre el patrimonio de la empresa, que despu¨¦s, se frustraron al advertir el precio real de la venta. La investigaci¨®n judicial se centra ahora en la venta de Diagonal Mar y la condonaci¨®n de los intereses de un pr¨¦stamo bancario, "como supuestos delitos conexos con el que provoc¨® la demanda", se?alan medios judiciales.

Eduardo Santos ha declinado efectuar personalmente comentarios a este diario, aunque espera que la instrucci¨®n demuestre que actu¨® de "conformidad con la ley y en beneficio de la empresa que gestionaba", se?ala Pedro Nueno, ex consejero de Macosa.

La entrada de Cofir

Macosa ha pasado recientemente a denominarse Corporaci¨®n Arco, SA. Desde 1988, el capital de Corporaci¨®n Arco ha tenido una lenta penetraci¨®n de Cofir (controlada por el financiero italiano Carlo de Benedetti y por el Banco Zaragozano) hasta desembocar en la fusi¨®n Cofir-Arco, aprobada por las juntas de accionistas de ambas compa?¨ªas el pasado mes de julio.

Recientemente el juez tom¨® tambi¨¦n declaraci¨®n a Jos¨¦ Ram¨®n ?lvarez Rendueles (presidente del Banco Zaragozano), Juan Llopart (ex consejero delegado de Cofir), Pedro Fontana (ex consejero de Macosa), vinculados a Cofir y que ocuparon cargos en el consejo de Corporaci¨®n Arco en las fechas en que se se hizo la citada revalorizaci¨®n. Llopart manifest¨® a este diario que las revalorizaciones de 1988 se efectuaron de "conformidad con la Ley de Sociedades An¨®nimas y el reglamento de auditor¨ªa".

Los directivos de Macosa han explicado al magistrado por qu¨¦ el Banco Central condon¨® a Macosa una deuda de 1.500 millones correspondiente a los intereses de un pr¨¦stamo cuyo capital hab¨ªa sido amortizado. Ayer mismo prest¨® declaraci¨®n ante el juez Luis Bl¨¢zquez, consejero director general del Banco Central Hispano. Bl¨¢zquez argument¨® posteriormente ante los periodistas que la condonaci¨®n obedeci¨® a un pacto de la entidad con el Ministerio de Industria dentro del Plan de Reconversi¨®n Sider¨²rgica para ayudar a este sector.

Esta condonaci¨®n se efectu¨® cuando Eduardo Santos estaba todav¨ªa en la empresa. Posteriormente, cuando los directivos de Cofir -Llopart y Pedro Fontana- pasaron a ocupar los puestos en el consejo de Macosa corrigieron el hecho de que la condonaci¨®n no figurara en el balance de la empresa y se reflej¨® como beneficio at¨ªpico.