EE UU pide ayuda a Europa para acabar con la crisis mundial y cr¨ªtica el ego¨ªsmo de Jap¨®n

Lloyd Bentsen, secretario del Tesoro norteamericano, critic¨® ayer con virulencia el proteccionismo comercial de Jap¨®n y pidi¨® la colaboraci¨®n de todas las econom¨ªas avanzadas, en concreto de Europa, para salir de la crisis. En la reuni¨®n de ministros econ¨®micos de los pa¨ªses de la OCDE (Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico), Bentsen destac¨® que Estados Unidos no puede ser la ¨²nica locomotora para salir de la crisis. Los ministros reunidos en Par¨ªs reconocieron que el desempleo se ha convertido -muy por delante de la inflaci¨®n- en el principal problema de las econom¨ªas occidentales.

"El mundo no puede depender del crecimiento de Estados Unidos para salir de la recesi¨®n", afirm¨® Lloyd Bentsen ante sus hom¨®logos en el seno de la OCDE. El secretario del Tesoro norteamericano invit¨® a Jap¨®n y a Europa a contribuir en el relanzamiento econ¨®mico general. A?adi¨® que los "esfuerzos [estadounidensesl para reducir los d¨¦ficits p¨²blico y comercial s¨®lo tendr¨¢n ¨¦xito con una mejora del ritmo de crecimiento del resto del mundo".Bentsen critic¨® con dureza la pol¨ªtica comercial de Jap¨®n. A su juicio, "los excedentes comerciales japoneses se han convertido en un problema global y un freno para el crecimiento econ¨®mico mundial". El motivo es que "siguen creciendo", por lo que "son un serio obst¨¢culo al crecimiento". El secretario del Tesoro afirm¨® que la situaci¨®n tiene que cambiar; Jap¨®n tiene los medios y la necesidad de reforzar su demanda interior y reducir sus excedentes", pues ello le permitir¨ªa aumentar sus previsiones de crecimiento, que este a?o se sit¨²an por debajo del 1%.

Degradaci¨®n laboral

El paro, y no la inflaci¨®n, como era habitual en las cumbres de la OCDE, estuvo en el centro de todos los debates parisienses, que hoy culminar¨¢n con la publicaci¨®n de un comunicado. A finales de este a?o, el desempleo puede afectar a 36 millones de personas en el conjunto de pa¨ªses que integran la OCDE, una cifra superior al m¨¢ximo hist¨®rico de 1983: 30 millones. Seg¨²n el organismo internacional, "la degradaci¨®n del mercado laboral obedece m¨¢s a motivos estructurales que coyunturales". "El paro parece incrementarse inexorablemente y la mitad de los parados est¨¢n sin trabajo desde hace doce meses o m¨¢s", concluye el alarmante informe.

La situaci¨®n es m¨¢s dram¨¢tica en el Viejo Continente que en Estados Unidos y Asia. En 1984 puede haber en Europa occidental 23 millones de parados, es decir, el 11,4% de la poblaci¨®n activa.

Como soluci¨®n a este problema, la OCDE sugiere una pol¨ªtica macroecon¨®mica concertada, una pol¨ªtica estructural que fomente la mano de obra cualificada y un incremento de la solidaridad social.

Lloyd Bentsen se refiri¨® en su intervenci¨®n a la sombr¨ªa situaci¨®n econ¨®mica europea. La recuperaci¨®n en la mitad occidental del Viejo Continente es, dijo, "incierta" y por el momento lo ¨²nico seguro es que la mayor¨ªa de los pa¨ªses est¨¢n en recesi¨®n y que el desempleo alcanza cifras alarmantes. Como soluci¨®n, el representante norteamericano invit¨® a los europeos a "aumentar la flexibilidad de sus mercados de trabajo".

En lo relativo a pol¨ªticas macroecon¨®micas, los ministros comprobaron que el rigor monetario ha funcionado, como lo prueba el bajo nivel de inflaci¨®n en la mayor¨ªa de pa¨ªses. Ello permitir¨¢ continuar con el movimiento a la baja de los tipos de inter¨¦s. Los norteamericanos, que ya tienen tipos muy bajos, ped¨ªan en Par¨ªs a los europeos una bajada sustancial de los suyos. Estos aceptaron la idea, pero subrayaron que el descenso no debe poner en peligro las victorias conseguidas frente a la inflaci¨®n.

Bentsen destac¨® que Europa puede avanzar m¨¢s r¨¢pido en la reducci¨®n de tipos de inter¨¦s para relanzar el crecimiento econ¨®mico. "En una situaci¨®n de recesi¨®n, como la actual, y con presiones cada vez menores sobre los salarios y los precios, unas reducciones [de intereses] sustanciales son perfectamente prudentes", afirm¨®. La ministra de Econom¨ªa danesa apoyo esta posici¨®n al asegurar que Ios tipos de inter¨¦s reales son todav¨ªa demasiado elevados".

Los ministros reunidos en Par¨ªs comprobaron, a cambio, que "el margen de maniobra es pr¨¢cticamente nulo en pol¨ªtica fiscal".