A la quinta se rompi¨® la red

Hace dos a?os Javier de la Rosa explic¨® ante un nutrido y embelesado auditorio de estudiantes de Empresariales que se sent¨ªa feliz haciendo de funambulista y pase¨¢ndose al borde del abismo, seguro de que en caso de ca¨ªda siempre habr¨ªa una red. Hasta el ¨²ltimo momento parec¨ªa convencido de que conseguir¨ªa paralizar la querella de Kuwait Investment Office (KIO) contra ¨¦l, cuatro veces frenada por el juez de delitos monetarios, Miguel Moreiras, que no la admiti¨® a tr¨¢mite las dos veces que se present¨® ni las otras dos que se recurri¨® esa negativa. Pero, a la quinta, De la Rosa corre el peligro extremo de que la red se rompa definitivamente.De la Rosa, responsable de las inversiones kuwait¨ªes en Espa?a, ha intentado con frenes¨ª durante los ¨²ltimos d¨ªas recabar viejos y nuevos apoyos, acudiendo, incluso, a personalidades con acceso a importantes autoridades del pa¨ªs.

Durante los primeros episodios de la crisis con KIO, De la Rosa y sus abogados explicaron a quien quisiera o¨ªrles que gran parte del dinero desaparecido sin justificaci¨®n aparente hab¨ªa recalado en las cuentas corrientes de personas relacionadas con partidos pol¨ªticos y sindicatos. Al fin y al cabo, Espa?a hab¨ªa consentido que su territorio fuera una base para las operaciones de liberaci¨®n de Kuwait durante la Guerra del Golfo. De la Rosa insinu¨® que esta colaboraci¨®n no fue desinteresada y que remover los hechos no ser¨ªa del agrado de las autoridades espa?olas.

Los nuevos gestores de KIO no aceptaron esa versi¨®n y sus abogados e investigadores se preguntaron qui¨¦nes eran los verdaderos propietarios de una tupida red de sociedades sin actividad que recib¨ªan cuantiosas sumas de dinero procedentes de KIO y de Torras.

Estas sociedades estaban situadas en para¨ªsos fiscales protegidas por legislaciones que garantizaban que sus titulares permanecer¨ªan en secreto. La querella presentada en Espa?a ya hac¨ªa referencia a algunas de esas sociedades que siempre recib¨ªan cuantiosas comisiones o cr¨¦ditos multimillonarios.

En Londres, donde KIO present¨® una demanda contra 21 antiguos ejecutivos, incluido el ex presidente Mohammed Al Sabaj y De la Rosa, la High Court s¨ª se ha movido. Primero requiri¨® a un banco brit¨¢nico el nombre de los titulares de diversas cuentas en las que KIO hab¨ªa ingresado dinero. Cuando tuvo informaci¨®n suficiente orden¨® el embargo de bienes de Al Sabaj por 500 millones de d¨®lares. En ese momento comenz¨® a romperse la red.