Los gitanos de M¨®stoles cambiar¨¢n sus chabolas por pisos de alquiler

Las 56 familias gitanas asentadas en el barrio de El Soto de M¨®stoles (199.000 habitantes) ser¨¢n realojadas en pisos de altura, de los que tendr¨¢n que pagar un alquiler que se ajuste a sus recursos econ¨®micos. As¨ª lo han acordado el Ayuntamiento de la localidad y la Consejer¨ªa de Integraci¨®n Social de la Comunidad en la ¨²ltima reuni¨®n que sus responsables han mantenido con el portavoz de las 300 personas de etnia gitana, Juan Carlos Rois.

Con esta medida, ambas administraciones dejan de lanzarse la pelota del realojo de este n¨²cleo chabolista que lleva 15 a?os en el municipio y ha sido desalojado en dos ocasiones. En El Soto, al que se trasladaron hace ya un a?o las 56 familias, carecen de un acceso para el paso de camiones de basura y se abastecen de agua a trav¨¦s de cisternas transportadas por el Ayuntamiento. Cansados de esta situaci¨®n, el colectivo gitano se ha manifestado en varias ocasiones delante del Ayuntamiento para reivindicar el cumplimiento de un acuerdo de junio pasado por el que se ced¨ªa suelo municipal para que la Comunidad financiase el realojo en viviendas de autoconstrucci¨®n.Ahora el nuevo compromiso de ofertar pisos en alquiler por toda la regi¨®n ha logrado frenar las movilizaciones, aunque no deja de ser una soluci¨®n complicada, a juicio del alcalde, Jos¨¦ Luis Gallego, porque seg¨²n ¨¦l "la mensualidad no debe superar las 30.000 pesetas y deben evitarse posibles guetos".

Este plan comenzar¨¢ a aplicarse de inmediato con quienes ya puedan pagar el alquiler. El resto deber¨¢ esperar y conformarse con los parches que las administraciones colocan para mejorar su calidad de vida. El ¨²ltimo ha sido de cinco millones de pesetas, aportados por la Consejer¨ªa de Integraci¨®n Social para la construcci¨®n de un acceso pavimentado y la tra¨ªda de agua desde el campo municipal de f¨²tbol, junto al que se sit¨²a el asentamiento, para la instalaci¨®n de fuentes y lavaderos de ropa. Sin embargo, la soluci¨®n al realojo de los 300 gitanos no puede demorarse mucho. De hecho hay un proceso judicial en marcha contra 28 de estas familias que sobrepasaron los l¨ªmites del terreno propiedad de la instituci¨®n Escuelas Cat¨®licas donde actualmente permanecen para buscar mayor expansi¨®n en una parcela colindante cuyo due?o es un vecino de Alcorc¨®n que curs¨® la correspondiente denuncia por la v¨ªa penal.

Como consecuencia de este problema, parte de los chabolistas han declarado ante el titular del juzgado n¨²mero 7 de la localidad que no se dieron cuenta de que ese suelo ya no pertenec¨ªa a Escuelas Cat¨®licas.

A principios de febrero se intensificaron las movilizaciones de los gitanos y las cr¨ªticas del Ayuntamiento a la Comunidad a la que acusaba de no colaborar en la puesta en marcha de los acuerdos alcanzados. Con la reciente soluci¨®n adoptada, las partes implicadas pretenden que no se produzcan agravios comparativos con otros grupos de poblaci¨®n tambi¨¦n necesitados de vivienda.