Por la paz
Solo
Texto de Aintza Uriarte, gui¨®n de Carlos Baiges y Aintza Uriarte; Int¨¦rpretes: Carlos Baiges, Aintza Uriarte, Arantxa Iurre, Roc¨ªo Pindado, Javier Li?era, Juan Manuel Rodr¨ªguez, Susana Sachetti. Iluminaci¨®n y sonido: Txema Ibarguen; vestuario: Almudena Aguirre. Escenograf¨ªa: Simulacro Teatro. Direcci¨®n: Aintza Uriarte y Carlos Baiges.
Es una compa?¨ªa muy joven. Se llama Simulacro Teatro, es de Guetxo, y grita contra la guerra y la militarizaci¨®n del hombre. Su pieza es una cantata, un oratorio laico: el protagonista es el hombre solo -el actor Carlos Baiges- y un coro de simulantes, o manipuladores -dicen ellos-, que representan la vida del sistema, el amor, el pueblo. la muerte, la guerra, la orden, el mando. Las presiones que le llevan a la guerra y a matar: cuando mata a un hombre, siente como si se hubiese matado a s¨ª mismo. La soledad aparece como la elecci¨®n posible. Esta excelente intenci¨®n est¨¢ reflejada en un texto l¨ªrico, no f¨¢cil a veces de comprender por todo el p¨²blico, y por unos movimientos esc¨¦nicos hechos con andamiajes de mundus que simulan las distintas situaciones: muchas veces, con excelentes resultados. El relato es demasiado simple: es el comentario a ese relato, su doctrina o filosof¨ªa, o su pol¨ªtica de negaci¨®n a las armas, lo que constituye su principal energ¨ªa.En la misma sala Cuarta Pared, y en horario alternativo: Los zapatos rojos, de Tiziar¨ªa Lucatt¨ª, dirigida por Manuel Garrido: el Teatro Para¨ªso presenta un di¨¢logo entre dos ni?os del Brasil, chico y chica: quiz¨¢ demasiado crecidos los actores j¨®venes para dar todo el dramatismo de la situaci¨®n. Una voz fuera de escena da los datos del gran crimen de Estado: los escuadrones de la muerte, que no son generalmente m¨¢s que funcionarios de la polic¨ªa, pagados por los comerciantes para que despejen sus tiendas y sus escaparates. Simplemente, para que maten a estos abandonados, dedicados al robo y a la prostituci¨®n infantil, y que son al fin personajes tambi¨¦n de la violencia. Es una intenci¨®n pol¨ªtica, o social -con el mejor valor de esas palabras-de presentar una situaci¨®n real y repetida. En alguna sesi¨®n, un coloquio con el p¨²blico plantea, al final, la realidad del suceso y los datos generales de este desastre en el que Brasil no es el ¨²nico lugar del mundo duro y repugnante del fin de siglo.
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