El PP quiere supimir el 72% de los 8.458 altos cargos y directivos de la Administraci¨®n central

, El Partido Popular tiene contados los 6.110 altos cargos o puestos de confianza y alta direcci¨®n -hay 8.458, seg¨²n el PP- que, en su opini¨®n, deben ser eliminados en la Administraci¨®n central. El ex diputado popular Manuel N¨²?ez afirma que su partido, si llega al poder, tambi¨¦n har¨¢ en dos a?os un an¨¢lisis de los lugares en los que sobran o faltan funcionarios; y que de ese estudio se derivar¨¢n una "severa pol¨ªtica de reordenaci¨®n de la Administraci¨®n" y "una aut¨¦ntica y necesaria reasignaci¨®n de efectivos". Aunque N¨²?ez prefiere no concretar la cifra de funcionarios afectados, se deduce de su an¨¢lisis que decenas de miles de funcionarios tendr¨¢n que cambiar de puesto o destino.

Los c¨¢lculos del PP indican que la actual c¨²pula de la Administraci¨®n central del Estado est¨¢ integrada por 8.458 personas -el Gobierno discrepa y rebaja la cifra a 7.819-, pero que, de acuerdo con sus planes, debe quedar reducida a 2.348 personas. Seg¨²n el actual Gobierno, el PP no s¨®lo confunde los criterios a la hora de determinar a qui¨¦n debe considerarse alto cargo, sino que adem¨¢s es "imposible" que ni los populares ni nadie puedan eliminar tantos puestos o niveles.As¨ª, el secretario de Estado para la Administraci¨®n p¨²blica, Eugenio Burriel, destaca que entre los cargos directivos contabilizados por el PP se incluyen 4.180 funcionarios de alto nivel que han llegado a ¨¦l por concurso de m¨¦ritos, por lo que legalmente no es posible rebajarles de categor¨ªa. Se trata de abogados del Estado, diplom¨¢ticos, interventores, ingenieros agr¨®nomos... N¨²?ez responde que no es as¨ª porque el n¨²mero de esos titulados apenas ha crecido desde 1982, y agrega que ¨¦l se refiere a los directivos que est¨¢n en unidades administrativas u ¨®rganos p¨²blicos que deben ser suprimidos.

Para el Ejecutivo, s¨®lo debe considerarse alto cargo como tal a los puestos existentes a partir de director general, incluido este nivel. Tambi¨¦n en este cap¨ªtulo existen discrepancias, probablemente originadas en el hecho de que el PP incluye en su contabilidad los puestos asimilados a tales categor¨ªas, incluidos, por ejemplo, directivos de organismos p¨²blicos o entes aut¨®nomos.

Pese a tales contradicciones, el apartado dedicado a la Administraci¨®n p¨²blica es, probablemente, uno de los m¨¢s elaborados por el PP. Aunque la correspondiente parte del programa recoge s¨®lo algunos principios generales, el partido de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar dispone de documentos -de uso muy restringido- en los que se detalla qu¨¦ estructura debe tener cada ministerio, uno a uno, as¨ª como los altos cargos que habr¨¢ en cada uno de ellos si gobierna el PP.

De este modo, por ejemplo, un Ministerio de Econom¨ªa del PP tendr¨ªa dos puestos con nivel de subsecretario o secretario general y 20 directores generales -ahora hay el doble en ambos casos-; y un Ministerio de Obras Publicas, aunque con menos competencias, como la de Medio Ambiente, tendr¨ªa s¨®lo 12 direcciones generales -ahora son el triple-

Igualmente, los populares han elaborado un largo listado de organismos p¨²blicos y entes aut¨®nomos que deben suprimirse o fusionarse para lograr lo que el PP define como una Administraci¨®n "¨¢gil, eficaz y simplificada".

De llevarse hasta sus ¨²ltimos t¨¦rminos, el plan del PP originar¨¢ fuertes reacciones en el colectivo de funcionarios. De un lado, recibir¨¢n con agrado el proyecto de ley del Gobierno del PP, seg¨²n el cual los directores generales ser¨¢n funcionarios de carrera (la medida beneficiar¨¢ a varios centenares de personas). Lo que no recibir¨¢n con agrado es la materializaci¨®n del plan para "reasignar" puestos y destinos a miles y miles de funcionarios.

El programa oficial distribuido por el PP no hace referencias concretas al respecto, aunque s¨ª incluye objetivos gen¨¦ricos como el de lograr "una Administraci¨®n simplificada y ajustada en tama?o a la nueva organizaci¨®n del Estado", y medidas como "la reducci¨®n del n¨²mero de los llamados entes p¨²blicos" o "la supresi¨®n de los organismos p¨²blicos que hayan cumplido los objetivos que motivaron su creaci¨®n, aquellos que resulten ineficaces y aquellos cuyas competencias han sido transferidas a las comunidades aut¨®nomas".

En el programa original, despu¨¦s resumido, s¨ª se hac¨ªa referencia a la "severa pol¨ªtica de reordenaci¨®n de los efectivos humanos de la Administraci¨®n" y a "una aut¨¦ntica y necesaria reasignaci¨®n de efectivos". Si accede al Gobierno, el PP elaborar¨¢ un Plan General de Ordenaci¨®n de la Estructura Administrativa para, en dos a?os, conocer las zonas en las que sobran o faltan funcionarios.

A partir de ah¨ª, explica Manuel N¨²?ez, y dentro de la primera legislatura, se efectuar¨¢ "una amplia reasignaci¨®n de recursos humanos". N¨²?ez agrega que habr¨¢ compensaciones econ¨®micas para quienes resulten gravemente afectados.

El PP, adem¨¢s, asegura que mientras no est¨¦ elaborado ese plan sobre la estructura administrativa la oferta de empleo p¨²blico quedar¨¢ "congelada". Es decir, que si el PP llega al Gobierno, no se crear¨¢ empleo p¨²blico al menos hasta dentro de dos a?os.