El fiscal imputa a Gabriel Ca?ellas por presunto cohecho en el 'caso S¨®ller'

El fiscal Juan Carrau del Tribunal Superior de Justicia de Baleares imput¨® ayer al ex presidente del Gobierno balear y del PP entre 1983 y 1995, Gabriel Ca?ellas, una presunta responsabilidad penal, relacionada con un delito de cohecho o prevaricaci¨®n en la concesi¨®n del t¨²nel de S¨®ller. Por este asunto, el conocido caso S¨®ller, Jose Mar¨ªa Aznar forz¨® la dimisi¨®n de Ca?ellas de sus cargos en julio de 1995.

Ca?ellas, que sigue manejando la vida del gobierno y del PP balear ser¨¢ citado a declarar en calidad de imputado por el juez Juan L¨®pez Gay¨¢ por el posible cobro de comisiones ilegales por la adjudicaci¨®n de la citada obra.Carrau solicit¨® ayer por escrito que tambi¨¦n se cite como testigo al consejero en funciones, Jos¨¦ Antonio Berastain, que fue mano derecha de Ca?ellas en el Gobierno balear y como secretario general del PP hasta julio de 1995. .

El caso S¨®ller estall¨® en junio de 1995 cuando siete cargos del PP, todos aforados por condici¨®n de diputados o consejeros regionales, aparecieron relacionados en un informe pericial de la polic¨ªa y Hacienda como presuntos perceptores de comisiones o apoderados de cuentas en las que se distribuyeron 50 millones de pesetas. El dinero fue entregado por el concesionario de la mayor obra p¨²blica de Baleares, el t¨²nel de S¨®ller.

Por otra parte, el golpe de mano contra la presidencia del Gobierno, balear, ejecutado el pasado martes por el ex mandatario Gabriel Ca?ellas, al frente de su grupo de parlamentarios adictos y arropado por las diferentes sectores del PP, se descanden¨® por razones econ¨®micas. La rebeli¨®n naci¨® para evitar que el destituido Crist¨°fol Soler colocara en su nuevo gabinete a una persona de su confianza en Turismo, la independiente Ina Mart¨ªnez, que no tiene carn¨¦ del PP, seg¨²n han reconocido diferentes dirigentes del partido que han intervenido en la la operacion.

Mart¨ªnez iba a reemplazar al protegido pol¨ªtico de Ca?ellas el consejero Juan Flaquer, abogado e hijo de un antiguo alto ejecutivo de la Banca March. El plan de ordenaci¨®n de la oferta tur¨ªstica, que alberga las claves del dise?o de los l¨ªmites del negocio hotelero, inmobiliario y urban¨ªstico, se convirti¨® en el caballo de batalla. Al conocer la maniobra dise?ada contra su persona y la posterior ca¨ªda de Soler, Mart¨ªnez manifest¨® que "me averg¨¹enzo, de pertenecer a esta comunidad ".

Los pocos pol¨ªticos que apoyaron hasta el final a Soler no niegan el operativo que Ca?ellas despleg¨® y sus intentos fallidos de mediaci¨®n. "Se fren¨® primero en el PP el estallido del tema del catal¨¢n", narr¨® un testigo de la maniobra. "Tampoco hubo rebeli¨®n interna contra la avanzada normativa de incompatibilidades; se evit¨® la respuesta del grupo del PP a las directrices de ordenaci¨®n del terrritorio pero este nombramiento de una consejera que es como si fuera del PSM (nacionalistas y socialistas de Mallorca) no se puede tolerar".

El ultim¨¢tum tur¨ªstico de los fieles del destituido por Aznar fue la chispa que encendi¨® la revuelta que se envolv¨ªa en un c¨²mulo de desacuerdos y discrepancias entre sectores influyentes del partido y la l¨ªnea centrista y modernizadora de Crist¨®fol Soler."Crist¨®fol Soler contaba con el apoyo de la opini¨®n p¨²blicada pero no atend¨ªa la opini¨®n interna. Hac¨ªa pol¨ªtica de laboratorio. No crey¨® que el grupo parlamentario. alentado por Ca?ellas y sus antiguos enemigos se atreviera a derrocarle mientras Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar iniciaba sus 100 d¨ªas de Gobierno en Espa?a" agreg¨® la misma fuente del PP, que reclam¨® no ser identificada.

El mensaje que se traslad¨® a Soler desde el n¨²cleo de rebeldes fue determinante: No se pueden tocar determinados consejeros antiguos fieles a Ca?ellas.