La frontera de la anorexia se adelanta y ataca ya a ni?os de nueve a trece a?os
Psiquiatras espa?oles alertan sobre el aumento de la obsesi¨®n infantil por adelgazar
La anorexia devora en edades cada vez m¨¢s tempranas, seg¨²n datos de los hospitales Cl¨ªnico de Barcelona y del Ni?o Jes¨²s de Madrid. Los psiquiatras espa?oles se han topado con dos fen¨®menos nuevos: ni?os de 9 a?os cuya tozudez en dejar de comer les lleva al hospital y un estudio del equipo de psiquiatr¨ªa del Cl¨ªnico de Barcelona, que indica que un 12 ¨® 13% de peque?os de esa edad ya han iniciado alg¨²n tipo de r¨¦gimen para adelgazar. "No repugna" relacionar ambos fen¨®menos, seg¨²n los expertos, porque el mayor factor de riesgo son las dietas para adelgazar.
El mundo occidental ya perdi¨® la inocencia respecto al descenso de edad en la anorexia cuando el pasado a?o tres hospitales londinenses comunicaron que ten¨ªan hospitalizadas ni?as de 6 y 7 a?os enganchadas a la anorexia. Este trastorno, provocado por una decisi¨®n voluntaria de no comer, est¨¢ dejando de ser una enfermedad propia de la pubertad."En Espa?a, esta tendencia, junto con el incremento notable de trastornos alimentarios, que incluye tambi¨¦n la bulimia -provocarse el v¨®mito- es alarmante", afirma Josep Toro, jefe del servicio de psiquiatr¨ªa infantil y juvenil del hospital Cl¨ªnico de Barcelona. El estudio de poblaci¨®n general llevado a cabo en esta ciudad ha arrojado que un 12 ¨® 13% de los ni?os de 9 a?os, preocupados por su silueta, se ponen a dieta. Y el equipo del Cl¨ªnico ha diagnosticado los primeros casos de anorexia a esa misma edad.
Los ¨²ltimos datos de la unidad de anorexia del hospital Ni?o Jes¨²s de Madrid apuntan en la misma direcci¨®n. Este a?o, de un promedio de 400 pacientes, 25 son casos de anorexia prepuberal, es decir, de entre 9 y 13 a?os, y demuestra que ser var¨®n ha dejado de ser un seguro contra la enfermedad: 5 casos son ni?os. La proporci¨®n de varones es menor en los adolescentes -un 10%-, mientras que en la anorexia prepuberal aumenta esa proporci¨®n -3 ni?os por cada 7 ni?as-.
Gonzalo Morande, jefe de la unidad de anorexia del Ni?o Jes¨²s, subraya que el l¨ªmite de la edad de este trastorno se ha quebrado. "Pens¨¢bamos que de la edad del desarrollo para abajo ya no nos ¨ªbamos a encontrar con anorexias y esto nos ha cambiado". La preocupaci¨®n por el cuerpo se ha extendido a las capas infantiles. Hace unos a?os, seg¨²n su an¨¢lisis, la cara era la principal preocupaci¨®n de las ni?as. Para las adolescentes, la preocupaci¨®n se situaba de cintura para abajo. Ahora los moldes se han roto. "Ni?as de 5 a?os en adelante aparecen preocupadas por sus nalgas".
Toro se pregunta qu¨¦ hacen las familias. Le resulta dif¨ªcil imaginar que ponerse a r¨¦gimen "sea una iniciativa de la ni?a". Su hip¨®tesis es que o bien es una decisi¨®n de la madre o, si no, se mantiene tolerante hacia el hijo que quiere adelgazar.
Segunda generaci¨®n
Otra novedad es que est¨¢n apareciendo las primeras generaciones de hijas anor¨¦xicas de madres que sufrieron la enfermedad, pero, aunque el efecto mim¨¦timo funciona en las gemelas, no es una enfermedad hereditaria.Para activar este trastorno s¨®lo es necesario, seg¨²n Toro, "la voluntad de perder peso". Pero a esta enfermedad le acompa?a una amalgama de factores culturales, est¨¦ticos, biol¨®gicos, familiares, psicol¨®gicos y sociol¨®gicos. Ataca principalmente al sexo femenino y en la pubertad y se ceba en atletas, gimnastas y bailarinas. Socialmente no perdona y ya alcanza por igual a todas las clases sociales. La alarma se enciende cuando se dan conjuntamente tres circunstancias: p¨¦rdida de peso, cambios en el estado de ¨¢nimo y tendencia al aislamiento.
Los medios de comunicaci¨®n, como veh¨ªculo de modelos a imitar, y la publicidad son las bestias negras de los psiquiatras infantiles. "Los valores de las personas se basan cada vez m¨¢s en aspectos f¨ªsicos y menos en pautas de comportamiento y por ese patr¨®n f¨ªsico se juzgan a s¨ª mismos", dice Toro. "Al ni?o" contin¨²a, "le llegan los patrones vigentes primero de sus padres y luego de los medios de comunicaci¨®n, y, cada vez m¨¢s le llegan a trav¨¦s del propio grupo de edad".
Este especialista, que ha observado c¨®mo en los colegios ni?os de 7 a?os tienen como objeto de conversaci¨®n la delgadez, considera que el medio escolar deber¨ªa prestar atenci¨®n a este problema que empieza a ser calificado como de "epidemia".
Los ni?os interiorizan el modelo est¨¦tico vigente alrededor de los 7 a?os y en esta edad ya rechazan al ni?o obeso. Explorar en el porqu¨¦ de esta "ansiedad" provocada por el propio cuerpo es hacia donde ahora se encamina la investigaci¨®n. "No todo el mundo puede ser anor¨¦xico", dice Morande. Dos l¨ªneas de investigaci¨®n centran el inter¨¦s de los psiquiatras: la relaci¨®n entre cuadros previos de depresi¨®n, que despu¨¦s cuajan en un trastorno alimentario y profundizar en los factores de protecci¨®n.
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