?La EGB con otro nombre?

A algunos centros no han llegado las olas positivas de la reforma en la primaria. Antonio P¨¦rez Morales, maestro en el colegio p¨²blico Mariana Pineda, en el barrio de Fuenlabrada, al sur de Madrid y el que mayor ¨ªndice de natalidad ha tenido de la Uni¨®n Europea hasta los ¨²ltimos datos disponibles, confiesa que la falta de medios "hace que se incumpla la aplicaci¨®n de la reforma. Sigue siendo la EGB con otro nombre", asegura con pesar. "El ingl¨¦s y la m¨²sica", a?ade, "se imparten pero no estamos cumpliendo con la educaci¨®n f¨ªsica, por ejemplo".

P¨¦rez Morales afirma: "No se nota que hay reforma en los centros. Lo veo todo muy parecido a lo anterior y cuando los profesores son de mayor edad, todav¨ªa m¨¢s dif¨ªcil aplicar el cambio

Sin embargo, los datos del anterior equipo ministerial afirmaban que la zona sur de Madrid era una de las que mejor estaban llevando a cabo la reforma. "Seguimos teniendo en los centros a los ni?os de l' de la ESO y vivimos serios problemas de medios y de disciplina", comenta el maestro. "Nos cuesta acoplar los horarios a los profesores porque hay m¨¢s horas lectivas en la ESO. No podemos ofrecer optativas en la ESO, faltan laboratorios. Viv¨ª el cambio de la primaria a la EGB y ah¨ª s¨ª not¨¦ la diferencia. Se rompi¨® con cosas, pero ahora no se ha roto con nada".

Una parte de los colegios concertados ya estaban preparados para asumir los cambios. "Trabaj¨¢bamos en equipo desde hac¨ªa tiempo", cuenta Pedro Silveira, en 4? de primaria del Santa Cristina de Madrid, concertado de la Fundaci¨®n del Hogar del Empleado. Silveira reconoce que no tienen integraci¨®n racial "los ni?os gitanos no piden entrar aqu¨ª, tienden a ir a los p¨²blicos", explica, no sin antes recordar que el Ministerio les debe profesores especialistas.