Pasados de moda
No le sorprende a Manuel V¨¢zquez Montalb¨¢n que las teor¨ªas de Marta Harnecker, Rosa Luxemburgo y otros te¨®ricos del comunismo se encuentren con cuentagotas en las librer¨ªas espa?olas. Tampoco le parece nada raro que una obra suya sobre Rafael Rib¨® y el car¨¢cter social del PSUC se venda a 395 pesetas en los saldos de unos grandes almacenes, a menor precio que el libro de Naomi Cambell en el que la modelo cuenta sus experiencias en las pasarelas. "El comunismo se ha pasado de moda y el pensamiento socialista no est¨¢ en primera l¨ªnea de lo que el p¨²blico quiere leer", dice el creador de Carvalho."Los libros que ilustraron una ¨¦poca han dado paso a la escuela neoliberal blanda, que es lo que se lleva ahora", a?ade V¨¢zquez Montalb¨¢n, que espera que en pr¨®ximas d¨¦cadas se produzca un replanteamiento del pensamiento socialista.
Tumba de ilusiones
Bernardo Atxaga es menos optimista. El escritor vasco no ha olvidado la tarde que fue a comprar libros a un almac¨¦n y se encontr¨® con que tres tomos de Historia del socialismo costaban 650 pesetas o que las obras completas de Mao Zedong se vend¨ªan a 800. "Me pareci¨® que aquel local era la tumba de las ilusiones pol¨ªticas de una ¨¦poca", asegura.Antonio Soler, ganador del ¨²ltimo premio Anagrama de novela por Las bailarinas muertas, recuerda el caso extremo de un autor que autoriz¨® que su libro se regalara a los clientes que compraran un determinado detergente. La obra en cuesti¨®n iba dentro de uno de esos botes de cinco kilos.
"Me parece una falta de respeto", dice al referirse a las rebajas de libros. De la trituradora no quiere ni o¨ªr hablar: "Si se apuesta por un autor debe mantenerse la apuesta frente a las contingencias del mercado, que a veces es puro capricho".
El escritor malague?o protesta tambi¨¦n porque muchas veces, cuando acude a una librer¨ªa en busca de una obra determinada, no la encuentra, como le ocurri¨® no hace mucho con el libro de Manuel Longares Soldaditos de Pav¨ªa. "Que se preocupen de dejar alg¨²n rastro en lugar de enterrar los libros", clama el escritor malague?o.
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