El Valladolid mete al Sporting en zona de peligro

Lo que ten¨ªa que pasar, pas¨®. La ca¨ªda del Sporting se hab¨ªa retrasado por la sucesiva llegada a El Molin¨®n de rivales complacientes, que disimularon los males gijoneses. En cuanto apareci¨® un equipo de cuerpo entero, con recursos y confianza a raudales, salieron a la luz todos los vicios ocultos. El Valladolid se llev¨® los puntos casi sin despeinarse, esperando su oportunidad. Ni el mejor repertorio dial¨¦ctico de Benito Floro podr¨¢ esta vez lavar la cara de un Sporting sin f¨²tbol, ni car¨¢cter, ni garra. Un equipo, en definitiva, con el descenso grabado en la frente.

Los jugadores del Sporting recibieron ayer el peor mensaje de su gente, el de la indiferencia. Muchos sportinguistas no quisieron ni verlo. Hubo bronca y pa?uelos tras los goles, pero despu¨¦s la nada, en consonancia con su equipo. La afici¨®n gijonesa dej¨® al final que 2.000 vallisoletanos se adue?asen de las gradas de El Molin¨®n. Antes, sus jugadores lo hab¨ªan hecho del campo.

El dominio del Valladolid fue t¨ªmido durante una hora y apabullante despu¨¦s del primer gol. El bal¨®n fue siempre de los de Cantatore, pero durante el primer tiempo les falt¨® pegada.

Un aviso de V¨ªctor precedi¨® al gol de Benjam¨ªn, una de las joyas de la cantera pucelana que ha explotado en los ¨²ltimos tiempos. A partir de ah¨ª, el Valladolid ya jug¨® a placer porque el equipo local perdi¨® la compostura que hab¨ªa mantenido mientras dispuso de un punto.