British Telecom pretende participar en la gesti¨®n de las filiales de Telef¨®nica en Am¨¦rica Latina

British Telecom (BT) empieza a hacer valer sus poderes en la puesta en marcha de sus cuerdos con Telef¨®nica. Los brit¨¢nicos, que a tienen el control de la segunda compa?¨ªa de telefon¨ªa de larga distancia de Estados Unidos (MCI), tratan de imponer sus condiciones en la alianza a la que se ha sumado Telef¨®nica. El presidente de BT, lain Vallance, ha reconocido que su deseo es participar en la gesti¨®n de las compa?¨ªas latinoamericanas que han hecho grande a Telef¨®nica (en Argentina, Chile o Per¨²). Y MCI afirma que si Telef¨®nica ofrece servicio al mercado hispano de EEUU debe renunciar a su marca.

La pretensi¨®n de Vallance se produce a pesar de que en el acuerdo inicial se reserva a la empresa espa?ola la gesti¨®n exclusiva de sus negocios en Am¨¦rica Latina. El hom¨®logo de Vallance en MCI, Bert Roberts, declara por su parte que si Telef¨®nica desea entrar en el mercado de habla hispana de EE UU tendr¨¢ que renunciar a su marca y ofrecer productos y servicios "a trav¨¦s de MCI". Por si no bastara, Gerald Taylor, consejero delegado de MCl asegura que a¨²n no est¨¢ decidido qui¨¦n dirigir¨¢ la nueva Telef¨®nica Panamericana-MCI, una empresa conjunta a cuyo frente Telef¨®nica proyecta colocar a uno de sus directivos.

El texto del acuerdo de Telef¨®nica con el grupo Concert (BTMCI), conocido el pasado 18 de abril, garantiza que la espa?ola mantendr¨¢ el control y la gesti¨®n de las actividades que desarrollen los tres nuevos aliados en Am¨¦rica Latina.

Seg¨²n esos acuerdos, Telef¨®nica deber¨ªa mantener plena soberan¨ªa en la gesti¨®n de Telef¨®nica Argentina, CTC de Chile, Telef¨®nica del Per¨² y otras compa?¨ªas participadas en Am¨¦rica Latina, sobre las que se ha apoyado la expansi¨®n internacional de la empresa espa?ola. Sus nuevos aliados reclaman m¨¢s protagonismo.

Durante un encuentro con periodistas de los pa¨ªses donde est¨¢ presente el grupo Concert, Bert Roberts fue el primero en asegurar que su deseo es participar en la gesti¨®n de todas las filiales de Telef¨®nica en Latinoam¨¦rica. Minutos despu¨¦s, el presidente de BT, ,lain Vallance, corrobor¨® las intenciones de los miembros fundadores de Concert.

Vallance, m¨¢s conciliador, asegur¨® que le gustar¨ªa que Telef¨®nica pueda entrar en el mercado de habla hispana de EE UU con su propia marca. Sin embargo, Roberts rechaz¨® esa posibilidad. El presidente de MCI afirm¨® que las prioridades del acuerdo son ahora el lanzamiento de la nueva Telef¨®nica Panamericana- MCI, que se ocupar¨¢ de gestionar una red de fibra ¨®ptica por toda Am¨¦rica Latina, y la entrada de Telef¨®nica en Avantel, una empresa controlada por MCI en M¨¦xico. Paralelamente, debe producirse la fusi¨®n de las actividades de Telef¨®nica y MCI en Puerto Rico. Gerald Taylor, consejero delegado de MCI, estim¨® entre 900 y 1.000 millones de d¨®lares (de 130.500 a 145.000 millones de pesetas) la inversi¨®n necesaria para poner en marcha la red Panamericana, un proyecto desarrollado desde hace tiempo por Telef¨®nica Internacional (TISA). El consejero delegado de la compa?¨ªa norteamericana asegur¨® que la inversi¨®n equivale al valor del 33% de Avantel que tomar¨¢ Telef¨®nica en un m¨¢ximo de dos meses.

Taylor dijo que desconoce el candidato de Juan Villalonga, presidente de Telef¨®nica, para dirigir la nueva Telef¨®nica Panamericana-MCI, y dio a entender que la elecci¨®n no est¨¢ cerrada. Villalonga ha designado, de forma p¨²blica, al m¨¢ximo ejecutivo de la sociedad conjunta con MCI, Fernando Panizo, director de desarrollo de Telef¨®nica Internacional. El nombramiento debe producirse en una reuni¨®n con MCI, en Washington, el pr¨®ximo d¨ªa 28.