El Poder Judicial reclama al Ejecutivo las competencias que a¨²n tiene sobre justicia

El Libro Blanco aprobado por el pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) da un paso al frente para el gobierno de la Administraci¨®n de Justicia, ya que propone asumir "todas las actuales competencias que en materia de personal judicial" mantiene el Ministerio de Justicia, "incluyendo las competencias presupuestarias". Asimismo, propone coordinarse con las comunidades aut¨®nomas con competencias transferidas en materia de justicia.

El Consejo analiza la situaci¨®n actual derivada de la distribuci¨®n de poderes del Estado y del reparto de competencias entre el Estado y las comunidades aut¨®nomas y llega a la conclusi¨®n de las dificultades que conlleva, definidas por la Junta de Andaluc¨ªa -en su respuesta al requerimiento del CGPJ- como "cierta esquizofrenia de gesti¨®n y decisi¨®n". Entre tales dificultades, se?ala la imprecisi¨®n en el reparto competencial, las disfunciones en la gesti¨®n, las dilaciones y la ineficacia.Y muestra sobre todo su alarma ante los riesgos para la independencia judicial, cuando las decisiones de los ¨®rganos de gobierno judiciales se refieren a personal no judicial de la Administraci¨®n de justicia -por ejemplo, en materia de horarios-, en cuyo caso las decisiones judiciales quedan sometidas a recurso ante ¨®rganos del Poder Ejecutivo, con lo que "se abre una v¨ªa para la injerencia del Ejecutivo en la actuaci¨®n judicial".

Para simplificar las diversas instancias, el Libro Blanco "se pronuncia decididamente", dice, al objeto de conseguir una unidad de direcci¨®n y una mayor eficiencia en la prestaci¨®n del servicio de la Administraci¨®n de justicia, en favor de la asunci¨®n por el CGPJ" de las competencias que retiene el Ministerio de Justicia, inclu¨ªdas las presupuestarias. El horizonte es la distribuci¨®n y coordinaci¨®n de competencias entre el poder judicial, en los aspectos b¨¢sicos para su independencia, y los ejecutivos de las comunidades aut¨®nomas.

Lentitud y horarios

Las investigaciones sociol¨®gicas utilizadas por el CGPJ muestran que la lentitud es una de las se?as de identidad de los tribunales de justicia. Seg¨²n una de ellas, de 1996, m¨¢s del 80% de los encuestados se mostr¨® de acuerdo con la afirmaci¨®n de que "las decisiones de los, tribunales son tan lentas que m¨¢s vale evitar meterse en pleitos legales". Igualmente, gran parte de las quejas tramitadas por el Defensor del Pueblo se refieren a dilaciones. El CGPJ vincula esta lentitud no s¨®lo con la falta de personal, sino tambi¨¦n con los horarios, ya que "la banda horaria de cumplimiento alcanza en el mejor de los casos entre las 28 y las 30 horas semanales".

La desaparici¨®n del control horario en las oficinas judiciales sugiere al CGPJ que ha demostrado "la incapacidad cong¨¦nita de la Administraci¨®n de justicia" para conciliar la independencia judicial con el "deber de dar respuesta a las demandas de los litigantes", a pesar de tratarse de un mecanismo de control "suficientemente asentado en otras organizaciones".

El dise?o que hace el Libro Blanco de la oficina judicial dista mucho de su arcaica configuraci¨®n aut¨®noma y tiende a integrarla en un servicio p¨²blico en el que existen muchos servicios comunes, que permiten una unidad m¨¢s peque?a, gobernable por el juez y en la que habr¨¢ que redefinir el papel del secretario judicial, coordinado con los servicios comunes.

Entre las medidas para mejorar la rapidez y calidad judicial, el Libro Blanco propone que en la sede de cada ¨®rgano de gobierno -decanato, audiencia provincial y tribunal superior de justicia- se establezca un Servicio de Informaci¨®n, Quejas y Reclamaciones, con independencia de los servicios de orientaci¨®n jur¨ªdica. Las quejas y reclamaciones se investigar¨¢n y se responder¨¢ al ciudadano "en lenguaje claro y preciso". El CGPJ explica que, al margen de las posibles sanciones, "la finalidad de este servicio no ser¨¢ la depuraci¨®n de responsabilidades disciplinarias, sino la de prestar atenci¨®n y ayuda al usuario de la justicia".

El juez, clave

Sobre la base de la importancia del juez para el funcionamiento de la justicia, el Libro Blanco trata de lograr "un tipo de juez" que integre los conocimientos jur¨ªdicos en los valores de la sociedad y que sea sensible a los derechos humanos y permanezca alerta ante "los abusos del derecho y las desviaciones del poder". Entre las novedades a incluir en las pruebas selectivas propone la verificaci¨®n de la cultura general y la capacidad argumental que debe poseer un juez, as¨ª como la unificaci¨®n de los procesos de selecci¨®n de jueces y, fiscales.

La formaci¨®n continuada se establece como una obligaci¨®n profesional del juez y se propone extenderla con car¨¢cter obligatorio a los jueces y magistrados que cambian de orden jurisdiccional. El Libro Blanco plantea nuevos m¨®dulos de trabajo tanto para conocer las necesidades de nuevas plazas como para calibrar el nivel de exigencia, cuantitativa y cualitativamente.